Las personas se pueden catalogar en dos tipos: buenas y malas. Jane era una de las buenas, pero desgraciadamente la vida no es justa. Casi siempre los buenos sufren y los malos disfrutan. La suerte nunca estuvo de su lado. El hecho de haber tenido un hijo a temprana edad no le ayudó mucho. Por querer dar un cambio a su vida, cometió un crimen, uno del que se arrepentiría por siempre. Y a partir de ahí comenzó su nueva vida, rodeada de lo que ella más odiaba... lesbianas. *Una historia creada por @elipas07 , miembro del departamento de arte y cultura, El Círculo del Colibrí.