PT 2 ━ YOU ARE MY ART
"GALERÍA DE ARTE"
KIM TAE HYUNG
La puerta le daba un toque muy sofisticado a todo el gran edificio de paredes blancas. Aquellos cuadros que se dejaban en las paredes merecían estar en este lugar, realmente eran hermosas obras de arte, no tenía idea de que podría ser yo allí, me gustaba la música, estudiaba música, pero por el iría a todas las galerías de arte donde se presentaran sus obras.
Avancé un poco hacia otra pintura y realmente era preciosa, tenía toques que solamente podría ser obra de un artista, toques tan finos y sin dirección aparente, el autor dejó su firma en una esquina de su obra, hasta su firma tenía el digno toque artístico, tan sofisticados.
El edificio tenía tres pisos, todas las paredes eran blancas o negras, dependiendo de cómo quedara con la pintura colgada, el edifico era con varias temáticas un poco parecidas, pero realmente estaban varias personas admirando aquellas pinturas al igual que yo. Una fanática del arte y de los artistas aunque no era mi mundo, como la música.
Había salido de la universidad antes, uno de los maestros había faltado, el maestro Kim Taehyung había faltado a dar la clases de arte en mi universidad, varios de mis compañeros habían sido informados que había estado ocupado últimamente con sus cuadros.
Ya lo sabía, he venido para ello, a verlas, pero sabía que estaban en el segundo piso, quizás el día anterior habíamos tenido un pequeño encuentro y leí algo en su escritorio de casualidad.
El no tenía idea de qué estaba aquí y yo no tenía ni idea de dónde estaba él, no había respondido mis mensajes, tampoco es que fuera muy atento conmigo, pero generalmente los respondía, tarde, pero los respondía.
Tan concentrado en su arte que no tenía tiempo para mi, siempre había dicho que el arte es su vida.
Había comenzado a caminar lentamente hacia la izquierda sin dejar de mirar la pintura que había tenido en frente, pero en segundos ya no tenía la pintura en frente, tenía a un chico.
─Lo lamento─ me disculpé al chocarlo─ estaba viendo la pintura, discúlpame.
─Tranquila, está bien─ Jodida mierda, era guapo.
De seguro igual era parte de las esculturas que estaban en el centro de las habitaciones o hasta se podría escapar de unos retratos, porque el chico... wow.
─¿Tú estas bien?
─Si claro, después de todo no fué un gran choque.─ reí─ ¿Pero sí estas bien?
─Claro─ no me había dado cuenta que sus manos estaban afirmando delicadamente de mi antebrazo.
─De acuerdo─ él quita sus manos de mi antebrazo y se sonroja al darse cuenta que lo hacía, lindo─ Adiós.
Había inclinado levemente mi cabeza y seguí mi camino hacia la última pintura del primer piso. El lienzo tenía unos perfectos bordes, gritaban el estilo hiperrealismo, llamativos pero suaves pinceladas que lograban captar tu atención, tener clases de arte ayudaban a ver de otro modo las pinturas.
Recorrí el segundo piso más rápido de lo que creí, eran unas pinturas inmensas, con demasiados toques pequeños en centro y había una que otra pintura abstracta, todo lo que había exhibido estaba increíble.
Mis pasos lentos hacia el último piso, las escaleras tenían un hermoso color y diseño, no había más cinco personas en aquel cuarto.
Era todo muy silencioso y todos parecían ser muy profesionales aquí, pero había una pequeña excepción, había una señora junto a su hija, era lo más diferente que había visto hasta el momento, sin contar algunas pinturas.
─Mamá esa chica se parece a la del cuadro─ escucho como la pequeña niña le dice a su madre, su madre me mira pero yo ya estaba caminando hacia el cuadro del que hablaban, los demás eran más llamativos por sus colores.
Pero conocía a Kim Taehyung, él no iba mucho por aquel tipo de colores en su arte.
El lienzo básicamente mostraba a una chica acostada hacia abajo, su rostro miraba hacia el lado izquierdo sus ojos estaban cerrados y su cuerpo estaba cubierto por lindas sábanas blancas que tenían un sensual toque.
Mis facciones del rostro eran muy similares, era yo.
Observé la firma de Taehyung en la esquina de su cuadro. No sé cuánto tiempo estuve observando aquella firma y cuadro pero realmente estuve analizando cada toque, sabía muy bien del arte, tomaba un curso en la universidad, él era mi jodido maestro de arte.
─¿Eres tú?
Gire mi rostro y sonreí amablemente al chico con el que había chocado, solo alcé mis hombros en no saber. No sabía que decirle, no sabía ni yo misma el que pensar sobre esto.
─Lindas facciones.─ dice observando la pintura.
─Gracias.
─Acabas de admitir que eres tú.
─Eso creo─ reí.
─Lindo cuadro.
─¿Estás coqueteando conmigo?─ él sonríe ante mi mirada exageradamente retadora.
─¿Qué?─ se sonroja en el segundo, reí─ yo solo...
─Tranquilo, está bien, solo bromeaba.─ volví a mirar la pintura, pero alguien se coloca a mi lado. Ya no era el chico, reconocí aquel perfume único.
Aquel perfume único...
Giré mi cabeza en su dirección y le encontré mirándome, su mirada seria era de lo más común, era tan Taehyung, no conocía mucho de sus otras expresiones, siempre mostraba su cara seria o matadora de posibles castigos, además de yo, conocer íntimamente su rostro en el sexo.
Tenía expresiones que lograban volver a lubricarme yo misma.
Traía un abrigo largo de un tono marino, camisa blanca y unos pantalones negros al igual que sus zapatos, luciendo extremadamente formal.
─¿Fue de tu agrado?─ escucho su tono y no puedo evitar reír, siempre impone seriedad y a mí solo me pone, me pone demasiado su rostro natural enojado.
─Taehyung─ comienzo─ ¿Cómo es que lo hiciste? ¿Cuándo?─ no sabía exactamente qué quería preguntar pero sus ojos no se quitaban de su pintura.
─Te observé dormir durante horas, habíamos acabado bastantes agitados aquella noche y te observé, quedaste grabada en mi cabeza, días después te dibujé y hasta que no termine no logré quitarte de mi memoria.─ apenas había terminado de hablar y yo había tomado mi mano.
Su mano tibia estaban en contacto con la fría que estaba la mía, pude sentir uno de sus anillos caros que siempre llevaba y sonreí al verlo mirarme, su rostro era tan serio pero cuando me miraba algo en sus ojos brillaba.
─Vamos.─ dice.
─¿A dónde?
─A mi departamento─ asentí, sin reprochar, sin responder y cuando recordé al chico que estaba a mi lado ya le vi algo alejado de mí, siguiendo observando pinturas.
─Adiós.─ con la otra mano me despedí de él, él solo rió amable y también la agitó en modo de despedida.
─Adiós, chica arte.
Taehyung y yo salimos con silencio del edificio de exposición. Habíamos subido a su lujoso auto y no eran más de diez minutos de recorrido hasta su edificio, cuando nos bajamos del auto él tomó mi mano nuevamente.
Sus manos eran tan artísticas, tan grandes y sofisticadas, todos sus toques en el arte y sobre mi eran perfectos.
Se sentía algo diferente hoy, desde nuestro encuentro en la galería no ha dicho nada, hasta llegamos a donde vivía y apenas me mira pero si toma mi mano, guiándonos en silencio.
─Taehyung...─ le llamo pero el solo abre la puerta y entra a su salón, suspiré para yo cerrar la puerta y seguirlo─ ¿Que te sucede?
Lo veo servirse en una copa su excelente vino, uno de sus favoritos, veo una de sus grandes manos tomar la copa y acercarla a sus labios, sin mirarme y sin responder.
─Celos─ apenas bebe me respondió, no me esperaba esas palabras, menos viniendo de él. Kim no era de aquellos hombres que mostraban muchos sus emociones con facilidad, era difícil descifrar a Taehyung.
Me quedé en blanco, el jamás me mostraba sus sentimientos, básicamente nos acostaban os por más de siete meses.
─Cuando le vi acercarse a ti, una extraña sensación me invadió instantáneamente y se incrementó aún más cuando lo vi sonreír contigo, fue estrambótico─ sus ojos tan característicos me dieron algo de valentía en el momento para acercarme a él, aunque ya no sabía que transmiten sus indescriptibles ojos.─ Odié la sensación, jamás te vuelvas acercar a ese sujeto.─ sentencia.
Reí por sus primeros sentimientos de celos, era un adulto que no sabía de emociones y sensaciones sentimentales, eran tan frío.
─De acuerdo.
Se sirvió otra copa de vino, mientras la bebía yo ya tenía un vaso de agua en mis manos, me gustaba el vino, pero ese no era mi favorito, era demasiado amargo a mi gusto.
─Tenía unas inmensas ganas de tantas cosas.─ me cuenta extrañado y hasta confuso.
─¿Como cuáles?
─Quería agredir a alguien, a él chico que estaba a tu lado, sentía que por primera vez podría pelearme físicamente con alguien.─ Joder, su tono elegante me gusta demasiado, él me gusta demasiado.─ También tenía inmensas ganas de besarte.─ nuestros ojos se conectan con el brillo en estos, un brillo intenso y casi opaca a nuestro alrededor, estábamos cerca de solo ser él y yo con una mirada─ delante de él, necesariamente él tenía que observarnos.
Reí y me acerqué a Taehyung.
─¿Tenías?─ le pregunto, él alza una de sus cejas y sonríe burlón.
─Si, tenía─ sigue sonriendo burlón e hice un puchero acercando mi cuerpo aún más a él. Mis manos acariciaron sin permiso su cuello y mandíbula, sin importarme demasiado si le agradaba o no mi tacto, aunque sabía cuál era su respuesta.
Había dejado su copa vacía en el mesón junto a mi vaso de agua. Sus labios capturan los míos sin saber en qué segundo pasó, rápidamente lo besé solo que aumentando la intensidad de este, mi cabeza se inclinó levemente haciéndolo tan fogoso como quería.
Gruñó en mis labios y yo solo lamí estos en señal de rebeldía. Tomo mis muslos, me alzó con una facilidad que no hizo más que estremecerme, rodeo mis piernas en su cadera y con mis brazos rodeo su nuca sin dejar de comer sus labios con vehemencia, mis manos tocan su brazo y jadeo por las sensaciones y falta de aire, además de la sorpresa que me llevé.
─¿Desde cuando tienes músculos?─ pregunto casi en un susurro por la mínima cantidad de aire que tenía hace unos segundos.
─Desde antes de que lo hiciéramos con ropa y no te percataras─ sorprendida por el día cercano en el que pasó mordí debajo de su barbilla, tan suave.
─Me gusta─ gemí en su oído casi siseando, tratando de ser lo más sexual posible.
Apenas pasamos al espacio de su habitación me lanza con cuidado a la cama de colores casi opacos, quita toda mi ropa hasta quedar solo en mis bragas, era tan veloz y no hacía más que mantenerme entusiasta, suspiré al ver como se estaba quitando de manera lenta su ropa, muerdo mi labio al ver que en realidad si había obtenido abdominales, unos que ya quería lamer desesperadamente.
Me sentía atacada por su aura de poder, era tan dominante que no hacía más que calentar el momento.
Sus manos atraparon las mías y nuestros dedos entrelazados le dio un toque sentimental a nuestro acalorado beso, mordió mi cuello con suavidad provocando un jadeo de mis maltratados labios, la culpa eran los intensos besos.
Los besos bajaron hasta mi cuello logrando estremecer mi cuerpo, nuestras manos se alejaron ya que una de ellas entró en mis bragas y la otra metió uno de sus dedos en mi boca, realmente y de manera agresiva estaba haciéndole una felación a su dedo, gruñe cuando muerdo este y nuestros ojos encima del otro me hacen delirar, su mirada divertida apareció al igual que mi duda pero gemí descontrolada al sentirlo dentro de mí intimidad.
Mis manos se afirman sin éxito a las sábanas tirando de ellas con fuerza. Mi respiración se podía escuchar por todo el cuarto de Taehyung y también podía ver que le encantaba jugar conmigo por su mirada tan profunda que no quitaba de mi rostro sonrojado.
Antes de que pudiera pedir más el quita sus dedos y con una de sus manos toma su gran erección, le entregué el preservativo que estaba al lado de la cama, en el escritorio y le veo colocarlo, miré hacia arriba instantáneamente al sentir como en la segunda embestida ya estaba por completo dentro de mí.
Realmente había hecho todo el trabajo, en parte, mi humedad me había dejado sorprendida, mis muslos estaban algo pegajosos por los fluidos y aquello superó la facilidad de los dedos como inicio.
Sus manos se apoyaban a un lado de mi cabeza mientras que mis manos rasguñaban su espalda bastante fuerte, se clavaban en sus trabajos músculos y los bajo hasta la parte inferior de su espalda, a minutos mordía entre su hombro y cuello con mi respiración irregular, podía ver como sus músculos se tensaban por sus movimientos y él era realmente mi obra de arte.
Mis ojos se volvieron brillosos por el placer y sentía que yo no podía ver nada por las posibles lágrimas.
─Taehyung─ gemí y en segundos sus penetraciones eran más constantes, pude ver la brillosa piel que tenía y lo sexy que se veía en estos momentos.
Sobre mí, tan dominante.
Ya no podía contar sus movimientos contra mi cuerpo sudoroso y brillante, pude sentir mis ojos colocarse en blanco, realmente estaba sintiendo como el clímax del momento estaba llegando a mi y sin más en menos de dos minutos las embestidas de Taehyung pararon pero el seguía dentro de mi presionando su pelvis contra mí, siento las grandes contracciones de mi orgasmo.
El sonido de nuestras pieles chocar se detuvo pero yo no había escuchado nada desde que el clímax me arrasó.
Cuando se aleja de mí, puedo ver el condón lleno de su esperma, mientras lo cierra con un nudo.
─¿Cuándo te corriste?─ pregunté extasiada, no había podido ver demasiado por las lágrimas que habían amenazado salir de mis ojos.
─Cuando colocaste los ojos en blanco. No voy a negarlo, me ayudó.
⸙┆🔫
ya empecé a escribir la novela de este relato, voy por el segundo capítulo y no tendrá muchos más, no se cuantos capítulos exactamente pero no más de quince, eso, dentro de poco publicaré la introducción.