-No estaba bromeando... -Dijo Camila en un susurro un tanto seductor mirando hacia sus labios y Lauren tragó saliva.
Camila sonrió y se acercó más a Lauren y puso una mano sobre su ombligo, provocando un suave jadeo por parte de la mayor mientras veía como su mano viajaba bajo su cintura.
Lauren miró la mano de Camila con nerviosismo. Estaba congelada en su lugar mientras sentía como la mano de la morena estaba cada ves más cerca de su centro. Camila resistió las ganas de parar y preguntarle a Lauren si eso estaba bien y si quería que continuara con lo que hacia. Miró a Lauren para ver un rubor obscuro cruzando su rostro y sus ojos fijos en su mano. Definitivamente la vio mordiéndose el labio. Sonrió y continuó con el asunto en cuestión.
Una vez que tuvo la mayor parte de su mano por debajo de su cintura, Camila pudo sentir los contornos de la hendidura suavemente afeitada de la ojiverde. Aún no estaba húmeda, pero definitivamente Camila no se sorprendió.
Primero corrió sus dedos lentamente de arriba a abajo, sintiendo en el momento como su piel se hacía más caliente y segundos después comenzó a hacer pequeños círculos con sus dedos por arriba de su clítoris, queriendo prepararla. La respiración de Lauren se hizo más elaborada que antes y se volvía tensa con cada movimiento que Camila hacía.
El corazón de Camila comenzó a latir muy rápido mientras pensaba ''¡No puede ser! ¡Estoy tocándola al fin! ¡Y a ella le gusta!'' pensó como una cálida sensación de éxito se apoderó de ella.
Camila, ahora más motivada, dejó de torturarla y con dos de sus dedos frotó rápidamente solo el clítoris de Lauren. Escuchó como reprimió un gemido y su cadera se levantó levemente. Hizo su mano más hacia abajo y sintió como Lauren ya estaba lubricada. Sin perder tiempo, Camila puso dos dedos a la entrada de la ojiverde y los empujó uno a la vez. Su mano se convirtió rápidamente en el mayor placer de la ojiverde mientras Camila empujó sus dedos un poco más profundo y los comenzó a sacar y a meter rozando sus paredes sensibles.
Lauren dejó escapar un murmullo nervioso y cerró los ojos con fuerza, mordiéndose su labio inferior más fuerte que antes. Con dos dedos profundamente dentro de Lauren, Camila sonrió; ahora tenía a Lauren Jauregui en la palma de su mano.
Camila se arrastró de rodillas y se posicionó a horcajadas de Lauren, sus narices casi se tocaban. Llevó su otra mano a la mejilla de la ojiverde y la acunó, adorando las perfectas características de la bella deportista. Lauren miró a Camila inocentemente, sin saber qué decir, pero no quería que se detuviera tampoco. Camila sonrió a lo adorable que su amiga se veía y se inclinó para besarla. La cara de la mayor estaba ardiendo de caliente por el rubor que cubría sus mejillas y la mayor parte de su rostro. Camila se fundió en la calidez y presionó sus labios en los de Lauren.
A Camila le preocupó que a Lauren no le hubiera gustado por un momento el beso, pero mientras se alejaba, Lauren la siguió, no queriendo terminar el beso. El corazón de Camila se derritió al ver las reacciones que le causaba a su amiga; esos mismos ojos verdes adorables le rogaron seguir adelante antes de cerrarse por el placer y dejar su cabeza caer de nuevo en la almohada.
Camila miró hacia abajo para ver el pijama de Lauren entreabierto por el ángulo de su mano, y su reluciente montículo debajo de ella. Sonrió y sacó su mano de sus pantalones desprevenidamente. Lauren dejó escapar un suspiro decepcionado y se retorció, anhelando seguir teniendo el contacto de Camila.
Camila llevó su dedo a los labios de Lauren y susurró.
-Shh... Sólo relájate.
No la dejó responder y se movió hacia abajo entre las piernas de Lauren, separándolas. Llevó de nuevo su rostro hacia la cara de Lauren y dejo un beso en su mejilla y después uno en su cuello, más duradero y húmedo. La ojiverde suspiró y arqueó su espalda en Camila. Podía ver las manos de Laure agarradas con fuerza de las sábanas. Todas esas películas porno un tanto románticas no eran tan inútiles después de todo.
Dos manos ansiosas flotaban encima de la camisa de Lauren, arrastrando la tela por encima de sus pechos. Cuando llegó hasta arriba, Camila no pudo ocultar una sonrisa tímida, puesto que la chica mayor no traía sujetador. Ella ansiosamente movió sus labios desde el cuello de Lauren hasta su pezón derecho. Lauren gimió cuando Camila abrió la boca y dejó que su lengua hiciera el primer contacto.
Lauren gimió de nuevo cuando Camila mordió suavemente su pezón y luego pasó su lengua repetidas veces. La morena levantó la vista para ver si le dolió, pero Lauren solo la miró con expectación, impaciente. La menor se movió más abajo, dejando besos por su abdominales ahora más tensos y continuó con besos húmedos hasta su ombligo y Lauren ahora jadeando.
Una vez que llegó a su cintura de nuevo, Camila plantó varios besos en el centro de Lauren sobre sus pantalones. Podía sentir el calor que irradiaba a través de la tela y oler su deliciosa humedad.
Camila deslizó sus dedos entre los pantalones de Lauren y sus bragas, arrastrándolos hacia abajo a los largo de sus muslos tonificados. Lauren levantó sus caderas para ayudarla; su rubor tornándose aún más obscuro cuando sintió que Camila le quitó su pijama, dejando su mitad inferior completamente expuesto.
Camila le sonrió con confianza y se inclinó hacia adelante. Puso sus brazos por debajo de los muslos de Lauren y las levantó un poco hasta que sus piernas descansaron en sus hombros. Ella plantó unos cuantos besos rápidos a lo largo de sus pliegues empapados antes de pasar al verdadero premio. El olor de Lauren abrumó sus sentidos, casi haciéndola débil de excitación. Cerró sus ojos para aspirar profundamente y soltó su aire lentamente. Escuchó a Lauren gemir y por fin sacó su lengua y la arrojó a su clítoris un par de veces, y luego sacó su lengua por completo y empezó a lamer a través de sus pliegues en su totalidad de abajo hasta arriba extensamente.
Lauren echó la cabeza hacia atrás y soltó un fuerte gemido, en donde Camila empezó a trabajar aún más. Podía sentir cada una de las contracciones de la ligera lengua por su centro, y Camila ahora sabía exactamente donde lamerle.
Camila cerró sus ojos y se concentró en hacerle sentir placer a Lauren, quien jadeaba muy fuerte y apretaba sus manos en las sábanas. Sus bragas estaban completamente empapadas y estaba empezando a ser incómodo, pero trató de ignorarlo, pero siguió con las ganas de quitárselas y preguntarle a Lauren so acaso le devolvía el favor eran casi abrumadoras.
Camila movió la mano derecha fuera del muslo de Lauren y la subió hasta encontrarse con uno de sus pechos y lo acarició y apretó y Lauren solo pudo gemir y apretar más sus manos. Sentía como el sudor aparecía en su frente y como la lengua de Camila hacia maravillas en ella. Jamás se había sentido tan bien.
Camila centró su lengua sobre el clítoris de Lauren y sondeó su entrada con dos dedos de nuevo y se deslizaron mucho más fáciles esta vez. Lauren casi no podía manejar el aluvión de placer ahora y ya no se preocupada por el volumen de sus gemidos. Presionó su cabeza en la almohada y sintió como se tensaba en intervalos irregulares. Cogió aire y sintió los placenteros tirones en su vientre bajo.
Camila podía sentir el calor que irradiaba la ojiverde con cada penetración de sus dedos. Sus gemidos se hicieron más tensos y Camila podía sentir que Lauren ya estaba muy cerca. Movió sus dedos más rápido y duro y llevó sus labios hacia el clítoris de la ojiverde y con una sola succión fue suficiente.
Con un grito agudo, Lauren arqueó la espalda y comenzó a correrse en la mano de Camila. Sus paredes interiores se apretaron alrededor de los dedos de la menor y rápidamente puso sus manos en la cabeza de Camila, asegurándole que no se apartara. Todo su cuerpo se tensó y convulsionó ligeramente por unos segundos mientras montaba las olas de su orgasmo.
Minutos después, se relajó por completo y sus manos y su cabeza cayeron a la cama con un suspiro satisfactorio. Camila se lamió los labios y sonrió ante la imagen que tenía adelante. Lauren estaba completamente desnuda excepto por la camiseta en excursión por encima de sus pechos, entre sus piernas estaba completamente mojado y su respiración todavía era rápida, haciendo que sus pechos subieran y bajaran con sus pezones aún erectos; algo que Camila nunca pensó que podría llegar a provocarle a su amiga.
La sensación incómoda de humedad regresó a Camila, y también lo hizo un poco de su inseguridad acerca de la situación.
-¿Crees que fui muy rápido? -preguntó Camila tímidamente, aún entre sus piernas. Al darse cuenta se alejó sonrojada y se sentó, tratando de evitar la mirada profunda de Lauren.
La ojiverde contuvo el aliento y trató de poner cara de confianza, pero su rubor lo impidió. Se sentó, se bajó la camiseta con vergüenza y se puso de rodillas delante de Camila, no queriendo hacer contacto visual directo.
-N-No, por supuesto que no, Es que...-Sus ojos se encontraron por un breve momento, luego ambas desviaron la mirada, sonrojándose. -...No esperaba eso de ti...
-Oh, ¿Entonces no te gustó? Perdón, yo no debí haber hecho- Fue el turno de Lauren ponerle un dedo en los labios a Camila.
-Fue increíble. -Dijo Lauren sonriendo.
Camila dejó escapar un suspiro de alivio. Lauren se acercó y puso sus manos sobre los hombros de Camila, luego la empujó hacia abajo en la cama, quedando sobre ella.
-Supongo que es mi turno de...ya sabes...
Camila no dijo nada. Ella alzó la vista hacia su amiga y se retorció como sus bragas se humedecieron más. ''¡Oh, por favor, sólo quítamelas!''
Lauren torpemente se inclinó y la besó. La ojiverde puso una mano bajo la camisa de Camila, luego bajándola por encima de su ombligo, acariciándola y haciendo que su piel se erizara y dejara escapar un gemido.
Lauren se movió lentamente hacia abajo, sin dejar de mirarla y sonreirle.
-¿Estás lista?
Camila sólo pudo asentir, esta imagen mental la había tenido en muchas noches de soledad, y ahora finalmente estaba ocurriendo. Se sentía como si pudiera correrse sólo con el toque de la ojiverde. Lauren sonrió y se inclinó a su piel expuesta y siguiendo el ejemplo de Camila, plantó un beso húmedo por encima de su ombligo. Sinceramente a Camila le fue decepcionante que Lauren no le hubiera puesto ninguna atención a sus pechos, pero había un impulso terrible entre sus piernas que lo necesitaba aún más.
Los labios calientes de Lauren descendieron hasta el ombligo de Camila dejando una mancha de humedad ya que si lengua le había acariciado su piel con cada beso. Camila cerró los ojos y se deleitó en la sensación. Su corazón se aceleró y su respiración se acortó a jadeos rápidos y superficiales así como Lauren iba avanzando cada vez más cerca de su objetivo final.
Finalmente, ella le dio un beso justo encima de su cintura y piso sus dedos entre sus pantalones y bragas y los deslizó fuera mucho más rápido que cuando Camila lo hizo con los suyos.
Lauren miró hacia abajo entre las piernas de Camila, luego levantó la mirada hacia sus ojos, sorprendida por los fluidos que brillaban en sus pliegues y sus muslos internos.
-Por Dios, Camila...Esto es intenso.
Camila se sonrojó y le dio una sonrisa tímida. Lauren se encogió de hombros y se inclinó para ponerse a trabajar. Camila se mordió los nudillos de su mano derecha, mirando hacia abajo a Lauren con ansiedad. Cada centímetro que bajaba la ojiverde, para Camila parecían años. Prácticamente estaba jadeando de la anticipación.
Lauren finalmente tocó con su lengua la entrada de Camila y subió con la punta de su lengua hasta el principio de su centro, lo que la hizo jadear fuertemente y se tensó. Lauren miró a la chica para asegurarse de que estaba bien, pero el retraso hizo que Camila quedara insatisfecha.
-Camz, ¿Estás bi--
Camila se apoyó con un brazo y puso una mano detrás de la cabeza de Lauren, lo que la obligó a bajar.
-No te detengas.
Lauren la miró sorprendida, pero rápidamente siguió su trabajo tal y como se lo había pedido la chica. Sacó su lengua por completo y volvió a repetir el movimiento varias veces, moviendo su cabeza de arriba hacia abajo como si lamiera lo más delicioso del mundo, y así le pareció.
Lamió toda su humedad y ahora lo único que brillaba era su saliva. Subió de nuevo y succionó su clítoris justo como ella lo había hecho. Camila gimió lujuriosamente y vio como su cejas se fruncieron de placer y casi sonrió. Empezaba amar esto demasiado.
Se alejó unos centímetros y colocó dos de sus dedos y los hundió suavemente, sin intención de lastimar a la morena. Los metió hasta el fondo y los movió a un ritmo por el cual las piernas de Camila temblaron.
Camila podía sentir cada contracción por los dedos de Lauren dentro de ella y el sutil movimiento de su lengua mientras se movía a travésde sus pliegues. Sabía que no iba a durar mucho. Camila se mordió el labio. "Esto al fin esta sucediendo" pensaba.
Todo sobre ese momento era perfecto para ella. Acarició el cabello obscuro de la ojiverde con amor mientras su cabeza de movía entre sus piernas. Lauren le parecía incluso mucho más hermosa con los ojos cerrados, completamente centrada en ella.
El olor de su almizcle llenó la habitación, así co o un toque de el de Lauren anteriormente.
Camila apenas podía concentraese en todo eso, entre los gemidos que salen de ella y la lengua ágil de Lauren lamiendo su centro y sus dedoa dentro de ella, la tenían por el delirio.
Camila ya podía sentir la tensión dentro de ella. Ella quería que este momento durara para siempre, pero su cuerpo tenía otros planes. Cada roce de la lengua de Lauren la trajo cada vez más cerca del borde.
Dejó caer la cabeza hacia atrás y se estremeció cuando el placer se convirtió casi demasiado para ella. Finalmente su cuerpo cedió. Agarró el cabello de Lauren y se aseguró de que no fuer a ninguna parte mientras empujaba sus caderas en su boca. Lauren sacó sus dedos dentro de ella y empezó a penetraela con su lengua.
Camila gimió tan fuerte que estaba segura de que los vecinos la oyeron. La cálida sensación de hormigeo se propagó de entre sus piernas hacia todo su cuerpo rápidamente, dejándola en un mundo de pura felicidad. Su cuerpo se arqueó y puso la otra mano en la parte posterior de la cabeza de Lauren, tratando de absorber cada segundo.
Una vez que terminó su orgasmo, Camila se dejó caer en la cama. Lauren se sentó y la miró sorprendida. El cabello largo y suelto de Lauren estaba enmarañado en su rostro y la mayoría de la zona debajo de su nariz estaba completamente empapada.
Camila no se dio cuenta, ella estaba tomando el sol en su resplandor con una sonrisa perezosa contenida en su cara, pero Lauren no había terminado.
-Maldita sea Camz, no sabía que tenías esto tan dentro de ti.
Camila sólo dejó escapar un arrullo suave en respuesta y se hundió más en la cama. No podía moverse, el orgasmo había tomado casi toda su energía.
Lauren arrugó la cara. No quería que eata noche termiara todavía. La chica de ojos verdes sinceramente se la estaba pasando muy bien. Lauren agarró a Camila por los hombros y la sacudió en su posición vertical.
Camila volvió a la realidad, justo a tiempo cuando Lauren le dio un tiró a su camisa.
-No te vayas a quedar dormida todavía, eh -Lauren sacó a Camila de sus pensamientos poniéndole una mano en su nuca y otra en su mejilla -No he terminado contigo.
Lauren la besó, asegurándose de dejar que sus lenguas bailaran juntas. Camila se congeló cuando sintió la lengua de Lauren explorar su boca, pero rápidamente se fundió en el hermoso beso y se abrazo a ella, quien le devolvió el gesto.
La lengua de Lauren era más contundente que la de ella, pero lo disfrutó de todas maneras. La ojiverde se subió encima de ella y sentía sus cuerpos presionados uno contra el otro firmemente; sintió que se mojaba de nuevo al sentir ese tipo de contacto con la chica.
Lauren se separó, pero aún estaba muy cerca de Camila. Ella sin palabras deslizó una pierna debajo de Camila, situándose a sí misma entre ellas. Camila abrió la boca para preguntar lo que estaba haciendo, pero Lauren empujó su ingle contra ella, interrumpiéndola con un gemido.
El corazón de Camila empezó a correr de nuevo. Su respiración se interrumpió con gemidos tensos, podía sentir su emoción mezclada con mucha pasión y haciendo el momento cada vez mejor. Los pliegues de Lauren acariciaban los de ella con una cantidad de fuerza perfecta, amenazando con enviar a Camila al borde de nuevo.
-¿Te gusta eso? -preguntó Lauren, un rubor obscuro se extendía por su propio rostro.
Camila no pudo contestar. Esta vez Lauren la tenía completamente hipnotizada con el placer que le brindaba.
Lauren empujó sus caderas hacia adelante y las mantuvo ahí. Ella apretó sus caderas en Cama, haciéndola retorcerse y gemir con creciente placer. Camila dejó caer su cabeza havia atrás de nuevo, ya no pudiendo sostenerse a sí misma. Lauren sonrió y empujó con más fuerza a Camila, dejando escapar un gemido ocacional.
Camila ya no podía más del asalto que le hizo Lauren, tan pronto como la chica de ojos verdes puso una mano sobre su ombligo para equilibrarse a sí misma, Camila llegó una vez más. Ella se sacudió contra las sábanas, arqueando su espalda debajo de Lauren y agarrando las sábanas tan duro como sus manos podían. El grito de éxtasis que soltó fue música oara los oídos de Lauren.
Lauren cayó hacia adelante sobre Camila, dejando que sus cuerpos se presionaran entre sí. Le dio a su amiga un soñoliento y rápido beso y luego miró a los ojos marrones de la chica. Camila dejó que una sonrisa dichosa cruzara su cara, mientras que Lauren cambiaba de posición, tomando a Camila y acomodandola encima de ella, quedando debajo de la pequeña.
Lauren apoyó a Camila sobre ella, los muslos de la menor a ambos lados de sus caderas, mientras que Camila tomaba a Lauren desde el cuello de su camisa y la besaba con pasión.
El cuerpo de Lauren a la luz de la luna era una obra de arte para Camila. Su cuerpo perfectamente tonificado fue completamente revelado a ella y adoraba cada centímetro de su piel.
La menor llevó sus manos a la cintura de Lauren y la acarició por sus costados, explorando su cuerpo. Lauren levantó sus manos y cepilló su cabello sobre sus hombros. Ella puso sus manos detrás de su cabeza y se movió con las manos de Camila sobre ella, absorbiendo su atención con un suspiro satisfecho.
Lauren decidió explorar un poco por su cuenta. Se inclinó más adelante, quedando las dos sentadas, Camila sobre los muslos de Lauren, mientras se besaban apasionadamente, sus lenguas haciendo una guerra interminable. La ojiverde trazó los pechos de Camila con sus manos, luego subió su camiseta y les plantó unos pequeños besos alrededor, oyendo a Camila suspirar y por último plantó un tierno beso entre sus pechos con amor. Acarició sus hombros y le dejó un beso en su mejilla, Camila sonriendo de felicidad.
Finalmente, Camila se arrastró fuera de Lauren y se acurrucó a su lado. Lauren estiró las sábanas, tapándolas a ambas mientras Camila la observaba expectrante con una sonrisa de enamorada.
Camila se acurrucó en el hombro de Lauren quien la abrazó dulcementr. A pesar de que el momento era perfecto oara ella, su en su mente corrían todas las consecuencias que esto podría tener mañana.
-¿Lauren?
Lauren la atrajo más hacia sí, acurrucándola más profundamente en ella. -Hmm, ¿Sí, Camz?
-Aún seremos amigas después de todo esto, ¿Verdad? -Lauren se apoyó sobre un codo y miró hacia abajo a Camila, confundida.
-¿Qué? Por supuesto, ¿Por qué dices eso?
-Bueno, yo no sabía si querías mantener esto en secreto y quizá ahora te arrepientas… -Camila neuvamente empezó a sacar a luz sus inseguridades. -No quiero qie la gente se burle de ti sólo por mi. Oh, lo siento mucho. No debí haber empezado esto, soy una tonta yo- Lauren se alarmó y la apretó más a su cuerpo cuando sintió que Camila se iba apartar.
-Camila… -la miró con severad- Deja de preocuparte.
-Pero--
-No pasa nada, de verdad. Quiero decir, esto ya lo había pensado-
-¿De verdad? -preguntó la pequeña un tanto confundida pero muy sorprendida. Lauren sintió ternura al ver sus ojos brillantes curiosos. Se encogió de hombros y miró hacia la ventana.
-Sí, quiero decir, no me gusta cuando la gente habla de mí de esa manera, pero si me termina gustando una chica, que así sea -dijo la ojiverde mirando a Camila con una sonrisa sincera. -En todo caso, no podría haber pedido una mejor chica que viniera a mí. -Sonrió acariciándole la mejilla a Camila con su dedo índice. Esta se sonrojó.
-Entonces…¿No te importaría hacer esro otra vez? -Lauren se abrazó más a Camila y le besó la cabeza.
-¿Estas bromeando? Tenemos que hacer esto todos los días. -Lauren bajó su mano tentadoramente entre las piernas de Camila y la dejó ahí, sintiendo su calor y haciendo retorcer a Camila -Además, me encanta tenerte para jugar…
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Chan chan chan
Y aqui termina el maratón :)……………
Nah mentira el 2/2 e.e
¿Cuál ha sido su secuela favorita? ¿Wicked Games, Literas o este? :3
Nos leemos mañana :D