¡Va a ser mío!

By Mabib_

695K 64.3K 13.5K

Todo el alumnado femenino de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, está de acuerdo con que... More

Derechos de autor.
Sinopsis.
Uno.
Dos.
Tres.
Cuatro.
Cinco.
Seis.
Siete.
Ocho.
Nueve.
Diez.
Once.
Doce.
Trece.
Catorce.
Quince.
Dieciséis.
Diecisiete.
Dieciocho.
Diecinueve.
Veinte.
Veintiuno.
Veintidós.
Veintitrés.
Veinticuatro.
Veinticinco.
Veintiséis.
Veintisiete.
Veintiocho.
Veintinueve.
Treinta.
Treinta y uno.
Treinta y dos.
Treinta y tres.
Treinta y cuatro.
Treinta y cinco.
Treinta y seis.
Treinta y siete.
Treinta y ocho.
Treinta y nueve.
Cuarenta.
Cuarenta y uno.
Cuarenta y dos.
Cuarenta y tres.
Cuarenta y cuatro.
Cuarenta y cinco.
Cuarenta y seis.
Cuarenta y siete.
Cuarenta y nueve.
Cincuenta.
Epílogo.

Cuarenta y ocho.

13.1K 1.2K 363
By Mabib_

Yo no quería que las cosas fueran como me estaban saliendo, pero tampoco quería esperar a lo que sea que pasara con Lautaro fuera en Puerto Madryn, viéndolo todos los días en la universidad y en las salidas por compartir la mayoría de amigos.

Probablemente no era la mejor decisión, ¿pero cuál era la buena? Ya habíamos puesto las cartas sobre la mesa y se cortó, no podía hacer nada más al respecto, sólo recomponer mi ánimo y dejar entrar a otra persona, porque la soledad hubiese sido la primera opción, pero no había necesidad de negarlo a Agustín cuando fue él quien siempre estuvo para mí.

Las dos semanas que pasé en Buenos aires, viví más con él que con mi hermano, hizo de todo para que yo me olvidara que en mi pecho todavía punzaba el vacío, me llevó a comer todas las noches, me hizo conocer la ciudad más de lo que ya hacía, salió temprano cada día para pasar tiempo conmigo y me hizo reír hasta que me doliera la panza. No omitimos la parte del sexo, no podía evitarlo y él tampoco, estaba en nuestro instinto y la pasábamos bien. Y con mi hermano y Sabri era mejor la relación, ya que despacito se iba metiendo entre ellos como algo mío.

— ¿Qué pensas que te pueda pasar cuando lo veas?

— ¿Por qué querés saber eso?

—Es que no quiero que te haga cambiar de opinión, no es fácil para vos y no me gustaría que arruine lo poco que lograste este tiempo.

—No te preocupes, no lo va a hacer. —le dije e intenté sonreírle un poco. —estoy convencida de esto, aparte ya tengo la admisión en la universidad y no quiero perder esa oportunidad.

— ¿Y tus papás qué te pueden llegar a decir?

—No van a estar muy contentos, querían que terminara el año, pero ya no aguanto, estoy ansiosa por estar acá.

Escuchamos por los altavoces llamar a los pasajeros del vuelo que yo tenía que abordar y fue el momento de despedirnos, no iba a ser por mucho tiempo, sólo el que me tardara hacer los papeles en la universidad y convencer a mis papás de mudarme y de trabajar en la empresa donde Agus era secretario.

Lo saludé y prometimos estar en contacto, hice el camino para abordar el avión y los nervios empezaron a comerme el estomago.

Había pensado en las probabilidades de mi reacción cuando lo viera desde los últimos días, era preferible no cruzármelo pero tampoco podía evitarlo, las cosas estaban claras y cada uno iba a tener su tiempo de asimilarlo, yo lo estaba teniendo, no era todo color de rosa pero al menos lo intentaba, y lo que era fundamental, es que yo no me iba de Puerto Madryn porque no quería verlo, solamente estaba haciendo menos difícil la tortura y más fácil mi futuro.


—Te pedí que al menos terminaras el año Cali, y faltan tres meses para que termine.

—Es inútil que lo haga, cuando empiece el nuevo cuatrimestre en Buenos aires no me queda correlativo el que hice acá.

— ¿Y vas a estar estos tres meses haciendo qué?

—Trabajando. —le respondí a mamá y ella se horrorizó aún más. —El jefe de Agustín tiene un socio trabajando en el mismo edificio y voy a ser su secretaria, son seis horas y es un buen sueldo, los chicos me dijeron que podía quedarme hasta que consiguiera algo, pero Agus vive solo y me ofreció vivir con él...

—Eh pará ese carro amiga. —levantó la mano papá con su intento de jerga adolescente, para no reírme me callé concentrándome en la conversación. —Eso es muy rápido, no lo conoces hace mucho y tampoco es tu novio.

—Ya sé, pero no quiero molestarlos a los chicos, aparte entre el trabajo y el estudio sólo dormiría en su casa.

—No sé Cali, creo que es una decisión muy repentina, yo pensé que ibas a tomar aire y ver a tu ahijado no a vivir allá.

—Perdón hija pero tampoco me gusta la idea que vivas con ese muchacho, me parece un chico excelente pero es muy rápido aún durmiendo sólo en su casa. —reiteró papá. Ninguno estaba convencido, quizá debía haber evitado decir que Agustín me ofreció vivir con él, pero no quería mentirles.

—A mí no me parece que pierdas el cuatrimestre por un capricho Camila, porque no creo que nada sea tan grave como para dejar de ir de un día para el otro.

—No fue una decisión tan rápida mamá, pero ustedes sabían que yo quería ir a Buenos aires.

—A trabajar de lo que estás estudiando, no a hacer todo lo que decís, vas a perder todo el esfuerzo de acá sin razón hija.

—Ya tomé la decisión, les agradecería que me apoyaran, sé que es difícil para ustedes también pero aparte de no querer vivir más con su plata, algún día voy a tener que independizarme y quizás el mejor momento es ahora, tengo veintidós años no puedo pretender que me mantengan toda la vida.

— ¿Por qué estás tan empeñada con eso? Cualquier chica de tu edad quisiera sólo dedicarse a su carrera sin tener que trabajar, nosotros podemos ayudarte.

—Mamá...—suspiré y retrocedí la silla para levantarme. —ustedes están acostumbrados a que eso pase acá, pero yo no voy a consumirlos por más amor que haya, quiero independizarme, tener experiencia, conocer lo que es el mundo adulto y si no me va bien, sé que los tengo a ustedes pero déjenme intentarlo, por favor.

—No te estamos diciendo que no, pero... Cali tu decisión es muy brusca, que supiéramos que pasaría no significaba que estuviésemos listos.

—Las mejores cosas pueden ser las más repentinas y apuesto a que sea así. —le dije y me acerqué a darle un beso en la sien, acaricié el hombro de papá y fui por mi bolso, para salir al encuentro que había establecido con mis amigas.

Llevaba pocas horas de nuevo en Puerto Madryn y todos mis sentimientos volvían a hacerse un maremoto en mi interior, dos semanas en Buenos Aires no me habían cambiado, pero al menos pretendieron hacerme olvidar que algo acá me lastimaba, era injusto decir que era por culpa de Lautaro, yo sola me lo busqué, nadie me dijo que siguiera el juego, yo lo quise.

Desde que besarlo fue una fantasía todo empezó a cambiar entre nosotros, ni siquiera me di cuenta que él me estaba gustando, tenía una adicción, hacer el amor fue el peor error porque no sólo pisé en falso, me encantó con un hechizo que no iba a ser tan fácil de borrarse, no cuando la esperanza que cambiase de opinión todavía estaba latente, aunque eso era absurdo, no lo iba a hacer por más intentos de convicción que tuviera de mostrarle el mundo que yo le podía dar, o hacer juntos.

—Creo que de la única manera que te voy a entender sin juzgarte es si me decís que es cierto lo que vimos todos de Lautaro últimamente.

— ¿Qué cosa?

— ¿Se enamoraron no? —preguntó Dani y fue hielo al corazón, por lo que negué sin dejar de mirar hacia la playa.

— ¿Te vas porque no querés que él esté enamorado de vos?

— ¿Qué? No.

—Es que no entiendo entonces, si su amistad se terminó y Lauti está como está porque vos te fuiste, quiere decir que se enamoró de vos y como no lo querés de esa manera preferís irte y hacérsela fácil a los dos. —frunció el ceño Aye, sacando una teoría totalmente inversa que hasta me causaba gracia.

—En realidad creo que es al revés.

—Pero no es Lautaro el que está escapando.

—Quizá no de la ciudad pero sí de él. —les dije a ambas mirándolas a través de mis anteojos. —Y yo no puedo hacer nada con eso, quise arreglar las cosas y prefirió que dejáramos de ser amigos, así que ahí está todo claro ¿no?

— ¿Y no crees que quiso dejar de ser tu amigo para ser otra cosa...?

—No.

— ¿Entonces porque está tan deprimido por vos?

— ¿Qué te hace creer que está deprimido por mí y no porque no sabe qué mierda hacer con la confusión que creía superada?

—Llevan a lo mismo Cali, está enamorado de vos. —me dijo Dani, pero no sonaba tan lindo cuando no podía hacer nada para demostrarlo, o mínimamente cuidar lo que habíamos tenido. —Deberías hablar con él, nadie lo ve más que en la universidad, no se junta ni con sus amigos, no sale de su casa, no quiere que nadie le hable y encima que de por sí es insoportable está peor no siéndolo, eso es depresión.

—Pero él quiere estar ahí Dani, su confusión podría haber sido superada conmigo siendo todavía mi amigo, y no lo quiso, ya no es mi problema porque demasiado tengo con los míos como para ayudarlo con los suyos, cuando quise él no y ya no hay nada para hacer.

—Perdón Cali pero me parece patético que te vayas de acá por ese tarado, ¿qué pasa con tu carrera, con tu vida acá, tu ahijado, tus amigas?

—No me estoy yendo por él, ustedes sabían que siempre quise estar en Buenos aires cuando mi hermano se fue, allá pude entrar en la UBA y tengo trabajo, a mi ahijado lo voy a seguir viendo al igual que ustedes...

— ¿Y tuviste que esperar a pelearte con él para tomar esa decisión a dos meses de terminar el cuatrimestre? —me preguntó Aye y volví mi vista a la playa para no mirarlas y que vieran las lágrimas que me amenazaban con caer por debajo de los anteojos.

La forma que todos tenían de juzgarme era hiriente, porque yo podía haber omitido algunos conectores con ciertas personas, pero todos preferían sacar sus propias conclusiones y acusarme a mí por cómo lo veían a Lautaro, si se habían dado cuenta no era mi culpa que él se los demostrara, pero no era el inocente de la historia y yo tampoco, sin embargo no merecía ser subestimada de la forma que todos los hacían.

Mis amigas pararon con el juicio cuando vieron que no podía controlar más las lágrimas, había hecho hasta los máximos esfuerzos para no tirarme en la cama y llorar por algo que no iba a pasar nunca, pero estar en la misma ciudad que él me debilitaba hasta la última fibra, porque yo más que nadie quería que no sólo estuviésemos bien, estuviésemos juntos.

Ellas quisieron empezar mi despedida el primer día de toda la semana que estipulaba estar en Puerto Madryn, y acepté porque pasé toda la tarde con Dylan para que su mamá se fuera a hacer sólo Dios sabe qué, el nene necesitaba ser cuidado por ella y yo mi momento de relajación, estar con los chicos en la fogata era lo mejor, más aún cuando sabía que ni Dante y mucho menos Lautaro asistirían.

—Vayamos a Cleopatra.

—No, vayamos a Popeye. —sugirió Tuti, pero todos los chicos lo abuchearon, estaban de acuerdo con Miguel. —Es más cerca.

— ¿De qué te dejas? No vas a manejar vos.

—Bueno dale, vamos que se hace tarde para entrar gratis.

—Ay Thiago qué rata. —lo acusó Dani y todos se rieron, pero esa era la especialidad de él, intentar pasar gratis en todas las discotecas.

Empezaron a levantarse y yo ayudé a apagar el fuego, dejaban que los hiciéramos en las baldes mientras tuviéramos precaución y lo apagáramos completo, pero ya no hacía tanto frío y de hecho entrar en la primavera hacía que el fuego fuera innecesario, aunque para no matar la tradición ellos lo encendían igual.

—Se va a enojar.

—No se puede enojar por algo que niega hace días.

—Lo conoces.

—A veces pareciera que no. —le dijo Miguel a Tuti con la tensión hasta en la voz, pero todos lo estaban y no lo comprendí hasta que por detrás de mí escuché su voz.

—Qué buenos amigos que son eh, gracias por avisarme que se iban a juntar.

—No queremos estar rogándote Lautaro, hace días que te decimos y no querés venir.

—Pero me lo tenían que decir igual, ¿soy parte o no de ustedes?

—No vamos a estar chupándote las medias, no te vengas a hacer ahora el que querías venir cuando ni siquiera sabías que ella iba a estar acá. —le dijo Thiago, yo preferí ni darme la vuelta porque su voz ya me hacía temblar hasta las rodillas.

— ¿Te tenemos que estar rogando hasta que cedas? Perdón Lauti pero somos tus amigos no tus perritos falderos.

—Y aun así lo fuera, no tenías por qué estar invitado hoy. —le dijo Miguel y siguió a las chicos, Dani me agarró del brazo para hacerme caminar pero no quise dejarlo solo, de repente todos sus amigos se empezaron a ir y le soltaron la mano, inclusive yo hasta los cinco pasos que me tardé en arrepentirme.

—Te veo allá.

—Cali... no se la compliques.

—Nos vemos allá. —le repetí y me solté de ella para caminar hacia Lautaro que ya estaba de espaldas acercándose a la orilla del agua. Aclaré mi garganta y controlé mis nervios, el estomago se me retorcía con ellos pero quería enfrentarlo, al menos por última vez. — ¿Por qué seguís insistiendo en perder todo?

—Porque me encanta, la verdad me hace re bien perder todo. —dijo sarcástico, apreté mis puños y purifiqué mis pulmones.

—De eso ya no me podés hacer responsable a mí.

—No te hice responsable.

— ¿Entonces por qué todo el mundo me hace sentir como si yo tuviese la culpa de que estés así cuando sólo sos un estúpido?

— ¿Vos te crees que es fácil? —preguntó prepotente mirándome con la bronca en los ojos. — ¿De verdad te pensaste que de un día para otro todo iba a cambiar?

—No, pero te cerraste a que fuera menos difícil, no quisiste saber nada conmigo y desde ahí cambiaste todo...

— ¡Toda mi vida fui una cosa Camila, no se puede cambiar de un día para otro lo que soy!

— ¡¿Y por eso tenías derecho a jugar conmigo como lo hiciste, porque estabas confundido?! ¡¿Qué te pensas que yo tampoco lo estoy?! —le grité enojada, sabiendo que nadie nos podía escuchar porque la playa estaba vacía. — ¡Te comportaste como un estúpido y ni siquiera supiste cuidar nuestra amistad, te escondiste detrás de toda esa mierda que crees que sos jugando con mis sentimientos como quisiste y sólo porque estabas confundido!

—Yo no me la creo, lo soy.

— ¡No sos gay estúpido, no sos gay, si fueras gay desde un principio no te hubieses peleado con Sebastián y mucho menos te hubieses acostado conmigo!

— ¡¿Y te parece que todo eso es fácil es para mí?! ¡Vos cagaste todo, desde que te metiste con Dante la cagaste, yo no te hubiese conocido si no te metías en el medio y la cagabas! —me gritó y se perdió en mi visión ya que las lágrimas me cegaron, pero pude escuchar su voz tomada a punto de estallar. —Lo arruinaste, toda mi vida estaba planeada para ser perfecta, para que esto nunca me pasara y ahora es el puro infierno y es tu culpa.

— ¿Si no querías llegar a pasar esto porque no lo paraste antes que llegara?

— ¡Porque me enamoré de vos estúpida! —sollozó y me debilité peor de lo que podría haber esperado si escuchaba eso. — ¡Todo el tiempo fue más fuerte que yo, no sabía lo que me pasaba pero de lo único que estaba seguro era que no quería perderte y lo hiciste imposible, te enamoraste de ese tipo y te fuiste detrás de él obligándome a que te negara para que esto no pasara y sin embargo acá estás imposibilitándome la existencia!

—Estás diciendo cualquier cosa...

— ¡Te fuiste a Buenos aires detrás de él Camila, ¿te pensas que no sé que estás con él?!

—Vos no sabés hacerte cargo de lo que te pasa y me querés hacer responsable a mí, yo nunca me enamoré de él y mucho menos me fui por detrás, lo mío fue minucioso al lado de lo tuyo, todos los días era uno diferente y te ocultabas detrás de eso sabiendo que me estabas haciendo mierda con cada nombre, cada encuentro, cada puta palabra que decías de ellos ¿qué esperabas que hiciera, que me quedara sentada llorando por alguien que nunca me iba a poder mirar porque estaba con otros?

—Nada de eso fue verdad...

— ¡Y encima te da la cara para decirlo! —lloré con más fuerza de la indignación. — ¡Te seguís ocultando de vos mismo Lautaro, nunca vas a cambiar porque nunca te haces cargo de nada, ni siquiera de lo que el otro pueda sentir por tu culpa!

Su silencio me hizo peor, y aunque me tapé la cara para llorar podía escuchar también su congoja, y no tenía por qué ser responsable de eso. Lo miré y tenía las manos detrás de la nuca mientras intentaba mirar hacia otro lado.

—Te di la oportunidad para que lo superaras conmigo...

—No me diste nada Camila, te fuiste a la mierda confirmándome que no me conocías nada, que todo el tiempo juntos fue en vano porque nunca me conociste.

— ¿Y cómo te iba a conocer si nunca te mostraste como eras? Estabas oculto detrás de esa fachada que te ponías, y decidiste que dejáramos de ser amigos cuando lo único que yo quería era estar con vos sin importar lo que habías hecho antes, evidentemente vos tampoco me conocías nada.

—Intentaba no llegar a esto.

— ¿Y te fue bien? —le pregunté y negó cerrando los ojos y apretando fuerte los labios para no llorar. —No, y es culpa de los dos, tampoco fue mi culpa creer que podía enamorarte, y aun sabiendo que sí pude no dejo de creer que no vas a cambiar, porque no te haces cargo de nada y no voy a ser tu conejillo de indias hasta que te aclares o te decidas a saber mínimamente lo que querés ser.

—Está bien, entonces hagámoslo así, vivamos una vida de mierda, no me importa ya se está volviendo normal.

—Pero que quede claro que vos lo quisiste así, porque yo por lo menos me hago cargo que no lo quiero así y a vos te da igual con tal de no estar confundido y perderme definitivamente por no arriesgarte. Y si vas a vivir una vida de mierda, no va a ser por no estar conmigo, va a ser por no querer saber quién sos.

—Cuando desaparezcas de mi vida voy a volver a saber quién soy.

—No te preocupes, no me vas a volver a ver, me voy a vivir a Buenos aires y nunca más voy a ser un problema para vos, porque parece que es todo lo que soy. —le dije y sus ojos se suavizaron, pero los míos se mantuvieron firmes hasta que me di la vuelta y con la mirada en alto pero el corazón por el piso, caminé arrastrando hasta mi alma.

Continue Reading

You'll Also Like

24.2K 4.5K 5
Jungkook es un gran empresario multimillonario, un hombre serio, amargado y solitario, hasta que un día enmedio de negocios decide aceptar una propue...
40.6K 2.4K 17
Arodmy Darotski, no se enamora él se obsesiona. Su pensamiento siempre fue no perder el tiempo con crías menores que él, seres inexpertos como suele...
109K 5.7K 108
¿Recuerdan a nuestra queridísima Laura Jones?. La joven de 24 años que fue llevada a Italia a bases de mentiras por su tío Sebastián. Fue secuestrada...
474K 33.8K 54
Historia de Emily Harrison y Noah Jefferson Secuela DLTAA #NOEMI Portada hecha por @Katypinklove PROHIBIDA SU ADPATACION Y/O COPIA Todos los derechos...