La catástrofe que se presentaba era inminente, si no jugaban bien sus fichas podría estallar una guerra que involucraría a todo el mundo y no solo los humanos se verían afectados, los seres paranormales también. Cada quien escogería un bando y muchas muertes serian el menú del día. APIM era la agencia encargada del gobierno en atender los casos paranormales a nivel mundial una empresa que no existía al ojo de cualquier curioso, tenían soldados los mejores del mundo pero no serían suficientes para la lucha que se avecinaba por lo que el presidente y jefe de esta agencia mando a sus mejores soldados a buscar a personas que les puedan ayudar. Los reclutas tenían que tener características específicas para entrar en dicha organización.