«Está en el sótano, bajó ahí desde que soltó a Kathryn, hablaba de hacer volver la magia a Storybrooke, yo he entendido mucho»

«Ok, David quédate con Belle, yo voy a buscar a Gold»

«¿Estás segura de que te puedes ocupar tú sola?»

«Sí, tengo un arma y él no»

«¿Y por lo que se refieres a la magia?»

«No creo que haya encontrado el modo de reactivarla, necesitaría más tiempo, si necesito ayuda, te llamo, prometido»

«Ok» asintió él «solo ten cuidado»

«Hecho»

Entré en la casa y no tarde mucho en encontrar la puerta que daba al sótano. La abrí con la ayuda de una horquilla, técnica que aprendí antes de ir a la cárcel y que ha resultado ser muy práctica.

Al bajar las escaleras, encontré a Gold sentado en una mesa, en el centro del sótano, mezclando diversas sustancias.

«Poco importa lo que esté intentando fabricar, quiero que lo deje inmediatamente» dije

«¿Y por qué, sheriff Swan?»

«Porque queda arrestado por el secuestro y la agresión a Kathryn Nolan»

«No tiene ninguna prueba»

«Ella ha puesto una denuncia contra usted, es prueba suficiente y también tengo las fotos de las heridas que le causó» le respondí haciendo que levantara por la fuerza para ponerle las esposas, y haciéndolo pasar delante de mí, al subir las escaleras «Podemos irnos David. Belle, si lo desea, puede acompañarnos»

«Sí, lo prefiero...no deseo quedarme sola aquí»

«De acuerdo, en ese caso, síganos...»

«¿Rub, Henry? ¡He vuelto!» dije abriendo la puerta de la casa de Regina, dejando pasar a Belle a la que había traído conmigo.

«En el salón» me respondió Ruby

«Estamos jugando a la Wii» creyó oportuno añadir Henry. Entré en la estancia encontrando a mi hijo y a la que consideraba como mi mejor amiga bailando como locos con "Call me maybe" de Carly Rae Jepsen.

«¡Ni siquiera sabía que aquí había una Wii!» exclamé mientras que su baile acababa con la victoria de Ruby.

«Mamá me la compró hace unos meses»

«Ok, ¿todo ha ido bien?»

«Super, hemos dejado a Kathrynh en su casa y después hemos venido para acá, he tomado una ducha y como nos aburríamos propuse jugar a Just Dance»

«Ok, oh, he traído a Belle conmigo, me he dicho que podría quedarse un tiempo aquí. ¿Crees que molestará a Regina?»

«No lo creo» me aseguró Henry «pero si quieres asegurarte, llámala»

«Es lo que voy a hacer. Rub, Henry, ¿podéis llevarla a la habitación de invitados?»

«Sin problema» confirmaron los dos. Ruby soltó su mando, y se giró hacia Belle, su sonrisa se agrandó si eso era posible, sus ojos brillaron antes de dejar escapar un

«Hey...»

«Buenos días» respondió tímidamente la joven a mi lado, sacándome una sonrisa antes de desaparecer para llamar a Regina, que respondió al primer toque.

«¿Todo bien?»

«Todo muy bien, cariño, no te preocupes» le respondí y ella suspiró de alivio. Yo subí y entré en la habitación «He arrestado a Gold, pero no podía dejar a Belle sola, así que le he propuesto quedarse en tu casa algunos días, espero que no te moleste»

«No, en absoluto, has hecho bien»

«Ok...Y he hablado con David...»

«Oh, ¿ha ido mal?»

«No, lo contrario. Me ha preguntado si era feliz contigo, que si lo era, eso era lo que importaba, lo he encontrado extraño, sobre todo viendo cómo ha reaccionado Mary Margaret»

«David no tiene conmigo el mismo pasado que tu madre, honey, es normal que haya sido menos duro convencerlo»

«Lo sé...pero con lo que ella te hizo, no debería meterse entre nosotras como lo está haciendo»

«Yo también le hice daño, lo sabes...»

«Pero fue ella quien comenzó» repliqué antes de que una risa resonara al otro lado

«Eres adorable» fue su única respuesta sacándome una sonrisa

«Tú eres la adorable. Pasaré a verte esta noche con la cena, podemos comer juntas, ¿qué te parece? Eso nos permitiría terminar la velada que no pudimos terminar la última vez, estoy segura de que Ruby estará contenta de cuidar a Henry, parece que se llevan bien, cuando he entrado, estaban jugando a Just Dance»

«Me gusta mucho ese juego» dijo Regina haciendo que mi sonrisa se agrandara. Me la imaginaba en pantalones cortos, muy sexy, saltando en todos los sentidos, con un mando de la Wii en la mano

«¿Mamá?»

«¿Sí, Henry?»

«¿Vienes a jugar con nosotros? Le estamos enseñando a Belle cómo funciona la Wii»

«Hm.., ok, voy»

«Super» me sonrió antes de salir y dejarme que acabara de hablar con Regina

«Voy a dejar que vayas a jugar, ¿a qué horas vienes?»

«¿A las 19:00? ¿Te va?»

«De todas maneras no me voy a mover» me respondió ella, provocándome una sonrisa divertida, definitivamente amaba su sentido del humor

«Espero que no te muevas, hasta luego, te amo»

«Yo también te amo, diviértete»

«Gracias» susurré antes de colgar. Salí de la habitación para unirme a Ruby, Belle y Henry en la planta de abajo para una partida de Just Dance.


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