Tú, mi enemigo, mi amor, mi v...

By laura_ruiz_reina

98.9K 5.1K 3.2K

Nicole, nuestra protagonista, despierta en una aldea llena de hombres, solo hombres... Es la única mujer de l... More

Capítulo 1: Nueva Vida
Capítulo 3: Beso
Capítulo 4: Decepciones
Capítulo 5: Mentiras
Capítulo 6: El laberinto.
Capítulo 7: Recuerdos.
Capítulo 8: Mi mejor amigo.
Capítulo 9: Cambios.
Capítulo 10: Hola de nuevo.
Capítulo 11: Has vuelto.
Capítulo 12: Secuestrada.
Capítulo 13: Enamorada de ti.
Capítulo 14: Memoria.
Capítulo 15: Cueste lo que cueste.
Capítulo 16: Cuanto tiempo sin vernos.
Capítulo 17: Te odio.
Capítulo 18: Eres mía, asúmelo de una vez.
Capítulo 19: Primera cita.
Capítulo 20: ¿Aceptas?
Capítulo 21: La boda.
Capítulo 22: Eres mi héroe.
Capítulo 23: Salvados.

Capítulo 2: Nuevas amistades

8.1K 384 532
By laura_ruiz_reina

—¡Como que mi nuevo hogar! —exclamo sorprendida con cara de espanto — ¿De qué está hablando Will?­­

—Lo siento mucho, pero... —Will me mira lamentándose—. Tiene razón, es tu nuevo hogar a partir de ahora, este sitio que ves aquí es lo único que tenemos, la única vida que tenemos es esta, esta pequeña aldea construida

por nosotros y este pequeño bosque, nada más.

—No entiendo nada, quienes sois vosotros y porque estoy en este sitio. —digo muy alterada—. Ah ya se, estoy soñando, seguro—. Comienzo a reírme—. Cuando me despierte estaré en mi casa con mi familia.

—¿Te acuerdas de tu familia? —pregunta Noah levantando sus sexys cejas.

Espera, ¿sexys? Para nada...

—No... no recuerdo nada, solo recuerdo mi nombre nada más. —Comienzo a llorar de desesperación—. ¿Por-por qué no recuerdo nada? —pregunto atónita sin entender nada.

—Tranquilízate nueva, es cuestión de acostumbrarte, todos lo hicimos —comenta un chico de cabello pelirrojo.

—No es lo mismo, sois todos chicos, no hay ninguna chica en este asqueroso lugar —digo a punto de llorar por la desesperación.

—No, tú eres la primera —exclama Noah mirándome descaradamente.

No sabía qué hacer y salí de ahí andando lo más rápido que pude.

— ¿Adónde vas intrusa? Vuelve aquí —dice Noah, alzando bastante la voz.

—Déjala, necesitará estar sola, Noah —exclama Will; pero hizo oídos sordos y me siguió.

Llegué a una especie de bosque con mucha vegetación, me senté en un árbol para ver si conseguía recordar algo, cuando sentí que alguien se sentó a mi lado.

Dios, otra vez el idiota este.

—¿Qué haces aquí? Déjame en paz —digo intentando contener las lágrimas.

—Hey, no llores más intrusa, tranquilízate, a ver, ¿qué es lo que te pasa? —dice y yo le fulmino con la mirada.

—¡Pero eres idiota o que te pasa, y no me llames así, me llamo Nicole! —Grito con tono amenazante—. ¿Qué me va a pasar? Nada, solamente que estoy en una asquerosa aldea rodeada de chicos sin neuronas en su cerebro y lo peor de todo, ¡no recuerdo nada de mi vida! Te parece poco motivo para no estar tranquila. —Estoy demasiado alterada y no puedo evitar hablar sin chillar.

—Vale —dice él levantándose del tronco—. Yo que venía con mis mejores intenciones de enseñarte este lugar y mira cómo me lo pagas.

—¿Te he pedido acaso que me lo enseñes? No verdad, pues ya te puedes ir.

Me miró por última vez y se fue de ahí dejándome sola.

Qué asco de chico, que asco de todo, me quiero ir de aquí ya, no soporto este sitio lleno de bichos, parece que estén en la edad media por cómo van vestidos y además se ríen de mí, tiene que haber alguna manera de salir de aquí.

—Hola niña nueva. —Apareció entre los árboles un niño gordito más pequeño que yo; tiene el pelo rizado y cara de simpático—. Me llamo Liam y quiero que sepas que no comparto la opinión de mis compañeros al decir que deberían de haber traído a una chica más guapa, porque tú ya lo eres. —Sonreí hacia su comentario.

—Gracias, Liam, parece que eres el único chico agradable aparte de Will en esta aldea.

—A mí es que me encanta acercarme a los niños nuevos, y más si es niña nueva. —Sonreí ante su comentario—. Oye, he visto que Noah también te hablaba bien, él también es simpático sabes, pero un poco más serio ya que es el que manda aquí, tiene que hacer su trabajo, todos lo hacemos.

—¿Trabajo? —pregunto extrañada—. ¿Aquí trabajáis, Liam?

—Pues claro —exclama él—. Mira yo soy el encargado de hacer figuritas de madera, sillas de madera, mesas y cosas por el estilo, también están los jardineros, los médicos, los constructores, los cocineros... Ven conmigo que te los voy a enseñar. —Me coge de la mano para que me levante, no me queda de otra que hacerlo.

Me enseñó toda la aldea, la verdad es que está todo muy bien organizado, hay una cabaña para los enfermos donde se encuentran "los médicos", otra para hacer la comida con calderos y fuego, otras cabañas para dormir, gente construyendo cosas nuevas, otras personas cultivando frutas y verduras en los jardines. La verdad es que está todo muy bien organizado en este sitio y no les falta de nada.

—Y por último esas personas que ves ahí son los que se encargan de entrar en el bosque clandestino para encontrar alguna salida y salir de aquí, pero llevan tres años buscando y aun no la han encontrado —dice Liam algo triste y desanimado.

—¿Hay una salida en ese bosque? —exclamo sorprendida y curiosa.

—Eso dicen, pero la verdad que yo no me lo creo mucho, una cosa muy importante, no entres nunca en el bosque clandestino, solo pueden entrar las personas que diga Noah, nos lo tienen prohibido, además, si entras te encontraras con los monstruos oscuros y de ahí no saldrías viva, hazme caso, muchos otros lo han intentado y no han regresado jamás del bosque. —pongo cara de terror.

—¿Qué son los monstruos oscuros esos, Liam? —comento curiosa.

—Nunca nadie ha visto uno y ha vivido para contarlo, pero dicen que son unos monstruos que te matan, parecido a los ciempiés gigantes, pero aún más terroríficos.

—Yo no me creo eso —digo muy segura, pero antes de que me pudiera contestar apareció mi amigo del alma.

Que se note lo bien que me cae el estúpido ese.

—¿Qué pasa, Liam?, haciendo de guía con la intrusa. —comenta Noah mirándome sonriente.

Sabe que odio que me llame así y lo sigue diciendo.

—A que te va gustando más este sitio, intrusa. —Él pone su brazo en mi hombro como si fuéramos amigos de toda la vida.

—Sí, me encanta —digo irónicamente—. Sobre todo, con personas como tú a mi alrededor. —Le quito su brazo de mi hombro con mala gana.

—Oye, dime una cosa, que he hecho yo para que te caiga tan mal.

—Tú sabrás —digo malhumorada.

Dicho eso salí de ahí con la cabeza bien alta.

—Que carácter tienen las mujeres Liam.

—Ya te digo, las chicas son brutales.

Yo no creo que existan unos monstruos en el bosque como dice Liam, seguro que lo dice para asustarme ya que una persona en un bosque gigantesco si no lo conoce se pierde, por eso tienen prohibido entrar en él, porque son unos cobardes, y si se pierden se quedarían solos hasta encontrar la salida o poder volver a la aldea, pero sinceramente a mí me da igual estar sola o no, total aquí ya lo estoy, prefiero arriesgarme a perderme en el bosque para encontrar una salida antes que quedarme aquí toda la vida o hasta que esos chicos la encuentren.

Me dirigí hacia el bosque clandestino y me adentré en él.

—¡Se puede saber que estás haciendo, no entres ahí Nicole! —dice un chico rubio musculoso gritando desde la cabaña de fabricar armas de madera.

Pude ver cómo Noah se acercaba a mi corriendo.

—¡Pero tú estás loca o que te pasa, ni se te ocurra volver a poner un pie en este sitio, te quieres suicidar o que! —dice Noah cogiéndome del brazo muy fuerte y apartándome del bosque.

—¡Déjame en paz, quiero salir de aquí, no me quiero quedar aquí, quiero encontrar la salida y volver a casa! —le digo intentando quitarme de su agarre, pero es en vano, ya que él es mucho más fuerte que yo y me tiene bien cogida por la cintura y del brazo para que no me escape.

—¡¿Acaso sabes si tienes familia o no, además entrar ahí es un suicidio, está prohibido, como lo hagas te mataran?!

—¿Quién? Ah, sí, los monstruos imaginarios esos, me da igual lo que me digáis, yo me escaparé de aquí y lograré encontrar la salida y ninguno me lo impediréis.

De repente se empezaron a escuchar unos ruidos horribles que provenían del bosque, he de confesar que da verdadero miedo ese sonido.

—¿Ves? —Miro a Noah—. A eso me refería, a los monstruos oscuros, esos bichos te matan si te ven y por lo que sé tú no eres muy buena corredora como para escapar de ellos. —Yo agacho la cabeza ya que él ahí tiene razón, no soy buena corredora, es más, parezco un pato corriendo, o una tortuga, mejor dicho.

Me quedo callada y todos los chicos se van yendo de ahí. Me he vuelto a quedar sola como al principio.

Ya se hizo de noche y yo seguía sentada observando a todos los chicos desde un banco hecho por Liam, la verdad es que para lo pequeño que es de edad es muy apañado y mañoso con la madera, hace unas cosas preciosas con ella.

—Primer día difícil ¿verdad, Nicole? —comenta Will, acercándose hacia mí, yo asiento desanimada—. Tranquila, ya te acostumbrarás, ¿tienes hambre?

—Un poco —respondo algo avergonzada.

La verdad es que estoy hambrienta. Will hizo un gesto con la mano y apareció Noah con un plato de comida y un vaso de agua.

—Como sé que conmigo no quieres hablar he mandado a Will para preguntarte si tenías hambre, gracias Will. —Will hizo un gesto con la mano y ambos sonrieron—. Ten, no es gran cosa, pero al menos no te morirás de hambre.

—Gracias —digo sonando amigable.

—Vaya, puedes ser agradable cuando quieres intrusa.

Estos comentarios de Noah son los que hace que le odie a muerte —pienso—. se los podría ahorrar, y no entiendo porque me tiene que llamar intrusa, sabe que no me gusta y lo sigue haciendo.

Hago una mueca y acepto la comida, pero antes de darme el vaso que llevaba en la mano Noah el vaso cayó sobre mi blusa blanca haciendo que se transparentase todo.

—¡Dios mío está helada el agua! ¡Lo has hecho a adrede seguro! —exclamo asesinándolo con la mirada.

—Pero que dices loca, se me ha resbalado de la mano, no lo hecho a adrede —dice Noah riéndose a carcajadas.

Dios, lo odio a muerte.

—¡Y por qué te estás riendo! —ya estoy muy cabreada.

—Porque estás empapada, y ha sido muy gracioso. —Noah se quedó mirando mi blusa mojada con cara de pervertido.

¡Será guarro, está mirando mi escote!

Cruzo mis brazos para tapar todo lo visible y él desvía la mirada aun riéndose por lo bajo.

—Entra en mi cabaña si quieres y cámbiate de ropa —dice Will amablemente.

—No tengo nada más aquí de ropa, solo tengo esto —le miro algo preocupada.

—Es verdad —exclama él—. A ti no te han mandado ropa nueva en el coche robot, pero así te resfriarás.

—Ven conmigo y te dejo una camiseta mía, te quedará como un vestido, ya que es bastante grande y larga —dice Noah mirándome preocupado.

—Gracias, pero no hace falta, Will ¿tú no tienes ninguna para dejarme? —noto como Noah abre la boca sorprendido.

—Las tengo todas lavando, lo siento, tendrás que aceptar la de Noah.

—Eres una desagradecida. —Will y yo miramos a Noah—. ¿Sabes lo que pareces? Una bruja, eso es lo que eres, tenían razón los chicos, ya podrían haber traído a una chica más guapa y más simpática, que mal gusto han tenido al traerte a ti esta vez.

Me ha dejado pálida, no sé qué responder, me he pasado un poco, pero también tiene que entenderme, estoy nerviosa y angustiada por estar aquí, normal que este así de antipática, además, él tampoco ha hecho muchas cosas como para que me caiga bien.

Me levanto decidida y me siento junto a Liam, él está cenando con las personas que se meten en el bosque clandestino en busca de una salida.

Cenando con ellos he conocido a un chico muy simpático llamado Ming, me ha contado todos los peligros del bosque clandestino, ahora si me creo todo lo que me han contado de esos monstruos y lo terroríficos que son.

—Chicos, una pregunta, ¿yo dónde voy a dormir? —Todos se miraron y se quedaron callados—. ¿Chicos? —Volví a preguntar.

—Eso lo decide Noah, Nicole, pregúntaselo a él, mira por ahí viene —dice Liam señalando a Noah con el dedo.

—Que pasa chicos, hablando con la intrusa —dicho eso, pone sus manos en mis hombros, yo me tenso.

—Noah, ¿dónde va a dormir Nicole? Todas las cabañas están ocupadas y aún falta una semana para que se fabrique la nueva que están preparando los constructores —comenta Ming.

—¿Pero aquí como dormís? —pregunto curiosa, mirando a Liam.

—En cada cabaña somos cuatro, hay dos hamacas y dos camas, nos vamos turnando para ver quien duerme en cuales, pero están todas ocupadas.

—Entonces, ¿dónde voy a dormir yo? En el suelo.

—No, —miro a Noah—. Dormirás conmigo. —Le miro inmediatamente.

—¿Qué? Tú estás loco, yo contigo no duermo ni loca —digo bastante alterada.

—Pues te va a tocar dormir aquí y esta noche viene tormenta.

—Claro, tú eres ahora adivino verdad. —Observo a Noah algo enfadada y con los brazos en la cintura.

Empieza a caer del cielo gotas de agua, me quedo sin palabras.

—¡Chicos vamos cada uno a su cabaña! —dice Noah sonriendo triunfante. —Tu intrusa, te vienes conmigo.

—Está bien... —digo suspirando—. Pero yo me quedo con la cama.

—Como quieras. —Él acelera su paso.

Entro a la cabaña de Noah, se nota que es la cabaña del jefe, es más amplia y más bonita que las demás.

Pero... espera un momento, ¡solo hay una cama!

—So-solo hay una cama —digo tartamudeando.

—Ya lo sé. —Él me mira sonriendo.

—Pues ya te vas cogiendo una hamaca porque yo no pienso dormir contigo en la misma cama.

—Pues lo siento mucho pero no quedan más hamacas ni más camas, así que te va a tocar compartirla conmigo, intrusa, has venido en mal momento, el ultimo nuevo tenía ya reservada la última plaza para la última cabaña, y la otra cabaña estará preparada para dentro de una semana o así, no te va a quedar otra que dormir conmigo, quieras o no.

—Podrías ir a dormir con los chicos y dejarme sola aquí —le digo muy segura.

—Ja, ni lo sueñes corazón, esta cabaña es mía, para eso me la he ganado, si te gusta bien y si no ya sabes, te toca dormir fuera al viento, tú decides. —Comienza a quitarse la camiseta, yo me doy la vuelta avergonzada.

Esto es horrible, estoy aquí encerrada y encima tengo que dormir con el imbécil este en su cabaña, ¡en la misma cama! No sé cuánto tiempo podré soportar estar en este sitio...

Continue Reading

You'll Also Like

82K 6.9K 63
Los cantantes son tan reconocidos que sus fans harian lo que fuera con tal de conocerlos incluyendo faltar al trabajo para ir a verlos. Karime Pindte...
597K 42K 76
Lara pensaba que Toni era el amor de su vida, pero dejó de serlo hace mucho, después del primer golpe que recibió por su parte cuando estaba embaraza...
2K 305 10
Amante de las motos, la vida alocada y el misterio. Amante de la poesía, hetero y sin duda buena hija.
141K 8.4K 84
andyblack ha comenzado a seguirte. andyblack le gusta tu foto. ❤️ andyblack ha comentado tu foto: hermosa ❤️ paytonquinn: @andyblack gracias.