Impure© | Shawn Mendes

By respectstyles

105K 7.6K 3.2K

❝¿Quién diría que el hombre más severo e imperturbable de la empresa Fairchild podría llegar a ser el castiga... More

IMPURE©
CAST + PLAYLIST
IMPURE'S VIDEOEDIT
01. "Shawn Mendes"
02. "Bienvenido a la empresa"
03. "Manzana mordida"
04. "Invitado"
05. "Ruth Gallagar"
06. "Mentir y alejarse"
07. "El viaje" (parte I)
08. "El viaje" (parte II)
09. "¿Aceptas entonces?"
10. "Poco hombre"
11. "Demasiada imaginación"
12. "El tipo de hombres"
13. "Un cambio"
14. "Débil orgullo"
15. "Gran potencial"
16. "El amor es una tontería"
17. "Alterego"
18. "Desconfianza"
19. "Niñerías"
20. "Sospechas"
21. "Pequeñas heridas"
22. "Demasiado"
24. "Ajeno"
25. "Gélido"
26. "Bomba de tiempo"
27. "Caos"
28. "Bésame" (parte I)
28. "Bésame" (parte II)
29. "Decisiones personales"
30. "Verdades"
31. "Niñita"

23. "Terriblemente placentero"

1.4K 145 31
By respectstyles

Capítulo dedicado a Alessandra2004mejia, vota y comenta si quieres una dedicación al siguiente❤

.

Habían pasado diez días después de que el doctor decidiera darme de alta y, a pesar de que mi brazo no estuviera del todo bien, había decidido tomar hoy las lecciones con Shawn por fin. No podía darme el lujo se perder más tiempo con respecto a ello, debido a que estaba dispuesta al cien porciento a ascender independientemente, sin necesitar de la ayuda de mi padre, porque esperando por él estaba esperando al mismo tiempo el día trescientos sesenta y siete del año.

Había logrado ir a Fairchild en el transcurso de estos días pasados, pero sólo para ocuparme de cosas pequeñas, como llevar y traer papeles e informar a distintos departamentos sus actividades, nada interesante. Debido a que tanto Joshua como Shawn habían exigido que así fuese, y a pesar que no quería hacerles caso, no tuve opción.

Al llegar a mi departamento al siguiente día de mí cumpleaños, la emoción no cabía en mi sistema a causa del montón de materiales profesionales que Shawn me había regalado. Un sinfín de lápices de distintas formas, tamaños y tonos, marcadores, distintos formatos de papel, blocks e incluso una tableta gráfica actualizada.

No había más que pedir.

—¿En qué piensas?

Su voz interrumpió mis pensamientos, provocando que lo mirase al instante. Ya no portaba su traje, aunque conservó su camisa blanca arremangada hasta sus codos y desabrochó tres botones de la misma, reemplazando sus pantalones de vestir por unos jeans oscuros.

—Nada interesante —respondí antes de dirigirme hacia él y observar como abría algunas gavetas en busca de lápices.

Me coloqué detrás de su espalda pasando mis manos delicadamente por sus hombros, bajando hasta llegar hasta su cintura y rodearlo con mis brazos, atrayéndolo hacia mí y comenzando a repartir pequeños besos por su espalda alta.

Gracias a Dios me habían quitado el yeso y conservaba una escayola que no había decidido usar después de salir de Fairchild, era incómodo como el brazo se me dormía todo el tiempo y los calambres eran para morirse. Dolía de vez en cuando, pero prefería descansar de ese horrible apoya brazos al menos unas horas.

—¿Qué estás haciendo? —cuestionó mientras sentía como su brazo de movía en distintas direcciones, como si estuviese buscando deslizando sus dedos suaves por la pantalla de su tableta buscando algo.

—Jugar, ¿lo recuerdas? —recordé el día en que Shawn me mencionó que él jugaba tal cual yo lo hacía, y fue cuando me preguntó qué si estaba tan necesitada.

Hace al menos dos meses.

Sentí su cuerpo vibrar y descubrí que estaba riendo en cuanto lo oí cuando mis manos se escabulleron debajo de su camisa, acariciando sus abdominales marcados con la yema de mis dedos, sintiéndome bendecida al instante.

De un momento a otro se giró inesperadamente encarándome. Tomó mi barbilla con sus dedos y su pulgar tomó posición en mi labio inferior, acariciando este mientras sus ojos los examinaban con detenimiento, causando que un cosquilleo se colara en mi sistema de inmediato.

Pasó su lengua por sus labios rosados delicadamente, como si estuviese tan ansioso como yo lo estaba. Aquellos se veían tan tentativos, llevándome casi al borde del precipicio en cuanto sentía como se acercaba cada vez más a mí.

—Me has hecho pensar en elegir cuál clase debo darte hoy —susurró contra mis labios, dejando un suave beso en la comisura de estos, provocándome de sobremanera.

—No creo que sea muy difícil de elegir, profesor —digo mientras mis manos van desabotonando su camisa, metiéndose debajo de esta, acariciando su espalda baja con agilidad y delicadeza a la vez, mis uñas causando que temblara bajo mi toque —. Creo que todo está... bastante claro a decir verdad.

Una pequeña risa de escapó de sus labios y me sobresalté un poco en cuanto se deshizo por completo de su camisa dejando a la vista su torso desnudo, permitiéndome apreciar la gloria por primera vez.

Dioses.

Para de jugar, Bella... —sus ojos examinaban mi rostro, buscando algo en él que no podía deducir en estos momentos —Vas a terminar perdiendo.

Sus manos se colocaron firmes sobre mis muslos, subiendo a través de estos para subir mi falda sin apartar su vista de mis ojos, para luego atrapar mis labios de nuevo mientras me subía, permitiéndome enredar mis piernas alrededor de su cintura mientras caminaba conmigo en brazos hasta que sentí mis piernas tocar algo frío, lo cual parecía ser una de sus mesas de madera y traté de no pensar en la seriedad con la que había dicho lo anterior

Esta vez yo misma busqué que me faltara el respeto, y por primera vez, se sintió jodidamente bien.

Me deshice de mi chaqueta por mi cuenta, sintiendo como sus besos bajaban por mi barbilla hasta llegar a mi cuello, mordiendo y succionando como un máster la piel de la zona, sacándome algunos suspiros y gemidos ahogados.

Sus mordidas eran lentas y suaves, como si disfrutara el hacerlo y, al mismo tiempo, como si quisiera acabar con mi paciencia.

Su tacto se dirigió al inicio de los botones de mi camisa, desabotonándola con rapidez, como si hubiese desabotonado mil camisas antes, lo cual me obligué a ignorar.

Gemí sin reprimirlo esta vez en cuanto tomó la decisión de morder mi clavícula y deshacerse por completo de la prenda, para luego proseguir con mi sostén, el cual desabrochó con la ayuda de una sola malo, arrojándolo lejos.

Una de sus manos tomó uno de mis pechos mientras su boca se encargaba de jugar con el otro, provocando que mordiese mi labio con fuerza y que arqueara mi espalda dándole más accesibilidad. Así mismo enredé mis dedos en su cabello castaño, despeinándolo inconscientemente.

Shawn me estaba llevando hacia un lugar que desconocía, pero que estaba comenzando a anhelar cada vez más. Era como uno de esos lugares donde tomas malos hábitos que después no quieres dejar por nada. Bueno, Shawn era el mejor mal hábito que había adoptado.

Ni siquiera me di cuenta en cuanto ya mi cuerpo se encontraba totalmente desnudo sobre el escritorio y Shawn todavía conservaba sus jeans, por lo que decidí tirar de estos y bajar la cremallera, dejando que él se encargara de olvidarlos, permitiéndome pasar mis manos calientes por su miembro sobre su bóxer, provocando que gimiera en el espacio entre mi cuello y hombro, por lo que decidí ser más salvaje y adentrar mis manos en estos, sintiendo por completo el tamaño de este.

—Maldición —lo escuché decir, su voz raspoza erizando mi piel al instante.

Mi mano se desplazaba lentamente, tomando yo el mando en la situación desde el momento en que Shawn comenzó a maldecir y su respiración se tornó más pesada e irregular, pero eso duró poco, puesto a que el castaño decidió adentrar dos dedos de golpe en mi intimidad, ocasionando que soltara un grito ahogado en cuanto estos comenzaron a movilizarse, entrando y saliendo con lentitud.

La sensación era terriblemente placentera, ambos nos torturábamos mutuamente, brindándole a la vez la misma cantidad explosiva de placer al otro.

Sus labios atraparon los míos después de un rato, estos estos se desplazaban sobre los míos acariciándolos de la mejor manera existente, reprimiendo todos los gemidos que ambos queríamos soltar y llevándome directamente hacia el cielo con los movimientos que ejercía su lengua contra la mía, y fue en ese instante, en medio de todo, que me percaté que ambos éramos bastante escandalosos.

Arqueo mi espalda de nuevo en cuanto el castaño comienza a dar movimientos circulares con sus dedos aún dentro de mí, causando que gruñera de frustración, quería gritarle que los moviera aún más rápido, por lo que moví con fuerza mis caderas, pidiendo más.

—Deja de torturarme, maldita sea —reproché, obteniendo una risa entrecortada por su parte.

Sus dedos comenzaron a moverse lo suficientemente rápido como para que fuese imposible reprimir mis gemidos, para continuar moviendo mis manos sobre su duro miembro.

Y fue en ese momento en que lo sentí venirse dentro de su ropa interior, sacándome una sonrisa de satisfacción mientas sentía mi frente sudar y echaba una ojeada su pecho en la misma situación.

—Casi... —informo casi inaudible, para que unos segundos después yo obtuviese un orgasmo perfecto con los dedos de Shawn aún dentro de mí.

Traté de normalizar mi respiración en el momento en que Shawn dejó caer su frente sobre mi hombro, intentando lo mismo que yo. Se sentía realmente bien sentir su cálido aliento descontrolado rozar con mi piel.

—Espero que nuestras clases terminen así siempre, Bella.

.

AYYYY JUEPUTA AL FIIN.

Las que han estado leyendo Impure desde hace mucho tiempo atrás tienen que amarme, sé que han esperado por algo así por muchísimo tiempoo.

+40 votos y la sigo, ¿?

Continue Reading

You'll Also Like

509K 36.7K 72
Historias del guapo piloto monegasco, Charles Leclerc.
68.6K 3.7K 42
Violeta Hódar 23 años (Granada, Motril), es una estudiante en último curso de periodismo en Barcelona. Esta se ve envuelta en una encrucijada cuando...
55K 6.9K 59
Los mellizos Han, Jisung y Hyunjin, son chicos nacientes de Busan, de una madre soltera y con el estricto trabajo de belleza y modelaje. Sin tener un...
597K 42K 76
Lara pensaba que Toni era el amor de su vida, pero dejó de serlo hace mucho, después del primer golpe que recibió por su parte cuando estaba embaraza...