Unnamed

Sentado,solo... nada me podía reflejar lo que el destino me podía encaminar, confundido desesperado, tomo conocimiento de los actos que hice y como eso afectaría a mi persona.

Llegué desesperado a una misa de día Domingo, jamás había asistido a alguna, fue extraño, pero la necesitaba... la explicación no la sabía, trataba de recordar que había sido de mi días atrás pero no lo pude hacer.. simplemente necesitaba la misa. Escuchando las canciones y viendo todas las penas e historias que se llevaban a cabo en aquella, me relajé, salí de ella y me encontré con unas casas color marrón, como las de historias de vaqueros.  Fue extraño para mi ver esas casas puesto que las que yo veo son simples, con suerte pintadas, ni si quiera se si estaban hechas de concreto y cuando estoy en una de ellas, colapso y vuelo.

Al pasar las casas recordaba pedazos de historias que me contaban mis abuelos, grandes personas para mi ya que fueron los que me criaron y hoy día no estan para acompañarme en esta nube de ideas raras, de pensamientos grotescos y bizarros.

Un día fuí un superheroe rescatando a los gatos de los arboles, ayudando a mis queridos abuelos entregandoles buenas notas, educandome y sintiendo ese grado de admiración propia por los logros que obtuve. El tiempo fue cambiando, ya no era lo mismo.... la educación se perdió, se soñaba con que se podía hacer algo en la Sociedad y ayudar a los necesitados, pero el mundo es cruel, te golpea cuando menos lo esperas... mis abuelos fallecierón y no sé que sucede, llevo 30 años detrás de una celda y ellos viven en mi recuedo y no sé porque tengo esta presión encima de su muerte... yo solo quería un poco mas de lo que me ayudaba día a día, a olvidar esos juegos nocturnos que me obligaba mi abuelo a hacer mientras mi abuela no estaba, yo lo quería y no entendía lo que sucedía, hasta que murieron, quedé solo y me desesperé.. Seguí usando lo que me ayudaba a olvidar y me tocó ami también jugar con alguien mas