"Con 19 años creo que debería haber visto mucho más mundo del que realmente he visto. Mi casa es como una cárcel dorada de la que no puedo salir. Mi nombre es Samantha, pero todos me llaman Sam, lo prefiero así. Sueño con poder salir del pueblo donde vivo en Texas, Estados Unidos. Siempre he querido ir a vivir a Inglaterra. Y como cualquier chica de mi edad, siempre estoy buscando el amor allí donde miro. Siempre tengo pequeños enamoramientos, pero nunca correspondidos. Supongo que algún día encontraré al chico de mi vida. Solo espero que sea pronto." Que ingenua fui al decir esas palabras... pero con 19 años nadie se espera que la vida sea tan dura, como de hecho es. Si alguien me hubiera dicho que mi mayor problema no sería la "falta de libertad" que tenía con mis padres, seguramente le habría dicho un "ok" y habría montado una pataleta de niña pequeña. Pero... en estos tres años que han pasado, la vida se ha encargado de demostrarme lo equivocada que estaba. Ahora me gustaría volver a mi cárcel dorada, de la que tanto me quejaba.