Otra vez Donghyuck estaba jugando con fuego.
Otra vez Donghyuck estaba tentando a la luna.
Otra vez Donghyuck estaba buscando provocar un eclipse.
Pero, lo que él no sabía era que terminaría causando uno.
Otro concierto se estaba llevando a cabo, el ambiente era maravilloso, la pasión de las fans era abrumante. El corazón de Taeil se sentía lleno, sin embargo, él también se sentía inquieto.
Donghyuck no lo dejaba tranquilo, lo perseguía hacia cada parte del escenario al que iba y, además, no desperdiciaba oportunidad alguna para tener un poco de contacto físico durante cada coreografía o incluso durante los ment.
Al parecer a las fans les fascinaban sus interacciones, ya que cada vez que Donghyuck lo tocaba o le hablaba ellas gritaban más de lo normal. Sabía que algunas los shippeaban, ya que últimamente cuando navegaba por Twitter se encontraba con muchos videos y fotos donde realmente parecian novios (-lo cual no me disgusta para nada-pensó) con mensajes del tipo "ya cómanse la boca de una vez".
Donghyuck le parecía irresistible y desde que comenzó el tour lo viene provocando en cada concierto y/o entrevistas a las que asisten. Estúpido niño, no sabe que está jugando con fuego. No sabe que yo no estoy hecho de hielo y que mi autocontrol se está desvaneciendo cada vez más, pensó Taeil.
Pero ahí estaba, una vez más cambiándose apresuradamente de ropa ya que la siguiente canción a presentar es Baby don't like it y que creen, Donghyuck estaba a su lado, sacándose la ropa en frente de él sin pudor alguno, ya se había puesto la camisa blanca pero aún seguía en ropa interior, instintivamente su mirada se dirigió a su entrepierna y luego a sus morenas y bien formadas piernas, tragó saliva.
-Que pasa Taeil-hyung, ¿te gusta lo que ves? Le preguntó con voz coqueta mientras formaba una sonrisa juguetona en el rostro.
-Osh este niño atrevido, ¿con que quiere jugar? Pues vamos a jugar -pensó Taeil. Para decir que me gusta lo que veo, primero tendría que probarlo.
Donghyuck abrió sus ojos de golpe, claramente no se esperaba una respuesta de su hyung, y mucho menos una de ese tipo. Le iba a seguir el juego, hoy se sentía osado (más de lo normal, claro).
-Pues puedes probarlo cuando y cuanto quieras. Le dijo mientras le guiñaba un ojo y levantaba sus cejas coquetamente como solo él lo sabía hacer. Segundos después terminó de ponerse su traje negro con rojo que lo hacía lucir tan bien.
Taeil no respondió, solo le sonrío coquetamente y terminó de vestirse.
Luego, juntos caminaron hacia la plataforma que los llevaría de vuelta al escenario.
La canción comenzó y la verdad es que todos se lucían en ella, cada uno sacaba a relucir su sensualidad de forma única, pero para Taeil el que mejor lo hacía era Donghyuck, no sabía si era por su voz o por su exquisito tono de piel que contrastaba de maravilla con ese traje rojo que lo hacía ver jodidamente sensual o tal vez por las intensas miradas que este le dedicaba durante la presentación.
Taeil tragó saliva, se acercaba el momento, el clímax, la mejor parte de la canción, la escena más sensual del concierto, el tan anhelado momento de las hyuckil shippers.
Comenzó a cantar su parte mientras se dirigía lentamente hacia Donghyuck quien por supuesto, ya tenía su mirada puesta en él. Esa mirada penetrante que tanto le gustaba y lo ponía nervioso. Sí, a él, a un hombre de 25 años lo ponía nervioso un sexy muchacho de 19.
Al llegar al lado del menor, este se acercó aún más a él haciendo que sus frentes chocaran mientras lentamente colocaba sus manos sobre su cuello y su mirada se dirigía hacia sus labios, ejecutó con lentitud ambos actos provocando que fueran realmente sensuales.
Suficiente. Está vez el menor se había sobrepasado. Su corazón latía a mil por hora mientras sentía sus manos sobre su cuello y tenía su rostro tan peligrosamente cerca. Como pudo intentó evitar su mirada, pero falló en el intento y en lugar de eso, se centró en observar los labios del moreno, que se veían apetitosamente besables, quería besarlos ahí mismo, pero no podía, estaban en un escenario con miles de fans grabando, no podía y se moría de ganas de hacerlo.
Sintió como las manos del menor dejaban su cuello y se deslizaban lentamente hacia su pecho para luego empujarlo hacia atrás, separándolos mientras este negaba con su cabeza y se recargaba en el hombro de Doyoung para terminar esa parte de la presentación.
Donghyuck sabía que había ido demasiado lejos, por poco besa a Taeil en el escenario, con mucha dificultad logró alejarlo, pero inconscientemente negó con su cabeza haciendo evidente la frustración que sentía.
Los demás miembros estaban impactados y se dedicaban discretas miradas de desconcierto ya que era primera vez que la tensión sexual entre ellos se sentía tan fuerte, sabían que ambos se deseaban, pero no entendían porque no estaban juntos de una vez por todas.
Al terminar la canción Taeil suspiró aliviado, sin embargo, tenía una leve erección que lo estaba incomodando. Maldito Donghyuck, era toda su culpa. Intentó pensar en cosas feas para calmar su calentura y logró disminuir su erección momentáneamente, lo cual fue un alivio porque no quería ver fotos de su erección repartidas por todo internet.
El concierto continuó su rumbo y ya se encontraban en el ment final, se sentía realmente agotado, pero con el corazón contento. Amaba su trabajo, amaba cantar y por sobre todo amaba a sus incondicionales fans. Dijo un par de frases bonitas de agradecimiento y abandonó el escenario juntos a los demás miembros. Otro concierto había terminado con éxito.
Camino al hotel, se fue bebiendo un café helado y escuchando música tranquilamente ya que por suerte (o no tanta) Donghyuck se había ido en la otra van.
Cuando les quedaban unos minutos por llegar, se sacó los audífonos y llamó la atención de Johnny.
-Hey Johnny necesito pedirte un favor.
-Claro hyung, ¿Qué necesitas?
-Necesito que cambiemos de habitación por esta noche, tengo asuntos que resolver. Pídeme lo que quieras, te lo suplico, lo necesito.
Johnny lo miro con una sonrisa coqueta, ya me imagino cuales son esos asuntos que necesitas resolver, creo que se llaman: Follar con Donghyuck, ¿o me equivoco? Qué asunto más interesante Hyung, ya era hora, ¿no crees? Dijo mientras se reía. Claro que podemos intercambiar habitación, no tengo problema. Aunque un café me vendría bien, ¿qué dices? Es un precio justo, le dijo mientras le sonreía y le guiñaba un ojo.
-Muy justo diría yo, muchas gracias, Johnny, de verdad. Aunque me llama la atención que hayas aceptado tan rápido, ¿es porque Mark es mi roommate verdad? Le preguntó mientras lo miraba juguetonamente.
-Johnny rio nerviosamente. Por supuesto que no, claramente es porque mañana quiero beber un delicioso café, y si es gratis, aún mejor.
-Ajá sí, claro y yo no me quiero follar a Donghyuck. En fin, gracias hyung y que disfrutes con Mark.
-Lo voy a intentar, Mark es un poco difícil, se panickea demasiado. Ustedes no sean tan ruidosos si no se quieren meter en problemas.
Taeil le sonrió amablemente.
Llegaron al hotel y Taeil se tomó su tiempo antes de ir a la habitación. Estaba nervioso, deseoso y ansioso. Estaba experimentando un torbellino de emociones. Llevaba meses deseando a Donghyuck, había caído completamente por ese adorable niño, estaba muy enamorado de él, solo que tenía miedo de admitirlo.
Donghyuck por su parte se encontraba desempacando su pijama y artículos de aseo personal, le parecía extraño que Johnny aún no llegara a la habitación pues ambas van habían llegado al mismo tiempo al hotel. -Tal vez fue a comprar algo- pensó, así que continuó desempacando sus cosas.
Decidió echar un vistazo a través del bonito ventanal con el que contaba la habitación, el paisaje era realmente hermoso, se veía toda la ciudad iluminada con sus miles de edificios y luces brillantes.
Que lindo seria ver este paisaje con Taeil mientras nos abrazamos. -suspiró-. Debería confesarme pronto, no soporto más guardarme todos estos sentimientos, me están ahogando, pero tengo tanto miedo.
Estaba tan concentrado pensando y disfrutando de la vista que no se dió cuenta de que alguien había abierto la puerta e ingresado a la habitación. Solamente se percató de ello cuando su visión fue interrumpida por unas manos que taparon sus ojos, su corazón dio un brinco, conocía ese tacto y definitivamente no era el de Johnny. Segundos después sus fosas nasales fueron invadidas por esa fragancia que tanto le gustaba: el aroma de Taeil, inspiró profundamente con el fin de llenar sus pulmones con esa exquisita fragancia.
Sintió el cálido aliento del mayor sobre su oreja, donde le susurró con una voz ronca y sensual: ¿Listo para jugar pequeño? Me dijiste que podía probarte cuando yo quisiera y pues en este momento tengo mucho antojo de Donghyuck. ¿Puedo devorarte por completo?
El moreno jadeó, un escalofrío recorrió su cuerpo y su piel se erizó, la excitación que las palabras del mayor provocaron en él fue inmediata, sintió como sus piernas temblaban, las sentía de gelatina.
-C-claro que puedes hyung, está noche te pertenezco.
No bien hubo terminado de decir esas palabras, Taeil retiró las manos de sus ojos y las dirigió hacia su cintura, donde ejerció un fuerte agarre y comenzó a repartir besos por el cuello del menor, de manera pausada.
Donghyuck jadeaba, cerró sus ojos e inclinó su cabeza para darle más acceso al mayor quien continuaba repartiendo besos húmedos, estaba besando cada uno de los preciosos lunares que lucía en su cuello.
Se sentía tan sumiso, no era capaz de hacer nada. Solo pensaba en que quería ser dominado por Taeil esa noche, y todas las futuras noches que compartieran.
Sintió como Taeil lo apegaba aún más a su cuerpo para que su bulto se presionara contra su trasero. Inconscientemente comenzó a moverlo contra la erección, provocando que Taeil dejara escapar un sensual jadeo y besara su cuello con más ímpetu, lamió el lóbulo de su oreja y toda la extensión de su cuello, también repartió pequeñas mordidas.
Donghyuck respiraba agitadamente creando una muy sensual atmósfera, estaba sintiendo mucho calor y por, sobre todo, hambre. Hambre causada por ese exquisito hombre que tenía apegado a su cuerpo y que lo estaba haciendo alcanzar el cielo con tan solo un par de besos y mordidas en el cuello.
Como pudo, logró soltarse del agarre del mayor y colocando una mano en su pecho lo empujó sensualmente hacia la cama para que se sentara en ella. Luego, comenzó a bailarle eróticamente, restregaba su trasero contra su entrepierna con el fin de hacer crecer aún más esa erección mientras le dedicaba sensuales miradas.
El mayor estaba caliente, es que ese moreno que tenía al frente suyo era fuego. Su mirada quemaba como el sol de verano. Cuanta intensidad contenían aquellos ojos, de tan solo verlo moverse tan sensualmente hizo que su erección creciera. Su piel morena con un poco de sudor eran su adicción, es que no había un ser humano en el planeta que lograra igualar la belleza exótica que poseía Donghyuck, su tono de piel, sus lunares esparcidos por todo su cuerpo formando constelaciones, sus ojos, su nariz definida, sus hermosos, finos y pequeños labios, su sedoso y delicado cabello castaño, la elegante y sensual manera de bailar que poseía. Ese hombre era su perdición, ya no había vuelta atrás. Había caído rendido a sus pies, sucumbió ante la tentación que le estuvo ofreciendo aquel sol durante tanto tiempo. Era hora de que finalmente la luna y el sol se encontraran y se volvieran uno, en el más precioso eclipse que hubiera ocurrido nunca.
Donghyuck terminó sentándose a horcajadas sobre él, poniendo sus manos sobre su cuello y comenzaron a devorarse la boca. Sus lenguas se sumergieron en una deliciosa lucha, recorrieron por completo la cavidad bucal del otro, se chuparon sus lenguas, se mordieron y lamieron los labios durante infinitos minutos.
Lo único que se escuchaba en la habitación eran sus agitadas respiraciones y el sonido húmedo de sus bocas devorándose.
Taeil deslizó sus manos por la espalda del menor hasta llegar a su trasero, el cual apretó sensualmente y lo presionó para que sus erecciones se rozaran, el menor dejó escapar un jadeo durante el beso a causa de aquella acción.
Una vez que los labios de ambos estuvieron dormidos y muy hinchados de tanto besarse, Taeil se separó para buscar entre sus pertenencias una corbata y, con delicadeza recostó al menor sobre la cama, donde procedió a amarrar sus manos en la cabecera de esta con ayuda de la corbata.
El menor se percató muy tarde de lo sucedido, cuando ya estaba amarrado. No podía mover sus manos y de alguna manera eso lo excitó, sentir que el mayor tenía el control de la situación lo excitaba demasiado. En el fondo, quería ser sometido por Taeil.
El mayor no perdió el tiempo y se colocó encima de él, con delicadeza levantó su polera y acarició su piel. Cada parte que Taeil tocaba ardía. Lentamente comenzó a jugar con sus pezones, con su boca lamia y mordisqueaba uno y con su mano pellizcaba y acariciaba el otro. Donghyuck curvó su espalda debido al placer que estaba experimentando, la sensación húmeda y cálida que le estaba brindando la boca y lengua de Taeil sobre sus pezones era gloriosa. Sin embargo, era frustrante no poder mover sus brazos, quería sostener a Taeil y besarlo como si no hubiera un mañana, quería tocar todo su cuerpo.
-Hyung por favor, déjame tocarte también. Suplicaba con voz entrecortada.
-Lo siento pequeño, pero esta es mi venganza por provocarme una erección el día de hoy en pleno concierto y por tantas provocaciones que me has estado realizando durante este último tiempo. Ah y también por enamorarme. Fuiste muy insolente y esta noche voy a castigarte.
No sabía si la desbordante excitación que experimentó en ese momento fue por lo ronca que sonó la voz de Taeil o por la confesión que acaba de oír o por lo sensual que le parecía el panorama de ser castigado por Taeil o porque este continuaba dándole atención a sus pezones o bien, por todas las opciones anteriores.
Sintió frio cuando el mayor dejó de chupar sus pezones y comenzó a deslizar hacia abajo sus pantalones, dejándolo solo en ropa interior. Con delicadeza separó sus piernas, atrevidamente depositó un beso en su erección sobre la tela de su bóxer y mordisqueó la parte interna de sus muslos provocándole ligeros espasmos.
Con deseo, le quitó su ropa interior dejándolo desnudo. Se lamió sus labios y procedió a devorar el miembro que tenía en frente. Comenzó a lamerlo a lo largo de su extensión, con sus manos lo acariciaba de arriba a abajo mientras chupaba el glande, volvió a meter el pene en su boca, chupándolo hambriento. Sintió el sabor del líquido pre-seminal, era un sabor agradable. Estaba amando chupar el pene del moreno, era muy suave y sus leves gemidos lo estaban volviendo loco. Había ansiado tanto ese momento, después de tantos sueños húmedos que había tenido con el moreno, al fin se habían vuelto reales.
Donghyuck por su parte se estaba derritiendo, sentía mucho calor, las caricias de Taeil lo tenían en el paraíso. No podía creer que esto estaba realmente sucediendo, iba a tener sexo con el mayor, su fantasía se estaba volviendo realidad.
Mientras el mayor continuaba lamiendo el miembro, con sus manos comenzó a acariciar sus testículos, aumentando el placer del menor, quien emitía sonoros gemidos mientras se retorcía del placer incapaz de mover sus brazos.
-Hyung me voy a correr en cualquier momento, dijo con voz agitada.
Taeil comenzó a masturbarlo con un ritmo acelerado mientras que con su boca chupaba la punta, quería que se corriera en su boca y así lo hizo segundos después luego de liberar un fuerte y agudo gemido de placer.
El mayor se tragó el semen y comenzó a besar al menor apasionadamente. En esa nueva posición sus miembros se lograban tocar, sin embargo, la ropa de Taeil estorbaba. Con rapidez, se quitó el pantalón y su ropa interior, liberando su miembro el cual se encontraba completamente erecto y listo para recibir la atención que el menor gustosamente le iba a brindar.
La boca de Donghyuck se hizo agua al ver el enorme miembro, desde hace meses que añoraba tenerlo en su boca y, al parecer sus deseos fueron escuchados, ya que Taeil se paró sobre la cama y se acercó a él con su miembro entre las manos. Sintió como el mayor deslizaba su pene sobre sus labios mientras le exigía con voz ronca y demandante que lo chupara, acción que ni siquiera tenía que ser pedida ya que Donghyuck se moría de ganas de devorar su pene. Así que, con desesperación comenzó a lamer el miembro que seguía sosteniendo el mayor entre sus manos.
El menor se estaba desesperando porque quería tomar el miembro con sus propias manos y chupárselo como nunca. Con un poco de dificultad lo estaba lamiendo a lo largo de toda su extensión provocando que el mayor emitiera leves gruñidos. Paró de lamer y se dedicó a chupar la punta del miembro, haciendo que Taeil perdiera el control y lo sujetara bruscamente del cabello mientras comenzaba a follarle enérgicamente la boca, dejándolo sin aire, ya que estaba haciendo que el menor se introdujera por completo su miembro, el cual era bastante grande y grueso, por lo que este experimentó arcadas debido a la profundidad que estaba alcanzando el miembro en su garganta, un par de lágrimas recorrieron su rostro debido al estímulo.
Taeil estaba disfrutando en exceso follar la pequeña boquita de su pequeño, quizás estaba actuando como un bruto, pero es que llevaba tanto tiempo deseando esto, que quería aprovecharlo al máximo. La sensación que le estaba brindando esa cálida boquita le hizo perder la poca cordura que poseía en ese momento. Aumentó el ritmo de las embestidas cuando sintió cerca el clímax y mientras gemía se corrió explosivamente salpicando el rostro y cuello del menor, diablos, nunca pensó que Donghyuck cubierto de semen, específicamente de SU semen, se vería tan sensual.
El menor logró recuperar un poco el aire e intento calmar su respiración, pero le fue imposible al levantar la vista y observar semejante escenario que tenía en frente. Taeil respirando agitadamente con su rostro sudoroso, sus labios hinchados, mirándolo lujuriosamente, desnudo de la cintura para abajo, con su gran miembro semi-erecto y sus apetitosas y gruesas piernas, definitivamente eran un paisaje digno de admirar, y eso era lo que estaba haciendo Donghyuck en ese preciso momento, aunque esa imagen solo lo hizo sentir aún más hambriento de lo que ya estaba. Su desesperación por tocarlo aumentó.
Con voz entrecortada por la excitación y suplicante por la desesperación que sentía le dijo -Taeil por favor suéltame, necesito tocarte, te lo suplico.
El mayor estaba disfrutando la forma en que el moreno le suplicaba que lo soltara para que pudiera tocarlo, era excitante.
Creo que ya fue suficiente castigo, vamos a divertirnos pequeño. Dicho esto, se acercó para liberar sus manos, las que ahora relucían rojizas marcas en sus muñecas.
Apenas fue liberado, se abalanzó sobre el mayor para besarlo desesperadamente, sus bocas se estaban volviendo adictas la una de la otra. Interrumpió el beso para lamer el cuello, dejando que su lengua recorriera cada centímetro. Taeil jadeaba, la lengua del mayor se sentía muy bien. Con brusquedad le retiró la polera y succionó con deseo sus pezones, los mordisqueó, lamió y retorció. Quería vengarse y lo estaba logrando, ya que Taeil se estaba retorciendo del placer.
Lamió su abdomen en toda su extensión mientras descendía hacia el miembro del mayor, no habían transcurrido ni 10 minutos desde que este había follado su boca, pero aun así se sentía sediento. Mordió sus labios mientras le dedicaba una mirada llena de deseo y en un abrir y cerrar de ojos, ya estaba abarcando toda la extensión del miembro con su boca, ahora que al fin tenía sus manos libres podía tocar a su antojo todo su cuerpo mientras devoraba su miembro, aprovechó de acariciar esos gruesos muslos que tanto le gustaban provocando espasmos en el mayor. Luego sujetó la base del pene y comenzó a chuparlo con desesperación, aumentado la intensidad de la felación. Taeil se iba a correr en cualquier momento, no resistió más y terminó liberando su semilla dentro de la boca del moreno. El cual, eróticamente con el semen aún en su boca se recostó encima de él y lo besó apasionadamente, haciendo que el mayor probara su propio semen desde la boca del otro. Era un acto que a algunas personas les podría parecer asqueroso, pero a Taeil le resultó realmente erótico, era algo nuevo. Así que ambos, compartieron y saborearon el semen del mayor, disfrutando de un sucio y pegajoso beso, jugando con sus lenguas.
Donghyuck preso de la excitación que estaba experimentado, comenzó inconscientemente a frotar su miembro contra el del mayor, los que ahora estaban en contacto directo. El calor que desprendían ambos cuerpos era abrasador. Estaban sudando.
Taeil cambió las posiciones y de nuevo se encontraba sobre el moreno, quería hundirse en él, volverse uno con su pequeño. El cual, al darse cuenta de las intenciones del mayor, llevó a su boca la mano del mayor y comenzó a chupar sus dedos mientras le dedicaba una intensa mirada con el fin de lubricarlos para que este pudiera estimularlo con mayor facilidad.
El mayor no podía creer lo sexy que era Donghyuck en la cama, lo estaba matando. Sentir la lengua de su pequeño en sus dedos lo excitó aún más, estaba deseando sumergirse en el así que retiró sus dedos de su boca y los posicionó en la entrada del menor.
Con lentitud comenzó a introducir el primer dedo, el interior era estrecho y caliente. Donghyuck gimió de dolor al sentir que un segundo dedo estaba ingresando en su cavidad.
El mayor lo buscaba dilatar, entrando y sacando sus dedos, abriéndolos en movimientos de tijera con lentitud dentro de él, luego de unos minutos ingresó el tercer dedo y continuó dilatando al menor, el que emitía agudos gemidos de dolor, le estaba doliendo bastante, pero sabía que tarde o temprano aquel dolor se iba a terminar convirtiendo en un desbordante placer.
Cuando sintió que ya estaba lo bastante dilatado, tomo su miembro entre sus manos y se posicionó en la entrada donde deslizo su glande de arriba a abajo con el fin de desesperar al menor, el cual se estaba volviendo loco y suplicaba que ya entrara en él de una maldita vez.
-Me gusta que me supliques bebé.
Comenzó a entrar en él con dificultad ya que era demasiado estrecho. Con lentitud se fue abriendo paso hasta que logró ingresar la totalidad de su miembro. El moreno se estaba muriendo de dolor y placer a la vez, se sentía tan lleno con el grueso miembro de su hyung dentro de él. Este último se estaba conteniendo las ganas de penetrarlo una y otra vez salvajemente, su autocontrol se estaba agotando.
No sabes cuánto llevaba esperando por este momento. Dijo con voz entrecortada. Me estaba volviendo loco cada vez que me provocabas pequeño, pero ahora finalmente te tengo a mi disposición y te voy a dar como lo imaginé en mis mejores sueños húmedos.
Luego de unos minutos el menor ya se había acostumbrado a su miembro y se movió para anunciarle que ya estaba listo. Bruscamente comenzó a embestirlo una y otra vez, llenándolo deliciosamente. Se sentían en el cielo. Donghyuck gemía descontroladamente su nombre una y otra vez.
En la habitación se escuchaba la cama crujiendo, el fuerte sonido que emitían los testículos de Taeil al golpear la piel del moreno mientras lo penetraba frenéticamente, los jadeos de esfuerzo del mayor y los agudos gemidos del moreno. Era un escenario digno de un video porno, solo que este era mil veces mejor.
Mientras lo penetraba a un ritmo constante dirigió una de sus manos hacia la garganta de Donghyuck y lo comenzó a ahorcar. El moreno casi ni podía respirar, el agarre de Taeil en su cuello sumado a las deliciosas y profundas embestidas que estaba recibiendo le brindaban un placer desbordante, que lo hizo derramar lágrimas de satisfacción.
A Taeil le estaba encantando someter a Donghyuck, le gustaba tener el control de la situación. Le gustaba saber que el menor estaba así de excitado debido a él, le gustaba saber que él era el causante de esa deliciosa expresión de placer que tenía el menor en su rostro. Ni en sus mejores sueños imaginó tener al moreno a su disposición como lo estaba haciendo en ese momento, los sueños si se cumplían y de la mejor manera posible, pensó.
Cuando sintió que se iba a venir, aumentó la presión en el cuello de Donghyuck y la profundidad de las penetraciones, segundos después se vino dentro del menor, llenando su interior. El menor se corrió casi al mismo tiempo, salpicando el abdomen de Taeil y el propio.
Gimió al sentirse vacío una vez que Taeil sacó su miembro, el cual miro con lujuria como su semen se comenzaba a escapar y a deslizar por su trasero, ensuciando la cama.
Agotado se recostó al lado del menor mientras lo abrazaba por detrás para hacer cucharita, le estaba dando muchos besitos en su cabello y cuello, caricias que estaba disfrutando al máximo. Se dio vuelta para quedar frente a Taeil y comenzó a besarlo con mucha delicadeza, todos necesitaban una ronda de besos delicados luego de haber follado tan brutalmente como lo habían hecho ellos.
Sin embargo, la cercanía de sus cuerpos hacía que el calor de ambos se mezclara y sus miembros se rozaran, haciendo que despertaran otra vez. Los besos se comenzaron a intensificar, y en un abrir y cerrar de ojos, nuevamente ambos se estaban tocando sus cuerpos con deseo.
Donghyuck hizo que Taeil se sentara sobre la cama y muy sensualmente se posicionó en frente de él, tomó su miembro entre sus manos y lo guio hasta su entrada. Lentamente fue descendiendo hasta que lo tuvo en su interior completamente.
-Mierda, eres insaciable Donghyuck. Me vas a terminar matando. Susurró entre dientes Taeil, preso del placer.
Donghyuck gimió en respuesta.
Al llegar al fondo, emitió un sonoro gemido e inclino hacia atrás su cabeza, exponiendo su hermoso cuello salpicado de lunares que el mayor no se resistió a comenzar a besar con deseo. Mientras repartía besos húmedos por su cuello, Donghyuck brincaba sobre él, penetrándose, enviando corrientes eléctricas a su miembro que luego recorrían todo su cuerpo. Las manos de Taeil se deslizaron hasta su trasero, el cual apretujó para luego ayudar al menor guiando sus movimientos. Mientras lo hacían, se estaban devorando la boca y los gemidos de Donghyuck eran silenciados por la boca de Taeil.
Me encantas, le susurro cuando se separó de él un momento para recuperar el aire de sus pulmones.
El menor solo pudo gemir como respuesta a aquello, porque estaba experimentando un asombroso orgasmo, se corrió fuertemente mientras mordía y tiraba el labio inferior de Taeil, provocando que este gimiera de dolor mezclado con placer. El acto anterior, ocasionó que se corriera por tercera vez consecutiva aquella noche, volviendo a llenar el culo de ese sexy moreno con su esperma.
Estaban deshechos, agotadísimos, sus cuerpos estaban empapados en sudor y sus pechos subían y bajaban al mismo ritmo, era normal que estuvieran así después de haber experimentado un brutal orgasmo. El tercero de la noche. Estaban exhaustos.
Con dificultad Donghyuck se comenzó a parar, liberándose del enorme y ahora pegajoso miembro de Taeil. Al pararse, el semen comenzó a escurrir por sus piernas, sucio pero caliente, pensó Taeil mientras lo miraba.
De la mano, fueron a darse un baño, tenían que limpiarse ya que sus cuerpos estaban llenos de sudor y restos de semen. La ducha que se dieron estuvo llena de besos y caricias, donde se limpiaron el uno al otro con mucha delicadeza.
Se secaron sus cuerpos y sus cabellos, se pusieron pijama, se lavaron los dientes, se perfumaron y por sobre todo se mimaron.
No podían estar 1 minuto sin darse pequeños besitos, sobre todo Donghyuck que a cada momento estiraba su trompita para que el mayor le diera los besitos que tanto le encantaban. Era una atmosfera muy dulce, totalmente opuesta a la que habían experimentado un par de minutos atrás, pero eso era lo más genial, que podían ser duales, calientes y luego tiernos, era la esencia de ambos y se complementaban de una manera grandiosa.
Finalmente, se acostaron abrazaditos el uno al otro, exhaustos pero felices, mientras se llenaban de besitos.
-Me encantas solecito, no te imaginas cuánto.
-Tú me encantas aún más lunita.
Se dieron otro besito.
-Se que después de todo lo que hicimos esta noche mis sentimientos por ti fueron expuestos, sin embargo, quiero confesártelos explícitamente. Estoy enamorado de ti Donghyuck, desde el primer día que te vi, brillabas como solo tu lo puedes hacer. Cuando comenzamos a compartir más, fui cayendo lentamente en tus redes y ahora soy preso de tu amor. Simplemente me encantas, con tu ternura y sensualidad, eres todo lo que quiero en esta vida. Te amo, así sin más, incondicionalmente.
Donghyuck se sonrojó furiosamente ante la hermosa confesión que acaba de escuchar, ¿acaso estaba soñando? ¿Así se sentía el paraíso? Había follado con el amor de su vida y ahora se le estaba confesando de la manera más dulce que hubiera logrado imaginar. Quería llorar de la felicidad.
-Y-yo también estoy enamorado de ti Hyung, desde el primer momento en que te vi. Robaste mi corazón, eres tan gracioso y hermoso, haces que mis días sean más bonitos. Gracias por permitir que nos volviéramos cercanos, gracias por escucharme, gracias por ser la luz que ilumina mis noches más oscuras, porque eres mi lunita hermosa. Te amo Taeil, con locura.
-Eres hermoso Donghyuck, por dentro y por fuera. Me siento encantado de tenerte en mi vida y quiero que estemos juntos por el resto de nuestras vidas. ¿Aceptarías ser el novio de esta tonta lunita?
Donghyuck sonrió enamorado y lo besó, fue un beso que le transmitió todo el desbordante amor que sentía por él. Por supuesto que acepto, quiero que seas mi compañero de vida.
Y sin más, se miraron a los ojos, se sonrieron como estúpidos enamorados y se besaron, sellando su amor.
Finalmente se durmieron agotados, ambos satisfechos y con el corazón llenito de amor, pues finalmente el eclipse se había producido, el cual había sido anhelado durante un largo periodo de tiempo.
Muchos eclipses estaban por venir, porque el sol estaba enamorado de la luna y la luna estaba enamorada del sol.
No podían existir sin el otro, estaban destinados a complementarse y a estar juntos.
Y así sería hasta que ambos se apagaran y comenzaran a brillar eternamente juntos en el cielo.
FIN
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Bueno eso ha sido todo, espero que les haya gustado uwu y disculpen la dualidad XD soy Taeyong biased así que así es mi vida diaria ah.
Denle mucho amor a Haechan y Taeil porque son preciosos, y juntos son la mejor ship que existe en el mundo. Asies.
Se aman mucho, bye.