_Doble máscara_(Harco)

Hola

-Estamos hoy aqui reunidos, para unir las almas de estos dos jóvenes,pasaron miles de dificultades y aquí están, una verdadera prueba de que el amor existe - rieron, Draco volvió a sentir ese movimiento que hizo hacer una mueca, Harry lo miró con ceño fruncido pero este acarició la mano para tranquilizarlo.

-Harry,¿resives a Draco para unirte a él en sagrado matrimonio, en la salud y enfermedad durante el tiempo que estes en su vida? - Hablo Dumbledore mirándolo serio.

-Si quiero. - respondió de inmediato.

-Draco, ¿resives a Harry para unirte a él en sagrado matrimonio, en la salud y enfermedad durante el tiempo que 3stes en su vida?

-Si quiero. - sonrió.

-Repite después de mi - Dijo Dumbledore - Yo Harry, te recibo a ti Draco para ser mi esposo, para tenerte y protegerte de hoy en adelante, para bien y para mal, en la riqueza y
en la pobreza, en salud y en enfermedad, para amarte y cuidarte hasta que la muerte nos
separe.- terminó y Harry lo repitió con una gran sonrisa.

-Draco repite, yo Draco, te recibo a ti Harry  para ser mi esposo, para tenerte y protegerte de hoy en adelante, para bien y para mal, en la riqueza y
en la pobreza, en salud y en enfermedad, para amarte y cuidarte hasta que la muerte nos
separe. - Draco lo repitió entre risas por los nervios.

Procedieron con los anillos, una de plata y otro de oro en ellos se podía leer Dragon y León.

-Pueden besarse,ahora están casados - Dumbledore aplaudió soltando el libro que tenía.

Hubieron aplausos y risas, sollozos, mientras ellos sólo se besaban sonriendo.

Draco sintió otra patada pero más fuerte eso sí fue doloroso.

-Draco tu fuente. - dijo Harry viendo el piso con ojos como lechuzas.

-Mierda, ahora no. - se quejo.

-Hijo  - Narsissa había subido al altar.

-Joder. - se quejo, le dolía.

-Hay que llevarlo a San Mungo, ya. - dijo Narsissa viendo a Lucius que asintió y salió corriendo.

-Respira, amor. - Harry acarició su cabello.

-¿Cómo putas madres voy a respirar, Potter? explicate. - Le grito con una desesperación en su voz.

-Lo estás haciendo. - analizó Harry.

-Callate. - advirtió.

Lo llevaron al hospital entre gritos, sustos, nervios y temblores.

Al menos ya estamos casados, pensó Harry.

-Solo el padre puede venir conmigo - dijo el doctor viendo a Harry que corrió hacia allá.

Cuando llegaron Draco ya no tenía dolor, lo habían anestesiado para la cesaría, Harry se alistó y se puso a la par.

-Los niños. - dijo Draco apenas llegó a tomar su mano.

-Que emoción.- sonrió Harry nervioso.

Después de unos momentos se oyó el sollozo de un bebé, luego dos.

-Nacieron a las 2:39 p.m. - anunció el doctor, se los llevaron.

Duraron un gran rato hasta venir con ellos en brazos.

-Hola niños. - Draco los resivio con lágrimas, uno tenía un cabellito rubio y otro azabache. - ¿Estas llorando, Harry?

-No se me metió algo en el ojo. - dijo sarcástico acariciando las manos de los bebes.