Pedon por los horrores autograficos, no tuve tiempo de editarlo!!
Me levante removiendome llena de incomodidad, Niall estaba dormido a mi costado ya que miró un estúpido video y le dio miedo dormir solo, la verdad es que ya estaba haciendo bastante frío, así que no fue tan malo.
"Buenos días cariño, espero no sigas furiosa Xx"
Si no lo estuviera hubiera sido muy lindo despertar y mirar el mensaje de Louis. Pero lo estaba así que simplemente lo apagué y guarde. El techo lucía muy interesante el día de hoy.
- Hola.- la voz ronca de Niall me saco un leve susto, giré a mirarlo en la misma posición que yo.
- Me asustaste.
- ¿Estas enojada con Louis?
- Un poco.
- ¿Y ahora por qué?
- Es mi culpa.- susurre cubriendome bien con el esponjoso edredón blanco. - Pero no voy a aceptarlo.
- Típico de un Whitcool.
- Me molesta todo últimamente.
- Pre-menopausia querida, eh escuchado de eso.- solté una carcajada y me acerque a el para abrazarlo con fuerza, el rubio levanto su brazo y me regreso el gesto.
- Te amo mi rubio estúpido.
- Siempre eres tan linda Dalls. También te amo.
- ¿Si?- escondí mi rostro en el hueco entre su brazo y su abdomen.
- Si, pero desde que tienes novio te olvidas de mi.
- Eres un mentiroso, aunque quisiera hacerlo, no podría, digo....vivímos juntos.
- Te las ingenías para hacerlo.
- Lo siento, ¿qué te parece si hoy cancelamos cualquier asunto y nos dedicamos tiempo?
- Me parece..... bien.
- Genial.
- Y sé que podemos hacer...
- ¿Qué podemos hacer?
- Irémos a comprar un árbol de navidad.
- ¿Es enserio?- pregunté entusiasmada y me levante rápidamente de la cama.
- Sip y todos los adornos, ¿cuanto falta para navidad?
- Como tres semanas Niall, estamos en la primera semana de diciembre.- dije riendo y el sonrió.
- No importa, ya irémos.
- Perfecto, tomare una ducha.
- Yo igual, ponte mi sweeter se te ve genial.
- No.- entré en la ducha poniendo el agua en lo más caliente y después comencé a acomodar la temperatura.
Estaba emocionada, siempre había adorado la navidad más que otra cosa y si me entusiasmaba bastante la idea de adornar la casa junto con el rubio sin cerebro.
Salí después de unos 15 minutos de shampoo y jaboncito.
Me cambie rápidamente cubriendome bien del horrible frío.
- ¡Niall!
- Abajo.- salte las últimas dos escaleras y corrí a la cocina, Niall estaba preparando algo de desayunar.- Hago algo rápido, ¿esta bien?
- ¿Qué es?
- Beagles con philadelphia de blue-berry y café.
- Me parece deliciosa su elección señor Horan.
- Me alegra que haya sido de su agrado señorita Whitcool.
- ¿Podría por favor pasarme el café para prepararmelo señor Horan?
- Pero claro que si señorita Whitcool.- el celular que estaba conectado al cargador del otro lado de la cocina comenzó a sonar.- ¡Oh ven Dallas, que no sé quemen los beagles!- tiró de mi muñeca y me puso frente a la estufa.
- ¿Por qué no los metes en el tostador?
- Me dara cáncer.... Niall Horan.- dijo atendiendo en su teléfono.- Oh, hola Harry....- giré el beagle que comenzaba a ponerse apeteciblemente dorado. - Oh no lo sé, iré con Dallas al centro comercial....Um espera, ¿Dalls?- giré apenas sacando los panecitos del recipiente.- Sé que dije que saldríamos solo nosotros dos pero.... Harry esta solito y quiere venir con nosotros.
- Ah si, me parece bien.- abrí la philadelphia embarrando mucha en el cuchillo para ponerla deliciosamente en el pan.
- Si puedes venir, pero te aviso que iremos a comprar cosas para la navidad..- una carcajada salió del pecho de Niall.- Okey, me parece bien entonces, te llamo cuando estemos haya, te quiero rizos falsos. Si, si, besitos.- colgó y camino hasta mi.
- ¿Qué dice?
- Que sus padres se fueron de urgencia a África, así que estara solo toda la semana y en este momento estaba muy aburrido por que ¿te acuerdas de Federica? Es su sirvienta, ah pues pidio vacaciones por eso del mes de navidad y entonces Alonso, el chófer y mayordomo de su casa, tiene una hija como de 12 años, la miré hace poco, pues enfermo y Dios, sería una pena que algo le pasara, pobre niña, pero bueno siempre la miraba sin zapatos en este jodido frío, era obvio que se iba a enfermar y de hecho, ¿sabes qué? Esa niña esta enamorada de mi y de Louis, siempre nos adoro, los padres de Harry la tratan como una hija más así que decidieron que le darían a Alonso todo el mes para que fuera a llevar a su hija a Washington por que ahí estan los mejores hospitales, pero eso ya lo sabes, ¿te acuerdas cuando enfermo la abuela Susan? Oh pobre Charles se estaba volviendo loco por que bueno es su mama, si mi mama se pusiera tan mal como aquella vez estaba la abuela Susan yo creo que yo....
- ¡AL PUNTO NIALL!, ¿QUE FUE LO QUE DIJO HARRY?- dije exasperada tomando mi café y mi par de beagles.
- Uy, nada, que nos veía haya.- solté una risa baja negando con la cabeza, pero es que siempre se iba de una cosa a otra.
Desayunamos hablando de mil cosas y riendonos también, como cada desayuno con el chango alvino de mi mejor amigo.
Nos lavamos los dientes y nos subimos en el mercedes de los padres de Niall para ir al centro comercial.
Harry llegó haya a los 10 minutos, donde yo y Niall peleamos a muerte por elegir los colores de los adornos del árbol y la casa en general.
Al final ganó Harry, que poco tenía que ver en esa discución.
- ¡Me encanta!-grité mirando un muñeco inflable de Santa Clous entrando por una chimenea.
- Este es mejor.- dijo Niall mostrandome un muñeco de nieve.
- ¡Tu punto es siempre llevarme la contraría!
- Es que no es mi culpa que no tengas buen gusto como yo.
- Eres un tarado.
- Chicos ya basta.- dijo Harry con una banderilla que había conseguido hacía como 10 minutos y seguía a la mitad.
- Harry dile.- grité histerica y el rizado sonrió.
- Le.
- Dios mío santo.- Ambos tiramos la caja de los muñecos a donde pertenecía con mala cara.
- Arruinaste cualquier tipo de emoción con tu estúpido comentario.- dijo Niall caminando con el enorme carrito azul.
- Definitivamente, ¿por qué rayos habíamos aceptado que Harry se nos uniera? Cuando no tengamos muñeco inflable será culpa del idiota.
- ¿Por qué me tratan tan mal?
- Cállate, nos arruinste la navidad.- Niall negó con la cabeza observando una caja de foquitos navideños.
- Gracias Styles.- me uní.- Estos estan más bonitos.- le mostre a Niall la caja que yo estaba mirando.
- No es verdad, estos además tienen más.
- Claro que no, estos tienen 180 pequeños foquitos, esos tienen solo 150.
- No Dallas no seas tonta, ese no es el número es este de aquí, tiene 240.
- ¿Y para qué quieres tantos?
- Para tener más que los demás.
- Mierda ustedes son un verdadero lío.- dijo Harry caminando hacía las esferas.
- Cállate arruina navidades.
- Me gustan más estos.
- Pero estos tienen más.
- ¡Niall no necesitamos tantos!
- ¿Tu qué sabes? Pienso comprar un árbol muy grande Dallas, esos definitivamente, NO van a alcanzar, necesitamos estos.
- Podemos comprar dos cajas de estos, cuestan 13 dólares y tu caja cuesta 20.
- Si pero si compramos dos cajas de esos van a ser 26 dólares, más los impuestos como 28. Y con estos son solo 20, con impuestos como 22.80 o algo así.
- Prefiero pagar 6 dólares más, por estos que son más bonitos.
- Joder- dijo Harry con cara de pocos amigos.- ¿Por qué no con un estilo ponen el árbol y los otros para la casa?
- Dios Harry no seas tonto, ya elegimos los de la casa.- Niall le mostró otras cajas más.
- Fue un error querer venir con ustedes.
- ¿Vamos a comprar también lo de la cena?- le pregunté a Niall y miré un leve brillo en sus ojos.
- ¡SI!, yo elegire eso.
- ¡No!, tu elegiste la mayoría de los adornos.
- ¡Tu fuiste!
- No sé si irme o matarme.- escuche que dijo Harry, que negó con la cabeza y saco su celular.
TROY.
- ¿Quieres o no?- le pregunté a Barbara que sonrió levemente mirandome como si fuera una clase de maravilla imposible de creer, me sentí un poco incomodo y retrocedí un paso.
- Si, coca-cola.
- Y un refresco coca-cola, ¿puedes darme las palomitas con extra mantequilla? Y....dulces, compraré dulces.- le dije al chico de la dulcería y el asintió.- ¿Qué pelicula dices que es?- le pregunté con una media sonrisa.
- Capitan America.
- Oh genial.
- ¿Es tu super heroe favorito?
- No, es el de Louis.- dije riendo.- El mío es Iron Man. - se quedo observándome como si acabara de meter la pata, sonreí para aclarar que no había sido así y sacudí un poco mi cabello. - Pero Capitan America también me gusta.
- Genial, entonces vamos.- pagué lo que habíamos pedido y entramos en la sala de cine, tomamos buenos lugares y la pelicula comenzó, me había quedado mirando realmente entretenido toda la pelicula mientras comía con Barbara.
- Oye si quieres tiro mi soda y te doy el vaso, digo....para que tu baba caíga ahí y no al piso.
- Ja, ja.- dijo falsamente haciendome reír.
- Esta....guapo lo admito.- ella me miró incredula y soltó una leve risa.
- ¿Es enserio Troy?
- Si, no hay nada de malo con eso, es como tu puedes admitir que Scarlett Johanson esta como quiere.
- Bueno si, es inusual, pero que bien que aceptes que el esta perfecto.
- Conozco a personas físicamente más guapos.
- ¿Cómo quien?
- Austin, William, Louis...- ella rodó los ojos divertida.
- "Fisicamente" más guapos.
- Si, ellos si que son atractivos, si tan solo, tuvieran más tatuajes...
- ¿Serían tu?
- Iba a decir que serían perfectos pero, si, es casi lo mismo.
- Tu si que tienes autoestima T.
- Solo sé lo que es bueno B.- ella de nuevo soltó una risita.
- Payaso.
- Prefiero un termino más así como, sensual.
- Tonto, ¿puedes también admitir que Justin Bieber es súper guapo?
- Am, no. Hay niveles por favor.- ella soltó una carcajada y uno que otro "shhh" se escucho. Habíamos solo como 8 personas en la sala.- Si admitiera que ese tipo es guapo, sería como admitir una homosexualidad que no tengo.
- ¡No te hace gay!
- Pero no escucharas de mis labios decir que ese rubio es guapo, tal vez de los de Louis.- susurre en su oído y miré como su piel se erizaba, me recargue bien en el asiento tratando de no acercarme mucho a ella. No era mi intención en ese momento que ella tuviera algún sentimiento hacía mi.
WILLIAM.
Eleanor soltó una risita leve y yo tiré de su mano para besar su mejilla. Habíamos ido a pasear a la playa que debo decir, estaba bastante frío en cuanto al clima. Al ser primera semana de diciembre y tomando en cuenta que en la playa siempre hacía frío, en ese momento estaba helando. Eleanor lucía encantadora con uno de mis sweeters y una pequeña trenza en el lado derecho a su rostro.
Dios esta mujer me tenía fascinado. Era simplemente perfecta.
- Me miras como si estuvieras viendo un dinosaurio.
- ¿Un dinosaurio?- levante una de mis cejas al mismo tiempo que una sonrisa curvaba mis labios.- Bueno debo admitir que si observara un dinosaurio estaría fascinado de que fuera posible, justo como estoy fascinado de que sea posible que seas tan bella Jane Calder.- un rubor se extendió por sus mejillas y se apresuro a cubrir su rostro.
- Eres tan lindo conmigo William...
- Es justo lo que mereces Eleanor.
- Aw.- se acerco a mi tomando mi cuello con sus manos cubiertas por mi sweeter y beso mi mejilla suave y lentamente. Cerré los ojos disfrutando de aquello, sintiendo como mi corazón latía rápidamente, como si quisiera atravesar mi pecho. Solté el aire retenido en mis pulmones levemente y de un momento a otro, sentí los labios de Eleanor chocar contra los míos. Fue la cosa más inesperada en la vida. Jamas, jamas, jamas, había besado a Eleanor y en ese momento solo sucedía.
Nuestros labios se mezclaban a un ritmo lento, suave, pero dulce y delicioso. Tarde un poco en reaccionar, pero apenas lo hice, tome su cintura con mis manos y la acerque a mi, sus dedos jugaban con el cabello en mi nuca y de vez en cuando tiraba de ella para acercarme más a ella. Me aleje para que ambos pudiéramos de nuevo respirar y ella me sonrió.
- Tenía que hacerlo.
- Y nada me alegra más, que el que lo hayas echo bonita.
- Te quiero William.
- Y yo te quiero a ti, Eleanor.
AUSTIN.
- ¡Basta Austin!- dijo Emma riendo, seguí haciendo cosquillas en su vientre mientras ella rogaba que parara.- ¡Por favor!
Me detuve observándola tratar de dejar de reír, su sonrisa dejaba escapar el aire de su risa mientras sus ojos brillaban al contenerse.
Que niña más bonita.
- ¡Eres un tonto!- su mano se estrello contra mi codo.- Te eh dicho que pares, odio las cosquillas.
- Te encantan.
- Pero me desesperan.- dijo con una sonrisa y acaricio su cabello rojizo.- Como tu me desesperas.
- ¿Y también te encanto o no?- bromee y ella se quedo quieta mientras un leve sonrojo cruzaba sus mejillas.
- ¡Austin!
- ¿Qué?- solté una pequeña risa y ella se abrazo a mi cuello.- Sabes que si.
- ¿De verdad?- pregunté un poco ingenuo y ella rió.
- Oh no lo sabes.
- ¿Qué cosa?
- Nada.- se aparto de mi tomando su bolso largo y hecho su celular dentro.- Ten, mi parte de la cuenta, debo irme.
- No debes, quédate.
- No, no puedo...
- Emma...
- Lo siento Austin, debo irme, te veo en la escuela mañana.
- Pero, no, Emma espera.- Dejo el dinero sobre la mesa y me apresure a levantarme para tomar su mano. Tiré de esta haciéndola rodar, quedo a escasos centímetros míos sin poder hablar o moverse, era de verdad pequeña, sus enormes ojos me miraron con un suave brillo en ellos.- Tu..tu..tu..deb..debes, am.- trague en seco.- Llevarte tu...dinero.- suspire, ¿desde cuando me gustaba Emma? Desde siempre ¿y desde cuando tartamudeo al estar con ella?, ¡Desde que no se supone que deba!- Yo invitaba, ¿recuerdas?- sonreí inmensamente sin alejarme de ella, se quedo inmóvil aún así. Algo dentro de mi me decía, "besala, besala, besala, joder" casi tan gay como en la película de la sirenita en la escena del paseo en canoa, "si la quieres besala, besala y ya veras, nananana" no me la sabía tan poco muy bien. Eh inclusive mi bella Emma tenía un parecido con.... ¿qué coño estoy haciendo? Tengo a Emma a menos de 6 centimetros, sin moverse, viéndome como si pudiera besarla en este momento y yo.... ¿pensaba en la pelicula de la sirenita?
- Yo debo irm...- mis labios se estrellaron contra los de ella como si yo no pudiera controlarlos. Rápidamente me siguió el beso tomando mis mejillas con fuerza y acercándome mucho a ella como si tuviera mucha desesperación por besarme, como si lo ansiara tanto como yo.
Se alejo de mi y me abrazó rápidamente estrellando su mejilla en mi pecho. Si no la conociera, no supiera que lo hacía para esconder un sonrojo, rayos eso me encantaba. Porque quería decir que ella sentía algo por mi, tal vez parecido a lo que yo sentía por ella, por que jamas sería igual.
- Te quiero Austin.
- Y yo a ti Em.
- Y si, en realidad si me encantas.- dijo con una risita nerviosa.- Más de lo que deberías.
- Tu me encantas a mi, mucho pequeña.- me aleje de ella para poder observarla.- ¿Puedo besarte?
Ella sonrió y se paro en las puntas para unir nuestros labios.
- Todas las beses que quieras.- susurro en ellos.
LOUIS.
- Idiotas.- gruñí presionado todos los botones del control del play station.- Hijos de perra mueran todos.- mis dedos me ardían de tanta fuerza aplicada en los diminutos botones cuando las grandes letras de "GAME OVER" aparecieron llenando la pantalla, bufé.- Literal, cuando decía que murieran todos, me incluía.- dije para mi mismo y me reí de mi mal chiste personal.- ¡Ah joder que aburrimiento!
Me estire y me levante del sillón para entrar en mi cuarto y prender el computador.
Mis hermanos tontos estaban todos con sus chicas ¿y yo? Bien gracias por preguntar.
Dallas se había molestado ayer y definitivamente seguía estándolo por que apago su celular. Y ni siquiera estaba en casa, Niall obviamente estaba con ella, Harry no podía estar incluido por que se había largado con ellos. Barbara y Eleanor estaban con mis hermanos y quitando a todos esos pequeños enamoradizos idiotas, solo quedaban Romeo y Liam. Inclusive Lottie se había ido con su pretendiente a comer.
¡MIS PADRES HABÍAN SALIDO JUNTOS!
Y Dallas me ignoraba. Pero me sentía bien. Claro.
- Romeo Dess Colen, ¿en qué puedo ayudarte?
- Soy yo payaso.- dije cambiando el canal en mi televisor.
- Ah, hola payaso.
- Que mal chiste, no te cuelgo por que estoy en verdad aburrido.
- ¿Y qué quieres?
- Que me desaburras.
- Te bailo ula-ula.
- ¿Por qué no?
- Voy al club, ¿por qué no vienes conmigo?
- Si, no suena tan mal.
- Genial, voy por ti, no olvides tu credencial cariñito por que no regresaremos por ella.
- Vale la voy a buscar.
- Llego en 15, adiós mi amor, te amo.
- Y yo a ti cariñito.
Colgué la llamada y me levante para tomar una ducha. Después de cinco rápidos minutos salí cambiándome y cubriéndome con protector solar. Busque mi mochila del club y al no encontrarla fui al cuarto de William que seguro tenía todo más ordenado y efectivamente, su maleta del club estaba en la pura entrada, la tome y baje por una botella de agua a la cantinita de la cocina. El claxon del auto de Romeo sonó y salí tomando mis llaves y lentes de sol. El pick up blanco y enorme esperaba justo enfrente así que lance mi mochila detrás para después subir al auto.
- Hola señorita.
- Buenas tardes caballero.- golpeamos puños y me percate de que Liam venía justo detrás.
- Liam, hola.
- Louis, ¿cómo te va?- dijo sin apartar los ojos del celular.
- Bien, si se puede decir así.
- ¿Dallas?
- ¿Eres adivino?
- En realidad, si.- Romeo sonrió girando el volante para salir del residencial. - Oh tal vez hable con Niall esta mañana, ¿todo bien?
- Si, eso creo, hablare con ella en la noche tal vez todo se le pase.
- Espero.
- ¿Puedo saber el problema?
- Barbara.- dije encogiéndome de hombros.- En realidad me parece absurdo si lo preguntas, ha pasado los últimos días con Troy.
- Bueno si estuviera enamorado de una chica y ella tuviera un novio y una gemela o cuatrillizas, también me iría con una de ellas.- rodé los ojos.
- Técnicamente, es lo que han hecho la mayoría de las chicas.
- ¿Ah qué te refieres Liam?
- Eleanor estaba enamorada de ti en primero.- dijo divertido.- Vamos en cuarto, si, y ahora esta muy enamorada de Will, pero no fue la primera opción, yo creo que igual a pasado con Barbara y terminará loca por Troy.
- Pues no sabe en lo que se mete.- murmure levemente.
- Yo creo que si sabe Louis, todos sabemos que tipo de persona es tu hermanito.
- No estoy muy orgulloso de que llevemos el mismo rostro, me han confundido con el un par de veces y admito que me ha metido en problemas.
- En cada familia hay un chico problemático.
- Soy hijo único, ¿cuenta?- preguntó Romeo estacionando el auto en el lugar que llevaba su nombre.
- Tu eres el niño problema idiota- dijo Liam divertido.
- No lo soy, soy el chico guapo de la familia Colen, probablemente el más rico y sensual también.- dijo con una sonrisa llena de confianza.
- Que asco.- bufé y baje del auto.
Caminamos peleando con Romeo hasta la entrada y saque la tarjeta de William, ya que no había encontrado la mía.
La alberca brillaba con el sol sobre ella como si fuera una excelente idea entrar ahí, pero hacía mucho frío para entrar y no era el propósito. El sol brillaba pero hacía un frío del demonio.
- ¿Tennis?
- Golf.
- Basketball.
- No, golf.- Dijo Liam con mala cara.
- ¡Basketball!
- Yo digo que tennis.- hable caminando hasta los lockers y dejando la mochila de Will dentro del suyo.
- Bueno, basket.- Liam bufó a mi lado.
- ¡Tennis!
- Bueno entonces lo que quieran.
- Tennis, esta decidido.
- Y después basket.
- Perfecto.
Caminamos rápidamente hasta las canchas con las raquetas en mano y unas cuantas pelotas.
- Tennis es solo de dos personas, somos tres.- Romeo parecía meditar como si hubiera echo el mejor descubrimiento del mundo.
- Idiota, por lento no juegas primero.- Liam le golpeo el brazo riendo y entramos a una de las canchas.
- ¡Tomlinson!- dijo un chico del que conocía bien esa voz, ese asentó australiano y repugnante y ese toque de burla.
- Que sorpresa.- murmure sin bromear y el se acerco a mi con la más enorme sonrisa que había visto antes, negó con la cabeza y me dio un abrazo como si le agradara mucho verme.
- Y vaya que si, Colen, Payne.
- ¿Que hay Clifford?- dijo Romeo con una media sonrisa.- ¿Regresaste de Australia?
- En realidad estaba en Japón. Pero si, estaré aquí por una temporada, papa tiene que arreglar cosas en las industrias Clifford.
- Que bien.
- Si, que gusto verlos chicos, más aún ahora, que sé que nos veremos seguido, entrare el semestre entrante en la vieja escuela, con ustedes.
- Que emoción.- dije con ironía y el sonrió, sus ojos no eran visibles por los lentes de sol, pero estaba seguro de que había un poco de malicia en ellos.
- Lo mismo digo Louis, saludos a la familia y a tu bella madre.
- Estúpido.- gruñí y el se retiro los lentes para guiñar un ojo, sentí todo el coraje en mi cuerpo y me abalance sobre el pero los brazos de Liam y Romeo me detuvieron. Michael soltó una risa divertida al mismo tiempo que de doblaba para reír más fuerte.
- Te veo luego Tomlinson. Adiós chicos.- levanto dos de sus dedos en señal de adiós y se marcho con dos chicos detrás de el.
- Ese idiota nació para fregarme la vida.- murmure soltándome con agresividad del agarre de Liam y Romeo.
- Es un chico genial.- Romeo hizo una seña a uno de las mujeres que trabajaban en el lugar, llamada Emily que se apresuro a nosotros.
- ¿Estas de broma?
- Bueno a mi no me desagrada.
- A mi tampoco.
Rodé los ojos.
- Pero bueno, no es tan agradable, es un poco presumido, ¿no es así Romeo?
- Mas o menos Liam, digamos que estamos rodeados de ese tipo de gente.
- Romeo es el vivo ejemplo de ellos.- dije burlón y Romeo me miró mal.
- Hola chicos, ¿que necesitan?
- Emily linda, tráele a papi Romeo una rica piña colada muy cargada.
- Bien, ¿Liam?
- Una cerveza esta bien preciosa, una rica corona muy fría.
- Lo tengo y..... ¿William?
- Louis, Emily, Louis.
- ¡Louis!- ella sonrió inmensamente.- ¿Cuanto tiempo sin venir por aquí?
- Mucho en realidad, ¿me extrañaste?
- ¡Pero claro! siempre te mando saludos con Austin y William, miré a Troy hace dos días, vino con Barbara, ¿que ironía no es así?
- ¿Con Barbara?- preguntó Romeo sorprendido.
- Sip, bueno chicos tengo que seguir trabajando, entonces.... ¿qué vas a querer Loui?
- Un agua es suficiente Emi, gracias.
- Vienen enseguida.- dijo con una enorme sonrisa y desapareció.
- Mira esto.- dijo Romeo con la vista clavada en su celular.
- ¿Qué sucede?
- Un snapchat.- murmuró mostrándome una foto de Dallas con una bella sonrisa y con Niall a su lado.- No es tan malo, solo hace compras navideñas con el rubio.
- ¿Es linda no es así?- pregunté sonriendole a la pantalla.
- ¿La adoras no?
- Como nunca eh querido a nadie antes.- murmure.