- Tu... tu...
Decía la pobre Erin temblando levemente mirándome con miedo, o eso me parecía.
— Lo siento, tal vez perdí mi trabajo y te deje una mala impresión...
Me acercaba hacia mi saco de vestir, me lo ponía y acomodaba mis lentes, hacía una reverencia y caminaba hacia la salida pasando frente a la chica, la cuál estaba levemente sollozando.
— Pero no podía dejar que te humillen de esa forma, vales más que eso.
Antes de entrar en el elevador, sentí que me tomaron la mano, me di la vuelta y la mire, no decía ni una sola palabra, pero sus ojos me gritaban que me quedara.
— Esa rata se quejará con el señor Reginald, aún que me quede contigo ahora, estoy fuera...
Ella me abrazo apegando su rostro hacia mi pecho y cerró sus ojos... yo solo pasé mi mano derecha hacia su cabeza mientras que con la izquierda correspondía su abrazo.
- No tengo valor ni autoestima para aguantar eso... por favor quédate ... quédate conmigo.
— ... Da igual, aún así ya lo hice... supongo que me quedo... hasta que me saquen.
Erin dejo de abrazarme, después se giró hacia el balcón, y caminó hacia el, yo la seguí de cerca.
Se sentó en una silla y me invitó a hacer lo mismo, yo accedí y aprecie la luna mirando hacia el horizonte, se podía ver todo San Diego viviendo la noche más brillante de todas.
- Gracias por hacerlo...
— Ni lo digas, no estoy del todo orgulloso.
- ¿Por qué no?, me ayudaste mucho... ahora no creo que se acerque a mi.
— ¿Cómo acabaste con ese tipo?... siendo quien eres...
Ella se quitó el antifaz y lo dejo en la mesita de enfrente, se giró hacia mi y me vio a los ojos.
- El corazón no sabe de quién se enamora...
— Sí, ahí está tu rostro, Billie Eilish...
- Él... era muy dulce al inicio, era como el sueño de toda mujer, sabes?~... realmente fue lindo al inicio...
— Pero?...
- Pero todo cambio, lo descubrí saliendo con una ex amiga.
— Escalante?
- No, Escalante es solo la gota que derramó el vaso.
— Supongo que te entiendo ...
- Después de que lo descubrí, me dijo que no volvería a pasar, que lo perdonará, que cambiaría y todo eso... ¿que crees que hizo?~
— Supongo que...-
- Se acostó con una amiga de su hermana... y después de eso, se acostó con una chica de un club, con una azafata, con una bailarina y claro, con una de sus amigas.
Dijo con algo de enojo mientras se sonreía un poco, era una sonrisa de coraje, se limpiaba también una lágrima que caía hacia su mejilla.
No supe que hacer para consolarla, así que solo le pase un pañuelo por el rostro limpiando así otra de sus lágrimas.
Ella volteo a verme, ahora esos ojos expresaban un sentimiento reconfortante.
— Si de algo te sirve, pasé por algo similar con mi antigua pareja... así que comparto tu sentimiento.
- Te engaño?
— Me vio la cara de idiota... Hizo masomenos lo mismo solo que yo jamás me enteré, me di cuenta por una llamada que le llegó cuando estaba conmigo, ella fue corriendo al baño, escuché por debajo de la puerta y ahí me di cuenta de que un tipo le hablaba igual que tú noviecito a ti, solo que ella lo disfrutaba...
- Lo siento... debió ser difícil para ti.
— No importa, no valía la pena, me tarde en darme cuenta.
- Y para ti como sería una chica que vale la pena?
— Que sepa cocinar.
Mire el rostro de Eilish, hizo una mueca de desagrado, a lo cual solté una risa.
— Es broma, es broma, en casa yo soy quien cocina.
Ella me dió un golpecito con la mano.
— Una chica que vale la pena, es quien no te guarda secretos, alguien que te apoya en todas tus desiciones, es una chica que no te da la espalda, que te levanta cuando te caes, alguien con quién nunca tienes dudas porque sabes que te ama.
Tome una la jarra de agua que había en la mesa y serví dos vasos, uno para mí y otro para ella, bebi un poco y después voltee a ver a la rubia.
— ¿Que hay de ti?, algún chico ideal
- No existen los chicos ideales, solamente parejas buenas y parejas malas...
— Es una forma de verlo, sí...
- Pero si tuviera que decir algo, diría que mi "chico ideal" haría cosas como la que hiciste hace unos minutos.
Me sonroje un poco, pero siquiera pensar en mi estando con esa chica era una completa locura, ni en el más alocado de mis sueños podría pasar algo así... era ilógico pensarlo, hasta yo sé mis límites.
— Si, bueno... no podía permitirme que dijera todas esas cosas, nadie se merece eso, mucho menos un ángel como tú.
- Te parezco un ángel?~
— No creo ser al único, mírate, cabellos dorados, sonrisa cautivadora, ojos azules como el cielo... cualquiera diría que eres perfecta.
- Cualquiera o... tu?~
Me puse aún más nervioso... intente tomar nuevamente mi vaso con agua pero este se cayó al suelo.
— Que torpe soy, lo siento, tengo que limpiarlo, cuidado con los vidrios señorita Eilish.
Me levanté y me apresure a limpiar todos los restos así como el agua.
Una vez termine, tomé asiento nuevamente junto a la chica.
- Muy resbaladizos eh?~
— Un poco, sí..
- Por eso yo prefiero las copas... ¿por qué no me sirves un par de ellas, el vino está en la vitrina de por ahí~
Yo no sabía si debía servirle algo así, pero eran sus órdenes, realmente me ponía nervioso que fuera a tomar de más ya que había tomado un par de tragos con sus amigas, o eso parecía por el desorden que tenían en la mesa donde estaban.
— Sí, señorita Eilish.
- Normalmente no bebo, pero, hoy es una ocasión especial, soy libre... soy feliz! Estoy en San Diego para estrenar un sencillo, soy de las top en Spotify, ¡¿por qué no voy a festejar?!
— Parecen buenas razones.
Dije a la par que ya volvía con el vino que ella me señaló, del cuál serví una copa para ella.
- Sirvete una también~
— Yo, no bebo señorita Eilish.
- Trabas de bartender y no bebés alcohol?
— Irónico pero así las bebidas de mantienen exclusivamente para clientes.
Ella soltó una risa y me dirijo una sonrisa.
- Vamos, solo por hoy, yo tampoco bebo~
¿Cómo podía decirle que no a ese rostro?...
Me serví también una copa a la par que me senté junto a ella.
Ambos levantamos nuestros tragos para brindar..
- Por mi ángel guardián.
Yo no tenía mucho por lo que celebrar, así que levanté mi copa y sonreí para ella.
— Por ti...
Tras beber ese trago, la noche no hacía más que comenzar...