Siempre uno tiene un poco de esperanza para no ser elegidos a participar de los terribles “Juegos del Hambre” que eran conocidos como un honor para quien debería acudir. Desde que los prisioneros de guerra fueron esclavizados y separados por distritos, todo lo que sabían de su forma de vida había cambiado. Vivir o morir, pisotear o ser pisoteado. Soportar la hambruna que habitaba en todos los hogares y la humillación por parte del “Capitolio”. Cada pedazo de pan era apreciado y luego, añorado. Pero si llegas a entrar a Los Juegos del Hambre, tu vida es lo que más intentaras apreciar… Así a lo largo de los años, muchas personas murieron para divertir a la gente pero, ¿qué hechos ocurrirían si están involucrados seres más allá de ser humanos y con capacidades que ninguno jamás podría realizar? ¿Será posible que los tributos puedan escapar de la muerte en los 24º Juegos del Hambre?