𝐋a 𝐇ija 𝐃e 𝐊akucho. [𝐁onten]

🐇;; OO3

¡𝐎kay!, cómo algunos sabrán, Bonten nunca ah experimentado tener un bebé, sus necesidades, sus cuidados, las etapas qué tienen, etc etc.

𝐄l primer mes que "___" nació fue el mejor mes podríamos decir, siempre en los brazos de su familia (considerando también a las mucamas).

𝐋a primera etapa fue: Abrir los ojos.

𝐄s una etapa que para muchos es importante y Bonten no es la excepción.

𝐂omo todos los días, Bonten se levantaba con un agradable ambiente y olor.

𝐏ero se sentía extraño, nadie sabía el porqué, hasta que Kakucho tuvo que agarrar su legítima.

𝐒e quedó mirando fijamente a la bebé en sus brazos, la pequeña fruncía el seño y movía sus ojos cómo queriendo saber que algo la molestaba.

𝐊akucho entendió lo que quería hacer su hija, ¡abrir sus ojos!, el anhelaba que "___" sea la pura imágen de su antigua amada, Merida.

/Instinto paternal, solo digo eso.

— Mucama, trae a todo Bonten lo antes posible.

— Sí mi señor. — Dijo dando una reverencia rápida e ir hasta los ejecutivos quiénes tomaban una taza de café. — Mis señores, el señor Hitto los llama.

— ¿Sabes para qué? — Preguntó Ran parándose inmediatamente. —

— No lo sé, pero al parecer es sobre "___". — Soltó como la sapa que es. Bonten no perdió el tiempo y fue hasta la habitación de Kakucho y "___". —

𝐀l entrar un fuerte olor a leche llegó a sus fosas haciéndolos revolver el estómago.

— ¿No ventilas tu cuarto? — Siseó rindō, a este no le gustaba oler tal olor, se tapó la nariz con asco. —

— Será mejor que vengan al menos que quieran perderse la primera etapa de "___". — Se pusieron al lado de Kakucho muy entusiasmados por saber cuál era la primera etapa de "___". —

— ¿Cuál es su primera etapa? — Preguntó Mikey. —

— Dedujo que es abrir los ojos.

— ¿Y si es ciega? — Preguntó Ran. —

— ¿No puedes cerrar tu boca? — Preguntó rindō hacía su hermano. —

— ¡Yo digo que tendrá lo mismo que Kakucho!

— Unos ojos rubí serían hermosos.

— Pero es pelirroja, 2 colores no funcionan, no dan.

— ¿Quieres qué sean igual que de su madre?, mierda, son horribles.

— Son color esmeralda, que tú te sientas importante por tener ojos morados no es nuestro maldito problema.

— ¡Oye! ten un poco de respeto hacía nuestros ojos únicos.