Ciclo entre el Bien y el Mal

El Ciclo del Bien Y El Mal

Es (Probable) que en el primer inicio (de tantas historias que aquí se contaran) el bien haya llegado primero (primera posibilidad en esta serie de historias) que el mal o al mismo tiempo, sin embargo la primera afirmación parece ser la más acertada, si consideramos el primer término como "el auténtico" por la posibilidad de la estabilidad que tendría que haber existido, con una supremacía del bien y una inferioridad del mal podemos argumentar que solo de esa "estabilidad", provista por el bien puede haber surgido el "ambiente" para albergar "el elemento neutro" (es decir la realidad, existencia y los seres vivos). Según este argumento si el mal hubiera existido primero, el caos resultante por su aparición degradaría desde sus inicios el elemento neutro y la totalidad de y nuestra existencia.

 Si por el contrario el bien y el mal hubieran aparecido a la vez, ese "caos" resultante impediría el proceso del "neutro" que es ajeno por ser un elemento aparte del bien y el mal, pero es "dominado" por ellos.

 Ahora bien de la "estabilidad" causada por la supremacía del bien, surgió en sus sombras el "mal" y comenzó, al principio como una defectuosa, inevitable y secundaria consecuencia de la "perfección del bien". Esa subestimación o ignorancia provocada directamente o indirectamente por el bien, le dio al mal el oxígeno o cubierta necesaria para nacer o crecer poco a poco. Llegado el momento la misma naturaleza del bien o su omisión causaría inminente mente un crecimiento lo suficientemente importante del mal como para entrar a la superficie y darse a conocer con su característica naturaleza impredecible ante el bien y la realidad, esta es la segunda parte del ciclo y la mas común, los constantes cruces entre el bien y el mal que no llegan hasta la confrontación (aún). También se podría llegar a decir que estos "cruces" representan una tenue estabilidad (si son "tenues" claro) pero sobre todo un equilibrio entre dos fuerzas potentes sin aparente superioridad entre si. Aquí es el lugar en el que la realidad se desarrolla libremente con todas esas cosas sucediéndole al azar y a cualquiera, ese estado sería lo común.

En la tercera parte del ciclo cuando el mal se afianza lo suficiente como para rivalizar (o incluso obstaculizar) a un apacible (en ese momento) bien. Esta parte, la más inestable, tiene dos caminos, que el bien acabe con el mal o el bien permita (un poco más) el crecimiento del mal. La realidad, la existencia y los existentes se encuentran (quieran o no) envueltos en esta tensión constante. Escogido el 2do camino se llega al máximo nivel se llega al máximo punto, la cuarta y última parte del ciclo. El bien (que por su carácter de ser toleró al mal) ahora cambia su personalidad y no puede elegir más (si es que lo pudo hacer) mientras que el mal incrementa su campo de acción a tal punto que él mismo se deforma (esto incluye el hecho de que no se puedan distinguir si ciertas cosas son buenas o malas) y es incapaz de ocultarse, y comete su grave error, haber demostrado su verdadera cara (algo que nunca terminó de exponer) y grotesca esencia ante todos. El bien sin embargo y a diferencia del mal (que va in crescendo su existencia) tiene dos caminos, la tolerancia que puede llagar a ser extrema o ligera o la "defensa de si mismo" es decir protegerse a si mismo y a los buenos.

 Se llega al clímax y punto final de quiebre entre estas dos "fuerzas fundamentales abstractas", desde el primer inicio y ahora se dio vuelta la realidad entera (valores erróneamente acordados como buenos vuelven a ser malos por ejemplo etc.) ya que el mal es quién tiene ahora la supremacía absoluta del bien hasta que natural-consecuente-inevitable y obligadamente el bien debe y entra al fin en acción, no por mera su voluntad (ya que no las tienen si no las personas que las ejercen, porque en este punto el elemento neutro hace uso y control de una de las dos fuerzas abstractas para eliminar a la otra, como son ciclos hay momentos de convivencia, como de enfrentamientos) si no por mera inercia del ciclo o flujo de la naturaleza, que llegó a un punto límite que de no romperse el equilibrio y el ciclo en si se romperían y con ello solo quedaría el caos en el todo. A partir de este momento cíclico la realidad ya no se mantendrá sujeta (solo) por la supremacía del mal, el bien actuará ante el mal (ya sea que tenga menos poder que el o no porque el enfrentamiento en sí es irreversible) como el humano actúa inevitablemente ante el alimento cuando el hambre le pide la necesidad de comer, algo quizá más automático, directo y estrictamente necesario que natural.

El curso de esa confrontación no es en sí entre el bien o el mal (porque son abstracciones de fuerzas primigenias de la realidad) si no entre humanos buenos o malos (que para alimentar o identificarse con su subjetividad o con la naturaleza de su ser, usan o controlan estas fuerzas "que viven a través de un ser vivo", o que bien podrían ser solo hechos o acontecimientos calificados de buenos o malos en base a quién los vea o los sufra y que esos si son en efecto fuerzas abstractas naturales puras y calificadas por un subjetividad). Solo hay, no obstante, un resultado posible, la victoria del bien sobre el mal (¿razones? por el simple hecho y deseo de que la realidad no sea un caos impredecible, sea habitable, de ella nazca algo y para que así el ciclo vuelva a nacer y se repita ahora desde la supremacía del bien, que trae algo superior al equilibrio) sometiéndolo como estuvo en el primer inicio cuando se arrastraba bajos las sombras del bien, si pensamos claro que el bien vino primero, restaurando así la estabilidad inicial.

Todo el ciclo es natural, necesario, inevitable y automático entre estas dos fuerzas que puede pasar lenta o velozmente desde el más pequeño al más amplio sector de realidad que ves y en el que habitas. Siendo este el ciclo ¿en qué parte estaremos ahora? claro, si es que decides hacerme caso.

PRÓXIMA HISTORIA: Sobre El Bien, El Mal Y Los Que Controlan..