˚ೃ 一週間 ; ＩＮＯＴＡＮ

三日目 ━ 𝑑𝑎𝑦 𝑡𝘩𝑟𝑒𝑒 ೃ°

El día voló, había pasado tan rápido para aquellos jóvenes. Al llegar ambos recibieron un sermón por su tardanza en la clases y como todos los días seguían su rutina.

Una gran duda atormentaba desde ya hace un tiempo al de cabellos burdeos, el quería asegurarse de que aquel chisme que oyó era falso.

"si, a mi me gusta Inosuke-senpai"

Aquella frase se le había quedado en su mente dejando en claro su duda, repitiéndose una y otra vez como un disco rayado. No podía dejar de escuchar aquella suave voz diciendo tales cosas.

Con una amargura en su ser se dirigió a la cafetería antes de que el timbre le ganara corrió rápidamente sin preocuparse lo que pasaba a su alrededor, pero eso cambio cuando vio al chico de cabellos burdeos siendo jalado por aquella compañera que le atormentaba.

"No, por favor no" susurro para di mismo. Su cuerpo no sabia que hacer debido que observaba la situación desde una ventana del tercer piso, ¿correr para haya? No. Tanjirou quería ver cual era la reacción y respuesta de su enamorado.

Miro atento e Inosuke saco una carta rosa con stickers muy lindos, llamativa en pocas palabras, se rasco la nuca y río bajo. Mientras que la chica nerviosa grito el típico me gustas senpai lo cual al escuchar eso el de mechones azulados se dirigió a ella y le abrazo le dijo algo que nuestro pequeño Kamado no pudo oír alterándolo.

No paso mas que eso de hay chica salio corriendo con lágrimas en sus ojos y el ojiverde se retiro calmado.

El timbre había tocado para avisar que el receso había acabado y todos se fueron a sus respectivas aulas.

La tarde cayo con su típico cielo carmesí cautivando nos.

Lo veía caminaba severo con una gran sonrisa hacia el pero había algo que lo incomodaba; si, aquella chica seguía persiguiendo a su Inosuke.

Ella los observaba detalladamente esperando un momento donde el de ojos oscuros se retirara y los deje solos, pero claramente eso no iba a pasar.

—Tanjirou —dijo con una sonrisa para después cogerle de las manos y darle un besito en los nudillos. —, vamos a casa?

Aquel pequeño turrón sonrojado por la acción de su pareja en un impulso de querer un poco mas de afecto se hacer con lentamente al rostro del contrario.

—Tanjirou? —dijo extrañado por el comportamiento.

Se pudo de puntillas y le dio un beso en la mejilla o es es lo que quería hacer. El oji esmeralda sorprendido por la media luna dada solo pudo quedarse estático, el quería mas.

Pensamientos sucios, aquellos los de un pederasta venían en su pensar.

Tanjirou veía que la pequeña chica sorprendida por lo que paso se fue del lugar no llorando si no molesta empujando a todo el mundo, se sentía mal por ella.

Su atención otra vez fue para el de mechones azules y

—Inosuke? —sus palabras suaves aun mas hacían contribuir a sus pensamientos sucios, se agacho para buscar su mirada que estaba en dirección a suelo y le regalo una de sus típicas sonrisas para después preguntar —, estas bien?

«No, no estoy bien. Creo que estoy duro» pensó.

—Me —desvío su mirada y luego la dirigió directo a aquellos ojos oscuros. —, me das otro?

—En la casa te los doy.

Tanjirou era muy confiado, si bajaba la guardia el podría ser violado por aquella bestia.