Capítulo ll

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Margot

Entro a mi apartamento después de besar a Andrew, no estoy de ánimos para una noche con él, tal vez otro día, pero hoy no. Mis sentimientos por él estan muy claros, sé que de una forma estoy enamorada, es un hombre muy atractivo, asi como su carácter tiene muchas cualidades que me gustan.

Pienso y trato de comprender la desesperación de Quentin al pedirme que me casé con él de esa manera, no quiero hacerlo, por mucho dinero que me dé.

Trató de no pensar en mi padre, todo lo que Quentin me dijo del suyo solo hacia que pensara en la situación familiar que existe, y hace que quiera ayudarlo de alguna manera, pero no casandome con él.

Me desvisto y pongo mi camisón para dormir, mañana tengo trabajo por hacer y debo de ir completamente preparada y con la mente en calma.

Al despertar trato de iniciar bien mi día, pero solo puedo pensar en mi padre, necesito verlo. Tomó mi agenda y anotó la fecha más próxima y desocupada posible para ir a verlo.

Cuando llego a la pequeña oficina en la que trabajo, la mensajera me entrega unos sobres de parte de mi jefa, ella al parecer me cree incapaz de hacer algo que posiblemente consiguió acostándose con sus jefes.

Uno de los sobres es de parte del señor Quentin Sting, maldito acosador.

Dejo los sobres sobre mi mesa y comienzo a trabajar en los planos para el pequeño edificio que se me asigno, incluso planeo terminar hoy con el trabajo y dejar mi día de mañana libre, tal vez salga con Andrew al cine o trate de no pensar en la bella casa que Quentin me mostró ayer.

Nunca antes había visto una casa como esa con mis propios ojos, la ame, soñé con vivir en ella un día, aunque en compañía de Andrew no Quentin.

Salgo de trabajar tarde, pero me alegro porque mi trabajo está por ser terminado y próximamente aprobado, bueno eso espero.

Cuando llego a mi apartamento, lo único que deseo es dormí, por lo que eso hago, no sin antes comer un poco de cereal y yogurt.

El sonido de mi puerta me despierta, ahora mismo no deseo ver a nadie. Veo el reloj al lado de mi cama y marca las ocho de la mañana, bueno hoy llegaré temprano a mi empleo.

Me levanto y encuentro a un repartidor con un sobre amarillo tamaño carta y una media docena de tulipanes amarillos, el repartidor es un hombre mayor y parece agradable, firmo de entregado y leo la nota en el sobre.

"Tal vez te interese y te haga pensar, llama si quieres hablarlo.

Quentin."

Maldito, no voy a hacer nada de lo que él me diga, mucho menos interesarme por un sobre sin nada más que cheques.

Dejo el sobre y los tulipanes sobre la mesa y comienzo a preparar mi desayuno, café y unos huevos revueltos. Me siento a comer y contesto unos mensajes de Andrew, tal vez salga con él hoy.

Trató de ignorar el sobre que Quentin me mandó y la nota, no me conoce tan bien como para saber que me puede llegar a interesar o no, solo es curiosidad, pero no.

Quentin es idiota respecto a muchas cosas, pero en realidad es un hombre muy inteligente y sabe lo que hace con sus negocios, y yo soy parte de un contrato.

Dejo de pensar en eso y comienzo a arreglarme para ir a mi trabajo, todo indica que este será un buen día, dejando a Quentin de lado.

Al llegar a la oficina, mi jefa me ve un tanto enojada, claramente no me tolera, pero no debe de desquitar su frustración conmigo, entro a la pequeña oficina y comienzo a trabajar sin preocuparme por el sobre que deje en casa, sino que me relajo lo necesario para continuar mi día sin estrés.

IF WE MARRIEDWhere stories live. Discover now