Camina conmigo y déjate llevar

496 11 4
                                    

Los sentimientos al pasear por las empedradas y en verano polvorientas sendas de esta comarca  desprenden una sensación inigualable. Desde la sierra de los santos hasta la torre del castillo, la magia fluye cual riachuelo en periodo invernal,  sumergiéndonos en un sueño de encanto, embrujo y pasión infinita.

Este es el comienzo de una aventura por los parajes de Belmez. Desde los más verdes prados, hasta la caliza más pura con la que nos topamos en los muros del castillo. Humildemente le invito como lector y acompañante a disfrutar de este dulce viaje. Un viaje que hasta ahora era desconocido por la mayoría de las viajeros, transeúntes y caminantes difícil de ver, incluso para la mayoría de los que cada jornada disfrutan del paso de los días en este particular paraje. 

Tendrán cabida en nuestro viaje los risueños paisajes del entredicho. Fuertemente marcados por la tradición y el afecto de sus gentes; en sus tierras disfrutaremos de la naturaleza en su más puro estado, el encanto de sus gentes y una muestra de vida que nos retraerá a tiempos inmemoriales, en los que el paso del tiempo solo estaba marcado por el ascenso y la caída del astro rey.

La afable aldea de Doña Rama nos cederá unos instantes de su larga historia, que aprovecharemos para  compartir con ella, algo más que el tono pálido de los muros de adobe que sostienen sus hogares o el verde esmeralda que desprenden los campos de olivos al atardecer.  Compartirá con nosotros el saber de sus gentes, el duro trabajo de la labranza, y como no, el olor a jara y tomillo que inundará nuestros pulmones, algo solo posible en esta idílica aldea enfrascada en plena Sierra Morena.

No puedo, ni quiero ocultar la devoción que siento por la tierra que me vio nacer. Cuando hablo de El Hoyo mi mente solo puede comenzar a volar entre la sierra que lo circunda y lo han resguardado desde tiempos inmemorables. Unos cerros salpicados de olivo,  uno tras otro, como si fueran el resultado de las lágrimas de un llanto, que desde las alturas y en un gesto de ternura, un chiquillo ha derramado sus doradas lágrimas allá por donde pasaba. En el centro de aquel desfile de alturas toma forma una pequeña aldea en donde junto contigo, amigo lector, compartiremos momentos y experiencias únicas.

Disfrutaremos como no del eje del municipio, la noble villa de Belmez, villa histórica donde las haya, coronada por el mítico castillo de Belmez, impasible vigilante del paso de los años y de la vida de sus habitantes. Tomaremos conciencia de los tiempos pasados del municipio en el Museo Histórico y del Territorio Minero, en donde una estupenda colección de piezas nos desbrozará poco a poco la historia de Belmez y nos preparará para las posteriores visitas al gran monumento monolítico conocido como el Dolmen de Don Pedro, a los castilletes de las minas que marcaron el pasado azabache de Belmez, a sus ermitas centenarias, y como no, al impresionante castillo que domina todo el terreno de la localidad.

No perderemos la ocasión de visitar todos aquellos lugares que se nos presenten durante nuestro caminar. Visitaremos las grandes dehesas de encinares centenarios, los antiquísimos viñedos locales que nos ofrecen el típico vino de pitarra, pasaremos sin duda, por los majestuosos olivares que año tras años producen el preciado oro líquido, el aceite de oliva. Inmensos valles, teñidos de verde en primavera y dorado en periodo estival quedarán tras nuestros pasos, pero sin olvidar jamás que nuestra principal tarea será la de disfrutar de cada una de las sensaciones que esta tierra nos brinda y que durante este viaje te invito a conocer y disfrutar. Sin más, que empiece el viaje…

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Sep 17, 2012 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Camina conmigo y déjate llevarWhere stories live. Discover now