Pasaron meses desde que Lugonis le había contado a Alison sobre su origen como la reencarnación de Persefone, y desde ese entonces Alison había aprendido a controlar sus poderes gracias al patriarca.
Alison era feliz, pero toda esa felicidad se fue aquel día.
Lugonis y Albafica se encontraban en el entrenamiento de el ritual lazos de sangre y al terminar Albafica noto como su maestro se ponía pálido.
Albafica - maestro le sucede algo.
Lugonis - no es nada, solo que ya terminamos con todo tu entrenamiento.
Lugonis regresó al templo y antes de entrar le dijo a Albafica que iría a descansar.
Albafica fue hacia el campo de rosales y se encontró a Alison haciendo una corona de rosas blancas y rojas.
Albafica - hola Alison, que estas haciendo.
Alison - hola hermano, estoy haciendo una corona.
Albafica - ya veo.
Alison - y mi papá.
Albafica - esta en casa, dijo que iría a descansar.
Alison - iré a buscarlo le quiero enseñar mi corona.
Alison se dirigió al templo y cuando entró vio a Lugonis tirado en el piso con una hilera de sangre en los labios.
Alison - papá, que tienes.
Dijo moviendolo para que despertara pero el nunca lo hizo.
Alison abrazo el cuerpo de Lugonis llorando porque se había dado cuenta de que su padre había muerto.
Alison - no me dejes papá.
Después de ese momento todo el santuario se entero de que Lugonis de Piscis había muerto ese día.
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