Las Pendejadas De V1c (Boku No Hero Academia) AU

KatsuDeku, oneshot

Desde que Midoriya había conocido a Mirio su relación no hacía más que estrecharse cada vez más, aún cuando Katsuki sabía el secreto tras el Quirk del peliverde, aún cuando sin notarlo se había vuelto más cercano a su rival, aún cuando ahora combatían juntos de forma más fluida, aún con tantas cosas la sonrisa de Izuku nunca era para él, siempre tenía esa cara de nervios e incluso miedo cuando se encontraban, en cambio cuando veía al increíble "Senpai" (insertar voz aguda y fastidiosa) esa cara de nerd se llenaba de luz, admiración y sus hermosos dientes blancos se asomaban en una radiante escena que era capaz de derretirlo internamente.

Mirio Togata quien fué el hombre que estuvo más cerca de volverse el número uno, uno de los tres grandes de UA, aún sin su Quirk era capaz de arrebatarle a SU nerd sin esfuerzo alguno. Katsuki estaba irritado, cansado de ver toda aquella situación, ya estaba al final del segundo semestre de sus estudios y no había podido avanzar como quería, tenía su licencia provisional de héroe y Deku nisiquiera lo había felicitado por su voluntad, el maldito bastardo de Todoroki fue quien le dijo "¿no planeas felicitar a Bakugo?" Y por lo que casi estaba seguro fue inercia el chico con pecas se dirigió a él hecho un manojo de nervios.

¿qué había pasado con el Deku de su infancia? Ese nerd que lo perseguía a diario, ese niño que sólo tenía ojos para él, el enano bueno para nada que se impresionaba con cada una de las acciones de su compañero, ¿en que momento había pasado de tenerlo a sus espaldas a correr tras la suya incapaz de alcanzarlo? ¿En que momento las sonrisas se transformaron en pánico? ¿en que momento todo había cambiado tanto?

Bakugo se sentó en su cama con el uniforme tan desordenado como usualmente lo llevaba mientras miraba el reloj, era muy temprano pues aún faltaba media hora para que todos se levantaran, chasqueó la lengua y golpeó una almohada mandándola  volar  fuera del balcón mientras gruñía

"Katsuki es alguien muy imprudente premiado con un don asombroso, siempre tuvo gente alabándolo y por eso se hizo así, lo elogiaban por cosas superficiales"

Las palabras de su madre lo golpearon como si de un puñetazo de All Might se tratara, las cosas no cambiaron porque sí, era él quien había cambiado las cosas sin notarlo. Su egocentrismo, su agresividad, siendo tan arrogante y grosero, tan despiadado... Midoriya siempre tuvo algo que a él le faltaba, ese tacto, esa intención de ayudar sin esperar nada,ese deseo de ganar combinado al de salvar, aquella misteriosa capacidad para hacer sentir bien a todos con una palabra o incluso con un ligero gesto, la mala costumbre de llegar y romper las inseguridades de las personas como si nada. Izuku Midoriya era un héroe en el que se podía confiar, un héroe que arriesga su todo para rescatar y proteger, por eso All Might lo había escogido, por eso él tenía su don, por eso, aunque nunca lo aceptara, él Katsuki Bakugo nunca podría superarlo por completo.

-Maldito Deku de mierda- mustió y salió a la terraza apoyando sus frazos en la barandilla- no es como si realmente ese rubio amarillo pollo de cuarta fuera una amenaza. Deku sigue siendo mío

-¿Baku-bro? ¿Que haces despierto a estas horas?- un Kirishima medio dormido recién salido de la ducha pero uniformado lo sorprendió un poco- valla, te ves algo gris hoy viejo

-Sólo desperté temprano- respondió seco pero un poco ¿sumiso?- ¿y que mierda haces tú levantado cabello raro?

-sólo quería tomar un baño largo sin estar estorbándoles a los demás- se sinceró- hey, Bakugo ¿quieres pasar a mi habitación? Tengo algo de pastel, mi mamá lo preparó ayer y me dijo que trajera un poco para ti. También tango algo de café instantaneo o redbull

El cenizo sólo cruzó hacia el otro balcón sin responder y en un extraño silencio recibió sin chistar la rebanada del postre y la lata de esa bebida energética, pasó un rato comiemdo como en trance hasta que Eijiro le habló colocando su plato en el suelo.