Capítulo 9: Teoría Aceptada.

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-¿Por qué haces todo sin avisarme? ¿Qué pretendías visitando a ese chico? ¿Disculparte? ¡Despierta imbécil! –dijo el padre.

-Deja de controlarme, deja de decir todo lo que debo hacer, me tienes aburrido ¡aburrido!

En ese entonces, oyendo los gritos de ambas partes, llega su madre, para poder calmar la situación un poco.

-A ver ¿Qué está pasando? Cálmense los 2, la mesa esta puesta, vamos a comer, nos van a servir.

-Si querida, vamos a comer, necesito un poco de distracción, tuve un día algo tenso.

-Yo no tengo hambre mamá, gracias, voy a mi habitación.

-Tú no vas a ningún lado Koke, te vas a lavar las manos y te vas a sentar a comer con tu madre y conmigo.

-¡No papá!, estoy aburrido de hacer todo lo que me impones, estoy harto de tener que seguir todos tus pensamientos y órdenes, ya me ha costado mucho ¿no? Claro, tú no has perdido amigos, no has pasado momentos incómodos, no te han acosado, no se han burlado de ti, no te tachan de sospechoso ¿O sí?

-Pero hijo, tienes a una novia maravillosa, que siempre ha estado contigo ¿Ella no vale nada?

-Cállate papá, hablas como si la conocieras tanto y ni siquiera cruzas palabras con ella ¿De qué sirve tener a alguien a tu lado si también te dice lo que debes hacer por obligación y no por lo que tu verdadero yo dice? Esto se acabó papá, se acabó, yo llego hasta acá –El muchacho aparto su vista de su padre y miró a su madre –gracias mamá, pero no tengo hambre, subiré a mi cuarto.

Habiendo dicho esto, Koke se largo a su pieza, buscó dentro de su closet una antigua foto donde se veía Bin, Igna y él, en una antigua cabaña que usaban como hogar para jugar cuando ellos se sentían solos, mismo lugar que koke llevó a Igna para eliminarlo del mundo, miraba aquella foto y solo tenía una profunda pena, no aguantó las lagrimas y se largó a llorar.

Por otro lado, Gerardo tomó el celular y escribió un mensaje diciendo "Está como loco y no puedo controlarlo mucho, tendrás que ayudar más".

Ángel, Anny y Victor iban llegando a la casa de Yerko, habían organizado esa junta-reunión para poder organizar la fiesta inaugural de ese año, la cual querían llevar a otro nivel.

La casa de Yerko era completa de verde pastel por fuera, su color favorito, y por dentro era de blanco con algunos tonos verdes muy suaves. Tenía en la entrada un pequeño lago con varios peces de diferentes especies, junto a varios gatos que rondaban por todo el lugar. El más destacado era una gata persa de color café claro, llamada Sulli, quien no se despega de Yerko cuando éste anda en la casa. Para llegar a la terraza donde se reunieron, los invitados tuvieron que pasar por el living, el comedor y parte de un estudio que él mismo Star usaba para grabar, con arco de luz, cámaras y micrófonos. Junto a estos implementos, había muchas cajas, con el sello personal del adolescente sobre ellos.

-Equipo cuidado con esta sala porque me salió muy cara, así que caminen de con cuidado, no se apoyen mucho en las cajas, tienen ropa que debo revisar para la colección de la próxima temporada y no quiero que se accidente.

Víctor pensaba para sí mismo, que como podría haber alguien tan pendiente de cosas materiales, pero luego recordó, que en base a eso es el éxito del hospedador. Él no encontraba que Yerko fuera una persona superficial, pero si está más que claro que su amor por las cámaras y la ropa sobrepasa muchas cosas.

-Ya gente llegamos, acá tomaremos las mejores decisiones, preparé este lugar exclusivamente para que discutiéramos todo acerca de la fiesta –exclamó el dueño de casa.

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