La mayoría de la gente en el gran salón eran plebeyos. ¿Cuándo habían tenido la oportunidad de ver una existencia tan piadosa como el príncipe heredero en persona? Durante un rato, permanecieron allí con asombro.
La cara del Mayor Zhong estaba llena de sorpresa e incredulidad. Se apresuró a presentar sus respetos, "¡Éste da la bienvenida a Su Alteza, el Príncipe Heredero!"
¡Era como si fueran golpeados por un rayo! Todos quedaron estúpidos. Incluso Ning Xuemo se sorprendió.
-¿El Príncipe Heredero?
*¡butun!* *¡butun!* Todos en el pasillo se arrodillaron. "¡Saludamos al Príncipe Heredero!"
Ning Xuemo guardó silencio.
Naturalmente, ella sabía quién era el Príncipe Heredero. Lo que no sabía era por qué corrió a su casa, se quedó en su techo y escuchó desde una esquina ...
Pensando en ello, ¿cuánto tiempo había estado escuchando?
Por supuesto, no podía preguntarle. Después de todo, era una figura increíblemente poderosa. Ella no podía ir a provocar a este pez grande.
Con el distinguido Príncipe Heredero actuando como testigo de esta apuesta, ¿cómo podría su 2do Tío atreverse a decir lo contrario más tarde?
No tenía más alternativas que firmar un contrato con Ning Xuemo en los términos de la apuesta. Cuando la gente del 2do Tío había venido a quitar las cosas, aunque la forma en que escogieron las cosas era bastante aleatoria, sin embargo, el Mayor Zhong había mantenido un registro de cada uno de los artículos que habían tomado. Cuando se convirtió en plata, ascendió a 5 000 taels de plata.
En presencia del príncipe heredero, nadie se atrevía a hacer ningún truco. Incluso si el 2do Tío planeaba renunciar a su deuda anteriormente, ahora mismo con el Príncipe Heredero aquí, no se atrevió a tener tales pensamientos ...
En su corazón, esperaba egoístamente que Ning Xuemo no pudiera sanar a su esposa ...
Los ojos de Ji Yunhuang que eran tan brillantes como la luna aterrizaron en Ning Xuemo, "Srta. Xuemo, conmigo como el testigo, usted puede comenzar."
Este continente era caótico y sólo se respetaba la fuerza. Todos los días habría conflictos constantes, y el número de heridos era demasiado numeroso como para contarlo. Como resultado, el estado de un médico era muy alto.
Aunque el número de personas que estudiaban para convertirse en médicos no era poco, el número que realmente logró alcanzar los estándares de médico oficial era lamentable. Eran extremadamente raros, pero casi todos habían sido arrebatados por esas grandes potencias y sectas. Incluso en el Palacio Imperial, eran escasos y eran tratados como maestros del estado.
Debido a su identidad, Ji Yunhuang conocía a muchos médicos, muchos de los cuales eran maestros de su campo. Sin embargo, incluso los más destacados de los médicos no fueron capaces de restaurar cualquiera de los cuatro miembros.
Por lo tanto, cuando Ning Xuemo afirmó que podía hacer lo que no podía, Ji Yunhuang se sobresaltó naturalmente. Debido a que temía que 2do Tío no aceptara la condición de Ning Xuemo por su amor por el dinero, Ji Yunhuang no tenía otra opción que mostrarse a sí mismo.
Con su alteza el príncipe heredero supervisando personalmente, todo lo que Ning Xue Mo necesitaba para volver a unir el brazo de su tía fue preparado muy rápidamente.
Una habitación impecablemente limpia estaba preparado. Ji Yunhuang incluso lo limpió a los estándares de Ning Xuemo de una sala quirúrgica con sus habilidades "Poder mental". Aunque no podía igualar las salas de operaciones del siglo XXI, todavía era aceptable.
"Su Alteza, por favor espere en el gran salón." Ning Xuemo se inclinó ante él sin ceremoniosamente conducirlo.
Ji Yunhuang originalmente había querido observar directamente sus acciones, pero sus siguientes palabras disiparon sus pensamientos. - "Cuando esté operando, tendré que quitarle toda la ropa."
Inmediatamente se giró y se fue. "Esperaré en el gran salón ..." No tenía ningún interés en ver el cuerpo de una mujer de mediana edad ...
La segunda tía ya había sido golpeada por la técnica especial de Ji Yunhuang. Si el punto de acupuntura estaba sellado, definitivamente no se despertaría. Por lo tanto, Ning Xuemo comenzó la operación sin preocuparse de ser interrumpido por la tía 2da sacudida de dolor.
Pasó un cuarto de hora. Pasó media hora. Entonces, una hora había pasado ...
La sala de operaciones improvisadas era extremadamente tranquilo para la gente esperando afuera. De vez en cuando, podían oír el ligero sonido metálico de una tijera o un cuchillo.
Todo el mundo estaba esperando silenciosamente en el gran salón. Por supuesto, con el Príncipe Heredero aquí, no se atreverían a hacer nada más.
El Mayor Zhong ofreció el té con cuidado en un nuevo juego de té, pero el Príncipe Heredero se limitó a mirarlo antes de decir con ligereza: "Deja".