— ¿Le puedes preguntar a mi tío si me puede llevar para una parte? 

Hoy iba a matar dos pájaros de un solo tiro. 

— ¿Pa donde vas tú?, TE ACABO QUE JALAR BOLA PARA QUE SALGAMOS EN LA NOCHE Y AHORA ASÍ DE FÁCIL TE VAS PARA LA CALLE?

— Voy a ir a hablar con Jungkook

— Ah... Le vas a decir que tú...

— Sí, de una

— ¡YO TE ACOMPAÑO Y ESPERO EN EL CARRO! — Salió corriendo seguramente a decirle a su papá que pusiera a calentar el carro para salir

Más chismosa imposible.

[...]

— ¿Quieres jugo de parchita? — Me preguntó Jungkook, se sentía raro estar sentado en su sala después de tanto tiempo... Sobre todo porque en ese mueble donde estábamos sentados... tuvimos nuestra primera vez. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo y reaccioné

— Dale pues, ¿Por qué no?

— Ven pa la cocina, tú no eres un extraño — Me hizo una seña con la cabeza y yo lo seguí. Como era costumbre me subí en el mesón de la cocina y quedé al frente de la nevera, Jungkook me sirvió el jugo y me lo entregó — Lo hice yo, quedó brutal

— Me imagino — Le sonreí — Jungkook... Hablemos de lo que pasó en la fiesta...

— Tae... Yo... Me arrepiento de como pasaron las cosas, y sí, se que te ocasioné un problema con Hoseok — Tomó mis manos y me miró directamente a los ojos — Pero no te voy a negar que me gustaría volver a intentarlo contigo... No me gustó que nuestra relación terminara así de esa manera, ni me dejaste explicarte, me borraste de todos lados y yo... Yo en serio te amaba, aún lo hago.

— Jungkook... No me digas eso, y mucho menos ahora en este momento... Esta situación no es fácil para mí — suspiré — Y sí, bloquearte y no dejarte darme explicaciones fue un error... Pero yo no me fui del país verdad? Pudiste haber ido a mi casa... Pero no lo hiciste. Te rendiste ¿Y ahora planeas aparecerte así y esperas que deje a Hoseok sólo porque aquí estas tú?. No es justo — Negué con la cabeza y me bajé del mesón — Gracias por el jugo, estaba rico. Espero que encuentres a alguien bueno para ti Ggukie. 

Él sólo se sonrió y soltó una carcajada — Coño... me dijiste todo esto y sólo puedo pensar en que... es una linda manera de romperme el corazón... ¿Me das un último abrazo? 

— Sólo un abrazo más nada — Le dije serio y el asintió con la cabeza. Lentamente me acerqué a él y enseguida me tomó entre sus brazos como solía hacerlo cuando estábamos en el liceo y yo le decía que tenía frío...

Cuando todos esos recuerdos invadieron mi mente y sentí ganas de llorar y me separé de Jungkook

— ¿Estás bien?

— Sí... Me voy a ir. Tengo que ir a hablar con Hoseok 

[...]

— UPAAA CACHETE, TÚ LO QUE ESTAS ES BELLO MI AMOR — Maria Victoria todo el tiempo vale... Pero bueno, la verdad es que si me había esmerado en verme bonito...  

— Ya vale — Le dije apenado — ¿Me veo bien?

— PUES CLARO NIÑO, camina que ya las muchachas están abajo...

Me tocó sentarme en el puesto de en medio y para más vaina, Maria Victoria iba sentada en mis piernas y COMO SI FUESE POCO, EL MARISCO QUE IBA MANEJANDO SE METÍA POR TODOS LOS HUECOS HABIDOS Y POR HABER... Cuando me bajé no sentía las piernas.

Pero bueno, peor es nada

Cuando entramos al tremendo salón quedé sorprendido... nO ERA UN MAMARRACHADA. 

Y pensar que mi fiesta de graduación fue en una pollera...

— Vamos a ver que hay de bueno en la mesa de los pasapalos pues — Maria Victoria me jaló por el brazo y como pudimos nos hicimos paso entre el poco e gente que estaba bailando...

— Coño pero esta gente tiene plata — Agarré un un tequeño y le pegué un mordisco — MANO AÑOS SIN COMERME UN TEQUEÑO, ME ENCANTA

— Claro, son carajitos de tipuro, qué esperabas? Obviamente que iban a hacer una vaina fina, dah. ¿No quieres ir a buscar un cóctel?, Ya vi a mi Turco, voy por él — Se vio en la cámara frontal de su teléfono y se acomodó las greñas

— Noo mi amor, deje así. Yo me quedo aquí comiéndome los ponquesitos y los tequeños, anda a mejorar la raza pues — negué con la cabeza y seguí con lo mío

— Si eres pajuo, ¿Tienes miedo de volverte a dar un beso de tres? — Me alzó las cejas y soltó una carcajada

— ¡MARIA VICTORIA TE DIJE QUE NO LO DIJERAS EN VOZ ALTA VALE!

— Llora pues. Ve quién viene allí — Me hizo una seña y yo me voltee... Era Hoseok — Chao pues, mejora la raza

Bueno, me va a dar una vaina.

— Hola vale, qué haces tú por aquí tan lejos de tu casa? — Dijo imitando el acento caraqueño... 

Mamaguevo. Sabe que me encanta cuando me habla así... 

— Vine a comerme los tequeños, no ves? — le sonreí 

— Ahh, yo vine a lo mismo, tengo rolo e hambre — Agarró un plato plástico y ese agarró de todo... Yo estaba burda de nervioso pero que va, tenía que hablar con él... Era ahora o nunca.

— Hobi... Yo... vine expresamente a hablar contigo, los tequeños son sólo una distracción... ¿Podemos hablar afuera? — Él me sonrió y me tomó de la mano (eso sí, no soltó nunca el plato)... Atravesamos el mar de gente que estaba en la pista de baile y logramos salir. 

Afuera habían un poco de muebles y sillitas las cuales estaban iluminadas con una luz morada, y en las mesitas habían galleticas y más pasapalos... 

—Hoseok yo... — Me interrumpió

— Quiero decirte algo... Yo sé que la cagué contigo, ese día no teníamos porque haber ido, tú te sentías incómodo pero yo insistí... Tampoco tenía que haber bebido ron así a lo loco, yo tenía que haber sido un buen novio y cuidarte porque tú no eres de beber... Pero ash, te juro que no sé qué me pasó... — Suspiró y me miró — Y Taehyung, yo entiendo si tú decides volver con Jungkook. Después de todo, ustedes tienen su historia y yo...

— Cállate

— ¿Porqué?

— ¿Quién te dijo a ti que yo voy a volver con Jungkook?

— ¿No?

— Claro que no pajuo — me reí — Hobi yo te quiero a ti... Y ya, olvida todo el beta de la fiesta, finge demencia... Por favor 

— Te extrañé mucho carajito — Me dijo mirándome a los ojos y lentamente se fue acercando y puso su mano en mi nuca para unir nuestros labios en un beso... — Vente que quiero bailar bachata contigo


¡LLEVAME PA TU CASAA! «Yoonmin»Where stories live. Discover now