Idea

1.8K 231 46
                                    

14 AÑOS DESPUÉS

POV: Max

-DESPIERTA IMBÉCIL -sentí el impacto de una almohada en mi cara- Prometiste acompañarme hoy a la frontera.

Maldición, casi lo olvido.

-Ya voy, no era necesario despertarme de esta forma Charles -me levanté y le dirigí una mirada acusadora-

-Perdón, estoy emocionado, hoy pediré el permiso de cortejo para Sergio y quiero que todo salga perfecto.

-¿Y por qué no le avisas a tu papá que encontraste a tu destinado y ya? -dije mientras me estiraba-

-Ya te lo dije, él sabe que ya lo encontré, el problema es que es de la manada Accalia. A mi padre le dará un infarto si se entera, así que date prisa.

El clan Accalia no era enemigo nuestro, de hecho de nadie, la situación es que es una manada un poco conflictiva, además de que siempre presionaban a otras manadas a ayudarlos, ya que sus tierras no eran muy fértiles y su población de presa era muy reducida. Y no es que fuéramos insensibles, simplemente hacer un tratado con ellos equivaldría a aceptar no recibir nada de la otra parte y eso no era posible, lo más importante para el clan es la supervivencia de su manada, no podíamos darnos el lujo de apoyar a otros solo porque si.

Me duché, me cambie y me despedí de mis padres. Ambos fuimos hasta el río que separaba al clan Accalia de nuestro clan, Marrok.

-Listo, es hora, deséame suerte -Charles se quitó la ropa, se convirtió en lobo y pasó sobre el río al otro lado-

-¡Suerte! -le grité antes de que se perdiera de mi vista-

Charles era mi mejor amigo, nos conocíamos desde cachorros. Su padre era Ingolf de mi clan y mi padre era el comandante de seguridad, así que no fue raro que nos volviéramos amigos.

Hace poco más de un año había encontrado a su mate, al parecer su enamorado era hijo del Ingolf Otmar Szafnauer, de la manada Accalia, por lo que se veían de escondidas en el territorio de ellos.

Yo jamás lo había visto, pero Charles lo describía como el omega más seductor y adorable del mundo, me parecía muy exagerado, no había omega más hermoso que mi Lando, pero no podía culparlo, Charles estaba profundamente enamorado.

Al igual que él, yo había encontrado a mi destinado, Lando Norris, era hijo del líder de la manada Ragnulf, aunque a diferencia de Charles, yo no tenía que ocultarme para estar con él, habíamos estado saliendo por dos maravillosos años.

Debo decir que yo no era del agrado de su padre, me trataba decentemente, pero era muy evidente su cara de disgusto cuando me acercaba a su hijo, y sabía la razón de ese desagrado.

No es que yo fuera un alfa débil, era muy fuerte, ágil y con un gran conocimiento sobre estrategias de ataque, pero mi cuerpo no era robusto y grande como los alfas normales, yo era algo delgado. Yo no entrenaba tanto y tampoco me gustaba cazar por gusto como los demás lobos, solo lo hacia para conseguir alimento.

A mi me gustaba más lo técnico, para mi una batalla debía ser bien planeada, no sólo lanzarse a secas contra el enemigo, mi padre siempre me enseñó a prepararme ante cualquier adversidad. Una buena planificación lograba vencer a cualquiera con el mínimo esfuerzo y sin ningún rasguño.

De todas formas, eso no importaba, solo me interesaba la opinión de mi futuro omega, después le demostraría a su padre que era digno de su hijo.

--------------------------------------------------------------

Estuve esperando unas horas hasta que por fin regresó Charles, saltando de la felicidad.

-Supongo que te fue bien -tomé su ropa y se la acerqué-

Instinto primario (Chestappen)Where stories live. Discover now