Mi Chico Malo

-12-

-No te des la vuelta pero el mismo tipo de ayer me esta matando con la mirada

Ruedo los ojos y me doy la vuelta molesta

-Aaron ya te vas dejando de pensar mil maneras de torturarle porque te juro por mis santos ovarios que no va a pasar.

-Mierda, ¿tan obvio soy?

-¡Aaron!

Me disculpo con Iván con la mirada y me golpeo la frente, Aaron me rodea con su brazo y mira amenazante a Iván.

-Lo siento amigo-no hay que ser muy listos para notar su sarcasmo-pero yo llegué primero.

Le saca la lengua infantilmente y me arrastra hasta la otra punta del instituto.

-Aaron...

-¿si nena?

-Ya estás soltandome

-¿Estas molesta?... Si, estas molesta.

-¿¡Cómo quieres que no lo esté si acabas de avergonzarme frente a mi amigo!?

-¿Y cómo quieres que no lo esté yo si te pasas francamente todo el día con él?

Bufo, ¿todo el día?

-Mierda Aaron, ¡Tan solo estábamos hablando cinco minutos!

-Hoy

-Y ayer, ¿acaso estuve con él?

-No... Pero le sonreiste cuando os cruzasteis.

-¡Sonrio a todo el mundo!

-¡pero a él de forma diferente!

-¡No más que a ti!

Se me queda mirando.

-A, ¿que me miras diferente?

Me golpeo la frente negando con la cabeza.

-Eres el único que no te has dado cuenta...

-¿Quieres decir que yo...?

-Joder Aaron ¡Contigo todo es diferente! La forma de mirarte, de sonreirte, de hablarte... Lo notan todos...  ¡pero a ti lo único que te importa es que tengo un amigo que se llama Iván!

Hay un silencio incómodo, noto mis mejillas mojadas. Todo esto me supera...

Noto su incomodidad, sabe que la ha cagado hasta el fondo...

Me limpia las mejillas arrepentido y me da besos por toda la cara

-Lo siento... Sé que la he cagado, que no hago mas que lastimarte... Y creeme que no hay a quien mas le joda qué a mi. Es la primera vez que me siento así y no sé como conservarlo, como conservarte...

-Solo... Solo no te comportes como un imbécil posesivo porque no hay nada que odie mas que a los hombres posesivos.

-Lo sé y lo siento...

-No... No es tan fácil.

Pone cara de pánico al instante y me mira.

-¿Sigues molesta? ¡ya sé! Me comportaré mejor con Iván, ¡hasta le pediré disculpas!

Me río, él sigue.

-Te traeré y llevaré todos los días en moto, te llevaré la mochila, te compraré el bocadillo, ¡hasta te haré los deberes!... Vale, eso no es buena idea... ¡pero puedo ayudarte con mate! Te mimaré cuando estés enferma o en tus días y...

Le cogo de la camiseta y lo atraigo a mi para callarlo con un beso, esto le entra desprevenido pero no tarda mucho en rodearme con sus brazos para acercarme a él y profundizar el beso.

Nos separamos cuando nos falta el aire y juntamos nuestras frentes aun abrazados.

-Guau, esto no me lo esperaba...

Sonrío orgullosa.

-Tú tampoco sabes mucho de mí...

-Me gustaría averiguarlo...

-Puedes...

Sus ojos brillan de la satisfacción.

-...pero antes tienes que disculparte con Iván, llevarme en moto y ayudarme con mate.

-¿De verdad tengo que hacerlo?

-¿El qué?

-Disculparme

-¡Ni lo dudes!

Le miro otra vez molesta

-Vale vale, solo preguntaba...

Suavizo un poco más el rostro.

-Es que odio que te comportes así con mis amigos. Solo son eso, amigos

Baja la mirada avergonzado

-Lo sé pero... Tengo miedo de que decidas estar con otro que no sea yo...

Niego con la cabeza y le abrazo apoyando mi cabeza en su pecho, él me aprieta más fuerte.

Nos mantenemos así hasta que escuchamos el timbre, vuelta a clase.