Jongkey ~ Oneshots

Amo-Esclavo ~ Cap único n.n

-Toma Jonghyun  - dijo un alto señor de unos 50 años a su hijo entregándole así su regalo de cumpleaños.

Jonghyun  frunció el ceño y mire enojado a su padre.

-¿Qué es esto? - dijo sosteniendo la pequeña caja de regalo y poniéndola frente a la vista de su padre

-¡¡Dijiste que serían dos enormes regalos!! - grito Jonghyun  al haber tenido semejante decepción.

-Jonghyun  ábrelo - dijo el padre tan calmado como pudo, ese chico de aspecto calmado y tierno era muy engañoso y siempre lo sacaba de sus casillas.

Aun enojado el menor de ambos abrió la cajita y observo unas llaves, su rostro cambio a uno confundido y luego observo un papel doblado en el fondo de la cajita, lo abrió así entendiendo de que eran las llaves.

-¿Una casa? ¿Mi propia casa? - dijo el chico al leer el contenido de aquel papel.

-Si - el padre hizo una pausa y suspiro -En esa casa se encuentra tu otro regalo - dijo sentándose en su sillón y viendo como su hijo sonreía de lado.

-Entonces me iré - dijo dando la vuelta y dirigiéndose a la puerta -Gracias - dijo en un susurro.

******POV Jonghyun ******

Me subí a mi carro y me dirigí a la dirección que decía en ese papel.

Kim Jonghyun , ese es mi nombre completo, tengo 24 años.

Puedo aparentar ser tierno y dulce  cuando soy todo lo contrario, en realidad soy muy terco, ambicioso, malhumorado, malvado ,Sexy y muchas cosas más de las que no quiero hablar en estos momentos.

Había escuchado la conversación de mi padre con un amigo diciendo que me darían a un chico como mi "esclavo" personal, eso me hizo tan feliz porque haría sufrir a esa, persona, ya era hora de tener un juguete nuevo.

Al pensar en eso pude sentir como una sonrisa llena de maldad se formaba en mis labios.

Conduje lo más rápido que podía porque tenía unas ansias de ver a esa persona y comenzar con la tortura.

Llegue por fin a la casa, no era tan grande pero era pasable.

Entre aun con la sonrisa malvada que tenía desde que había entrado a mi auto.

Camine viendo cada detalle de la casa tanto como estructural como amueblada.

Por fin viviría por mi cuenta dejando a todos atrás y olvidando cada mala experiencia que tuve en aquella casa, jamás me sentí orgulloso de que mi padre fuera el jefe de unos mafiosos aunque siempre acepte cada regalo de lujo que me entregaba y hasta pedía más y más.

Camine por el pasillo hasta llegar a la cocina, estaba muy bien arreglada.

Estaba tan sumido en mis pensamientos que no me había percatado de una mirada que estaba posada en mi espalda hasta que escuche un crujido y me gire para ver que era pero no encontré nada, muy cabreado camine saliendo de la cocina y por fin lo mire creo que era aquel "esclavo" que mi padre me había regalado.

-¿Que estás haciendo? - dije en un tono muy enojado a lo que él me miro muy asustado.

-Ehh...pues...y-yo...esta-ba esperando p-por usted - dijo nervioso mientras bajaba la mirada al suelo.

-Pues ya vine - dije con el ceño fruncido y acercándome a aquel chico de piel muy clara y cabello marron oscuro junto con aquellos ojos gatunos que me miraban llenos de miedo -Ve y trae mis cosas del carro .