Prólogo

12 1 0
                                    

JAYDEN

-¿Tienes todo listo?- -pregunto dejando las cajas en el piso.

-Sí, ahora sólo falta no morir en el intento- suelta Ian con una caja en su brazos. Río y le ayudo con la caja.

-¿Cómo cojones vamos a dormir aquí?- pregunto mirando la hora- Son las jodidas ocho de la tarde.

-Cogemos dos colchones para dormir y mañana empezamos a montar los muebles la casa- dice sentándose en el suelo.

Estábamos cansados, eso era normal pero no me gustaba la idea de Ian.

-Tu plan es una real mierda- gruño y me tumbo en el suelo.

-Aguanta un poco quejica- Ian se levanta y al rato vuelve con un paquete de galletas.

-¿Las has robado?- pregunto tomando el paquete y metiéndome todas las que puedo en la boca.

-Pareces un niñato ahora, y no, no las he robado- dice y me las quita. Me iba a quejar pero sabía que si abría mi jodida boca seguramente todo lo que tenía en la boca se caería al suelo, y no pienso agacharme a coger una mierda de esas. Trago y miro como imita mi acción. Río y le doy un golpe en la cabeza. Gruñe.

-Que triste, joder- farfullo y le miro.

-No tenemos puto dinero para ir y pedir una mierda de pizza- dice levantándose- tenemos los colchones en la habitación del enfrente.

-Por el dinero no te preocupes, mañana iré a buscar la comida- me levanto yo también pero Ian me coge del brazo.

-Ni se te ocurra hacer cualquier mierda de esas- Ian se tumba en el colchón- Has cumplido 18 hace un par de meses, la cagas y vas a la puta cárcel- gruño y me tumbo de nuevo.

-Perdón, papá- bufo y miro el techo.

-Deja de ser un puto niñato- escupe.

-¿Crees qué podremos dejar de hacer esto?- me pregunta y le miro.

Sus ojos oscuros me miran con preocupación y siento un poco de dolor en mi pecho, no quiero que tenga que vivir esto, al fin y al cabo es como mi hermano.

-Haré lo posible para sacarnos de esta mierda- farfullo mientras se me cierran los ojos.

-Pero no hagas ninguna idiotez, eres mi mejor amigo y...

-Querrás decir tu único amigo- río y me golpea.

-Eres más que eso- dice suspirando.

-Lo sé- le miré por una par de segundos. A diferencia de mí, Ian aún con sus tatuajes y piercings siempre será un buen chico, en cambio, a pesar de parecer un chico malo lo soy.

Tengo ojos grises y verdosos, Ian los tiene negros como el carbón, su cabello es moreno y el mío es castaño claro, somos muy distintos. Nunca pensé como alguien tan distinta a mí fuera tan importante para mí. Le conocí en el orfanato donde nos críanos, le conocí en el infierno y fue mi único apoyo. Él me ayudó a sobrevivir, igual yo a él. Es la única persona que puedo confiar.

-Sabes el plan, robamos esa casa que unos contactos me dieron y ya no hará falta tener que robar ni pasarlo mal- afirmo convenciéndome de eso. Ian suspira y le miro cansado.

-Hasta que estemos seguros debemos buscar un trabajo para poder comer- ruedo los ojos cansado- así que mañana, mientras uno monta los muebles el otro va a buscar trabajo- me adelanta.

-¿Iremos al instituto?- pregunto cansado. Estábamos a principios de Julio, las clases no empiezan hasta septiembre pero Ian me lo mencionó algunas veces.

-Tenemos que parecer unos adolescentes normales- suspira ya aburrido con el mismo tema.

-No me jodas- digo dándome la vuelta.

-Cuanta más gente nos conozca tendremos más posibilidades de que los del orfanato no nos encuentre.

-No quiero ir al instituto- gruño e Ian me lanza un cojín.

-Oficialmente somos hermanos y nos apellidamos Harrison- rio y me mira con furia.

-¿Usaremos tu apellido?- pregunta riendo.

-Si quieres usamos el tuyo... sonríe y mis ojos se dilatan del enfado que siento ahora por su culpa- ah no, que no sabes ni tu apellido.

-Cierra esa puta boca, Ian- escupo con furia y me doy la vuelta.

Los padres de Ian murieron en un accidente mientras que los míos me abandonaron cuando tenía cinco meses, por eso Ian posee su apellido, en cambio, yo no tengo ni apellido, algo que me la suda bastante.

Robaremos esa mierda de casa, no es la primera vez que lo hacemos, una vez que lo hagamos nos iremos de esta mierda de pueblo y viviremos en la playa como acordé con Ian.

Sólo espero que no la caguemos porque sino este si sería nuestro final y no como los del orfanato piensan. 

Cicatrices TatuadasWhere stories live. Discover now