Sin dudas aquel lugar me estaba desesperando. Gracias a Dios nuevamente en casa, se siente un ambiente solitario pero cálido, libre de tanta gente y ruido ¡me encanta mi habita!
Agradezco aquel desastre, porque de no darse aún estuviera en ese lugar, aunque no se ve nada bonito que la primera vez que vas a una fiesta te expulsen de allí para siempre.
Espero que May esté bien, a ella le prohibieron la entrada por completo al club, jamás puede poner un pie allí al igual que yo, pero creo que se pasaron con esa decisión ese patán se merecía lo que les hicimos o mejor dicho lo que yo le hice.
Pero salió tan normal que creo que no le afecto nada de lo que pasó, al parecer gozo que le dé su merecido a ese idiota, yo no lo goce mucho, ver sangre me pone de muy malas, aun siento las náuseas y lo que hice mi trae un poco nerviosa, no sabía que era capaz de hacer algo así.
2 HORAS ANTES
― ¡Ya déjame tranquila! ― Le digo a May quien se encuentra moviendo mis brazos para obligarme a bailar.
― Por favor, Clear, ¡solo vive tu juventud! ― Me dice mientras hace unos movimientos extraños
― Yo mejor voy por otro jugo― Respondo y me doy la vuelta empezando a caminar.
― ¡Tráeme otro trago! ― Me grita May mientras me voy alejando, volteo la cara y le doy una mirada tipo "solo en tus sueños vuelvo aquí"
Me adentro entre toda aquella gente con las cuales tropiezo cada vez que doy un paso, veo lo lejos que queda la barra y me doy cuenta de que no llegaré con los pies bueno, ya que los pisotones que ando llevando me destruirán los pies, veo a una esquina donde alcanzo a notar un sofá, allí solo hay dos personas, calculo distancia y me dirijo hacia él, creo que es apto para mí, no hay mucha gente en aquella zona y está más cerca que la barra.
Me ubico en una esquina para sentarme, estoy muy aburrida, solo veo a la gente moverse y me encargo de no perder de la vista a May. Siento que esta algo borracha, trate de convencerla que se siente un rato, me sacrifique la "vida" para llegar hasta a ella, pero no ha querido parar. Veo como baila, algunos chicos se le pegan a bailar y ella muy normal sigue moviéndose y se ve muy cómoda haciéndolo. Es que me sorprende ver eso, yo no podría hacerlo, me muero si lo hago.
Miro mi teléfono para ver la hora y en serio que el tiempo pasa tan lento aquí, solo llevo media hora y siento que mi vida entera la llevo aquí sentada. Ya me está dando un poco de sueño.
: Mensaje de Mamá
¿Cómo va la fiesta?
Yo: No me esperaba que fuese mejor. Nótese el sarcasmo
: Mensaje de mamá
Diviértete, pero llega temprano para que puedas ir a clases
Que lleguemos temprano y ya son la 12:30 a.m., pero la verdad es que llegamos tarde aquí, claro que es mi culpa, May se encargó de vestirme y arreglarme completamente.
Yo: Tranquila, nos iremos en 10 minutos.
: De mamá
¡Perfecto, diviértete nos vemos mañana!
Mientras estoy aquí sentada algunos chicos me han invitado a bailar, pero no he ido con ellos, lo único que se me ha ocurrido en este mal es pensar en Dario y que estará haciendo ahora.
Quizás está en alguna fiesta. Sé que él y sus amigos salen todos los fines de semana. No tengo cuenta de Instagram personar, pero si una alterna y por ella tiendo a espiarlo. Los fines de semana siempre están de fiestas el sube muchos estados con sus amigos y las chicas no faltan en ellas, siempre se ven muy rodeados de mujeres.
Lo que me da la fabulosa idea de ir espiar en este instante. Saco mi cell nuevamente, pero recuerdo que no tengo internet en mi teléfono, el internet que uso siempre es el de la casa, esto lo único que tiene es minuto para llamadas y mensajes normales esto va en doble aburrimiento.
Miro a mi frente hacia un barcón arriba que es algún tipo de zona VIP y salto del susto al ver un par de hermosos ojos azules fijado en mí que de hecho no me esperaba. Su dueño es nada mas y nada menos que Alex Carrión que últimamente cada vez que volteo a ver algún lugar está mirándome, como sombra que contempla y siempre dándome el mismo susto.
Aparto la mirada de inmediato, para buscar a May con la mirada. Desde lejos veo un chico que se acerca para bailar con ella, se coloca muy cerca de ella mientras la rodea por la cintura con sus brazos y le dice algo al oído. May se voltea y lo empuja alejándolo de ella, no se ve nada alegre, creo que el chico le dijo algo muy desagradable.
Veo que el la jala de repente y al parecer le toca las nalgas, en este instante me pongo de pie y veo como May le da una patada entre sus piernas, el chico se encorva y se agarra en aquel lugar donde suele dolerles mucho a los hombres cuando le pegan, su rostro muestra un gran dolor.
No me quedo allí sentada, salgo por en medio de aquella gente corriendo a ver como se encuentra May.
― ¿Estas bien? ― Le pregunto muy preocupada.
― Si, lo estoy― Responde de inmediato abrazándome y dándome la vuelta para salir del lugar donde nos encontramos parada.
Una mano me Jala bruscamente por un brazo echándome a un lado, le da tremenda cachetada a May y le grita ― ¡Zorra maldita! ― no lo pienso dos veces así que le quitó una botella a una mujer que estaba a mi lado y la bato en la cabeza del chico.
Veo cómo los guardias de seguridad corren y todos me echan la culpa de herir el chico, sangre corre por la cabeza del joven y yo solo estoy parada ahí traumada, los de seguridad me toman por las manos al igual que a May quien está protestando, pero estoy tan paralizada que solo escucho su voz, pero no sé lo que dice, solo veo sangre en la cabeza del chico y todo se mueve dentro de mí. Me sacan casi arrastrándome de aquel lugar al igual que May.
― No las quiero volver a ver aquí. Queda prohibida su entrada a este lugar y agradezcan que no llamó a la policía ― Es lo que escucho gritar al guardia de seguridad quien nos empujó hacia afuera como bolsa de basura.
Aún estoy parada con los ojos bien claro, pero ninguna palabra sale de mi boca lo único que deseo es vomitar todo.
― ¿Estas bien Clear? ― Pregunta May, me quedo sin respuesta aun no asimilo lo que hice
― Clear, ¿estás bien? ― Pregunta nuevamente
―No, la verdad tengo muchas náuseas― Le respondo volviendo en sí y con ganas de tirar todo para fuera. Me giro a una esquina y me voy en vómitos gracias a Dios hay un zafacón así que vomito todo allí.
May me ayuda a sentarme después de todo en una silla mientras le pide de favor a un chico que le valla por una pastilla a una farmacia que queda del otro lado de la calle.
El chico llega de una vez, me tomo la pastilla, pasan unos minutos y ya me siento mejor.
― Ya me siento mejor, llama un Uber para irnos ― Le digo a May quien está parada detrás de mí rozando mi pelo.
― Lo sabía, esas pastillas son mágicas― May lo dice muy emocionada mientras toma su teléfono para contactar un Uber.
― Jamás debí traerte a este lugar ― Me dice en tono de arrepentimiento.
― No debiste, pero no me colocaste una pistola en la cabeza para hacerlo ― Le respondo mientras me quito la chaqueta que traigo puesta, de repente tengo mucho calor
― No, pero use el chantaje, por eso accediste― La miro y le brindo una sonrisa de boca cerrada, porque en eso tiene razón.
― Olvídalo May― May me abraza y una risita deja sus labios.
― ¿Cómo te atreviste a darle con una botella? ― Dice a mi oído mientras suelta una risita.
― Tampoco sé cómo lo hice― Ambas nos reímos.
― Creo que te adoro May, no tolero que nadie te haga daño―Ella me abraza más fuerte y besa mi cabeza mientras continuamos riendo.
― Sabes Clear, ¡te quiero mucho! ― Dice a mi oído todavía colgada de mi cuello.
― Yo te quiero más mi chantajista― Se aleja, me mira y sonríe, igual hago lo mismo.
La verdad no sabía que era capaz de golpear a alguien. Aún estoy sorprendida con lo que hice. Herí la cabeza de ese chico por defender a mi amiga, creo que soy más valiente de lo que pensaba.
Llega el Uber y ambas entramos.
Dejamos el auto de la madre de May en el estacionamiento, allí no le pasara nada, ella no está muy bien para manejar, digamos que esta algo borracha, sería un suicidio que manejara así, porque si la policía nos encuentra y le hace la prueba del alcoholímetro nos jodemos allí mismo y claro que yo no lo llevo, porque no se manejar aún.
Llego a casa y me despido de May ― No le digas nada a tu mamá, por favor― La miró y sonrió
― ¿Decir qué? ― Ella sonríe al igual que yo, nos deseamos buenas noches y entro a mi casa.
Me recuesto en la puerta de espalda. Gracias a Dios nuevamente en casa, se siente un ambiente solitario pero cálido, libre de tanta gente y ruido. Me encanta mi habita.
Sin dudas aquel lugar me estaba desesperando. Y la fiesta no es lo mío.
Agradezco aquel desastre de no darse aún estuviera en ese lugar, aunque no se ve nada bonito que la primera vez que vas a una fiesta te expulsen de ahí para siempre.
Espero que May esté bien, a ella le prohibieron la entrada por completo al club, jamás puede poner un pie allí al igual que yo, pero creo que se pasaron con esa decisión ese patán se merecía lo que le hicimos.
Pero salió tan normal que creo que no le afecto nada de lo que paso, sin embargo, a mi si ver sangre me pone de muy malas, aun siento náuseas.
Subo a mi habitación y pongo en mi teléfono ("HELLO" de Adele) mientras entro en el baño por una grandiosa ducha. Es lo que necesito para sentirme mejor después de todo.
Veo el reloj y es la 1:00 a.m me recuesto en la cama. Necesito descansar para estar de pie mañana para ir a la escuela. Debo entregar ese castigo, no puedo darme el lujo de no ir.
Mi primera noche en una fiesta fue un real desastre. ¿Quién diría que mi primera noche de fiesta sería un fracaso? Eso no lo vi llegar definitivamente. Jamás imaginé que la primera vez que asistiera a un club me echarían como bolsa de basura, tampoco que le iba a meter un botellazo a alguien ¡Que lo loca la vida!
NOTA DE AUTORA:
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QUIERO QUE DESCUBRAN ESTA HISTORIA CONMIGO.
ADIOSITO MIS BEBES