—¡Apúrense, la capitana no puede llegar tarde!— gritó North
—Oye, calma, North — dijo Peter
—¡Ya estamos aquí!— dijeron Alice y Anna corriendo a la entrada de la base.
—¿Por qué siempre tardan tanto?—preguntó Polo
—Una mujer no puede ir a un festival sin arreglarse— dijo Alice viéndose en un pequeño espejo.
—Si, pero no debes de atrasar a otros, menos a la capitana— la regaño North
—Si, perdón, Capitana— Alice me miró con ojos tristes— no volverá a pasar.
—Esta bien. No hagan esto una discusión— dije abriendo un portal— hoy vamos al festival y quiero que se la pasen bien, tendrán tiempo para disfrutarlo antes de que anuncien el número de las estrellas que obtuvo cada orden— hice más grande el portal— así que vamos.
—¡Si!
***
—¡Asombroso!— exclamó Nicolás
—Bien, yo tengo que ir a la reunión previa con los otros capitanes, pero le avisaré a Vadik para que pasen al interior del edificio, su deber es estar allá— les dije— mientras tanto disfruten, pero por favor, los quiero puntuales.
—Entendido— me dijeron
—¿Te parece si vamos a comer?— preguntó North a Polo
—Bien, mientras tanto iré a ver si hay algún puesto de reliquias— dijo Sasha
—Ey, Anna, ¿quieres que vayamos a ver si vino el chico de los Toros Negros que te gusta?— preguntó Alice.
—¿Q-qué? No, cómo crees— se sonrojó.
—Oh, vamos, si luces preciosa— le animo Alice
***
—Disculpen la demora, en unos instantes llegara el Rey Mago— dijo Marx.
No estábamos todos, y mi padre aún no llegaba, así que aproveche a ir a avisarle a Vadik.
—Vadik— dije cruzando el portal— reúne a todos y vayan al edificio, pronto empezara— le indiqué
—Si, capitana — dijo.
Regresé a donde nos habían reunido a los capitanes.
Cuando llegué me topé con una persona que no veía en mucho tiempo.
—Mereoleona San— dije sorprendida al verla.
—Julietta Novachrono— dijo mi nombre sonriendo— veo que te has hecho más fuerte.
Sonreí y asentí.
—Ha sido asignada capitana de los Leones Carmesíes en ausencia de Fuegoleon, ¿cierto?— dije acercándome a ella.
—Así es, mi estúpido hermano está en cama y la orden necesita un capitán— dijo molesta— me han llamado y no queda de otra.
—Espero que Fuegoleon despierte pronto, sé que no es muy de su agrado todo esto de pelear y la política — dije
Chasqueó la lengua.
—¡Muchas gracias por venir!— escuchamos que dijo mi padre.
Todos los capitanes nos alineamos y esperamos para salir.
Volteé hacia atrás;estaban llegando mis chicos.
—Este año, yo anunciaré los resultados de las órdenes de caballería— dijo mi padre.
Los ciudadanos estaban eufóricos al ver al Rey Mago en persona.
—Cuando terminemos, el Rey nos honrará con su presencia...
—¡Rey Mago!— gritaron todos ignorando la ultima frase.
—Como sabrán, el Reino del Trébol se enfrenta a invasiones de los Reinos Diamante y la Pica. Por si fuera poco, apareció el grupo terrorista Ojo de la Noche Blanca. Atacaron la capital y hubo muchas victimas. Pensé en cancelar el festival de las estrellas, pero decidí que precisamente ahora es el mejor momento para elogiar a quienes pelean por nosotros— dijo mi padre— ¡Recibamos a nuestros capitanes de las diez órdenes de caballería!
—¡Son los capitanes!— gritaron extasiados.
—Nozel Silva. Capitán de las Águilas plateadas.... Jack the Ripper, capitán de las Mantis Verdes... Dorothy Unswoth, capitana de los Pavo Reales Coral... Julietta Novachrono, capitana de los Colibrís Tornasol...
—¡Oh!, ¡ahí esta la señorita Julietta!, ¡se ve igual de hermosa que siempre!
—¡Señorita Julietta, cásese conmigo, por favor!
—¡¿Se encuentra bien, señorita?!
—¡Es asombrosa, se recuperó al poco tiempo de haber sido lastimada gravemente!
Sonreí y saludé discretamente.
—Rill Boismortier, capitán de los Ciervos Celestes — prosiguió presentándonos mi padre— Mereoleona Vermillion, capitana de los Leones Carmesíes...
—¡La nueva capitana es una mujer!— exclamaron
—Kaiser Granvorka, capitán de las Orcas Moradas... y por último, William Vangeance, capitán de Amanecer Dorado— terminó de decir mi padre.
Fue entonces cuando todos los presentes explotaron de emoción.
—¡Señor William!
—Esperen, ¿no faltan capitanes?
Cielos, no puedo creer que no estén... ¿dónde está Charlotte?
—Retomemos el hilo, anunciaré los resultados— habló mi padre— la primera orden es, ¡Amanecer Dorado! Obtuvieron un total de 125 estrellas.
No me sorprende, aunque esas son muchas estrellas a comparación de las del año pasado.
—Esta es la segunda orden— anunció el Rey Mago— ¡Toros Negros!
¡¿Qué?!
—Con un total de 101 estrellas...
Asumí que subirían de puesto, pero no que llegaran a segundo lugar. Que sorpresa.
Al parecer la multitud no estaba de acuerdo, pero mi padre se encargo de tranquilizarlos, he hizo pasar al frente al novato de los Toros Negros.
El chico llegó volando y aterrizó sano y salvo gracias a su espada.
—Vaya entrada, el es el novato que mas estrellas aporto a los Toros Negros. ¡Asta!
Todo estaba marchando bien, hasta que alguien de los presentes gritó que los novatos de Amanecer Dorado y Toros Negros eran plebeyos.
El novato de William hizo una especie de ballesta con Magia de Viento y Asta detuvo el hechizo. Fue solo entonces cuando los presentes no dudaron de su ascenso.
—Ciudadanos del Trébol, ¡reciban los con un fuerte aplauso!, ¡superemos nuestras diferencias para guiar a nuestro reino hacia la victoria!— exclamó mi padre.
Hubo un estallido de gritos convencidos departe de los ciudadanos.
—Ahora que estamos todos emocionados anunciaré el resto de ordenes... ¡Tercer lugar: Colibrís Tornasol con 98 estrellas!
—¡Asombroso!
—¡No se detuvieron a pesar que la capitana sufrió lesiones!
Sonreí, estoy orgullosa de mis chicos. Espera, qué, ¡¿tercer lugar?!
—¡Cuarto lugar: Águilas Plateadas con 95 estrellas!...
No puedo creerlo, superamos a las Águilas Plateadas.
Sabía que estábamos recibiendo muchas estrellas pero no llegué a pensar que fueran tantas. Siempre llegábamos al cuarto lugar, pero estoy sorprendida que este año subimos un lugar más.
Después de anunciar las entrellas que obtuvieron las órdenes, llegó el Rey Augustus Kira. El festival entero se quedó en silencio solo unos cuantos aplaudieron, pero no le fue suficiente al Rey.
—Hoy me complace anunciarles una noticia. Encontramos la guarida de Ojo de la Noche Blanca... Hasta ahora solo podíamos responder sus ataques, ¡pero ya no! Por fin podremos atacar primero. Para ello reuniré a los mejores caballeros de las órdenes y formare una unidad destacada, se llamaras ¡los Caballeros Reales!— anunció el Rey Augustus— en una semana realizare un examen para seleccionar a sus miembros, solo los que lo superen podrán formar parte de los Caballeros Reales. ¡Ellos aniquilaran a Ojos de la Noche Blanca!, ¡Caballeros, entreguen sus grimorios por el reino!
Es claro que fue idea de mi padre.
—¿Por qué los elige el Rey? Nunca oí que hiciera nada impresionante — decía Asta—¿tu si, Yuno?
—No— contestó el otro
—Dicen que tiene mucho poder, pero no hizo nada por su gente— siguió hablando Asta— quizás sea porque yo no tengo poder mágico, pero yo no le veo su aura especial al Rey.
—Asta, cuida tus palabras, en estos momentos no hay que decir la verdad.
—¿He, entonces tengo razón?— preguntó Asta
Intenté no reírme, ese chico es divertido...
El Rey se enojo pero mi padre lo calmó e intercedió por ellos.
—Yo también espero mucho de los caballeros mágicos— dijo mi padre— caballeros mágicos, ¡demuestren su valor y su fuerza!
Por supuesto.
***
—¡Capitana!— dijeron mis chicos cuando entré nuevamente al edificio.
—¡Capitana, logramos ser tercer lugar!— dijo alegre North
—Así es. Quiero decirles que estoy orgullosa — les dije— siempre los estoy motivando con palabras y premios, pero este año hubieron misiones en las que no tuve que decir nada, incluso no estuve y ustedes dieron todo— sonreí— chicos, felicidades.
North estaba casi llorando, Alice sacó un pañuelo y se lo ofreció, los demás estaban ligeramente sonrojados.
Después de unos segundos todos saludaron.
—He tomado la mejor decisión — dijo Nora— gracias por creer en mi, en nosotros, capitana.
Asentí sonriendo.
—Lo importante es que crean en ustedes mismos, no esperen a que otros crean en ustedes primero, porque entonces fracasaran— di un paso al frente— deben de creer en si mismos sobre todas las cosas, no importa cuán fuertes o débiles sean, siempre pueden mejorar y darlo todo, sean determinados, por que ustedes son ciudadanos del Reino del Trébol, son caballeros mágicos, y son ¡Colibrís Tornasol!
—¡Si!— gritaron orgullosos, incluso Sasha.
—Tenemos que festejarlo— dijo Meg dando un pequeño brinco
—¡Si!— dijo Anna extendiendo las manos.
—Así es, pero será en otro momento, chicos— sonreí— saben que después de los festivales los capitanes nos reunimos... Pero ustedes pueden seguir disfrutando del festival.
—¡Si!— dijo Nicolás
—Después todos a la base, ¿escucharon?— dijo Vadik
—Si, papá— se burló Peter.
***
Me dirigía hacia el Bar exclusivo para los capitanes.
—Julietta... —miré a mi derecha.
—¿William?, pensé que ya estabas con los demás capitanes.
—Tuve que felicitar a mi orden por ser nuevamente primer lugar— dijo
—Ya veo... Yo hice lo mismo con mis chicos— sonreí.
—Es cierto, felicidades por el tercer lugar— se acercó a mi.
—Gracias, la verdad me sorprendí— dije sonriendo— incluso les ganamos a las Águilas Plateadas.
—Nozel no se la ha de estar pasando bien...
—Claro que no— reí— pero ahora no me detendré, te quitaré el primer lugar, William Vangeance.
Este sonrió.
—¿Te parece bien si vamos a festejarlo?— me preguntó
—Por supuesto, vamos al bar— dije adelantándome.
Me tomo de la mano.
—Me refiero a otra parte—sonrió
—¿A otra parte?— pregunté confundida— ¿por qué?
—¿Esta mal que quiera pasar tiempo a solas contigo para celebrarlo?— me miró los ojos.
—N-no, claro que no.... esta bien— mi respuesta provocó felicidad a William, lo supe por cómo me miró— ¿a dónde quieres ir?— estoy segura que mis ojos brillaron, hace tiempo que no salgo a solas con William.
—¿Te parece si vamos al restaurante "El Trébol"?— me preguntó
—¡Si!— junte mis dos manos— la comida ahí es riquísima.
William rió complacido.
—Sabía que te gustaría la idea. ¿Vamos?
—Si.
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¡Hola! Espero que estén bien. ¡Saludos!
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