Don, querido, ¿a donde vas con tanta prisa? la tortuga de morado caminaba apresurado, la vista clavada en la pantalla de su brazalete, el ceño fruncido y maldiciendo entre dientes en un lenguaje que no puedo interpretar, unos pasos más atrás, 6, no, 7 tortugas mutantes. a estas alturas parece todo un regimiento, su hermano mayor, le seguía el paso preguntándole qué cosa representaba una emergencia tan grande como para justificar su comportamiento. Don se limitaba a repetir que él podía manejarlo, lo que a los oídos del mas grande llegó como un <sígueme, me voy a meter en problemas y alguien va a tener que salvarme>
La carrerilla finalizó cuando dieron con el tanque, una máquina enorme, una maravilla de la tecnología con múltiples funciones, un diseño original y pintoresco, cortesías del genio morado de esta dimensión, Raph estaba ocupado persiguiendo a D, pero los cuatro visitantes estaban maravillados, en especial Donnie, era la maquina mas hermosa que jamás haya visto, solo sabia que quería conducir esa hermosura algún día;
-deja de babear Donnie- Rafa pasó junto a él siguiendo a los demás hacia el interior del tanque.
-¿que? a poco en su dimensión no tienen uno de estos-preguntó Leon con una sonrisa ladina.
-pues, no se ve así- Rafa le contestó.
el interior era amplio y tiene muchos botones y pantallas;
-:O, es hermoso, y tienen esta cosa con teclas, y bolas de bolos y OH ¡¿ES UNA MAQUINA DE HELADOS?! -El pecoso no sabía donde poner sus garras primero.
-Mikey, no toques nada-Leo le regañó- a donde vamos?-preguntó al líder de rojo ignorando el puchero de su hermanito menor.
-eso quisiera saber yo- Raph volteó hacia Donnie, quien suspiró y se dignó a explicar.
-Bieeen, en vista de que insisten en seguirme- su voz sonaba aburrida e irritada- los dragones púrpura han estado distrayéndome con virus de computadora desde ayer, obviamente me encargue de ellos, pero resulta que eran una tapadera para hacerme pensar que solo me estaban molestando. NO, en realidad no querían que descubriera verdadero plan y ahora tenemos que ir al sistema de servidores en el último piso del banco central a detener a esos malcriados para que no roben la información de cuenta de millones de usuarios y cometan uno de los mayores atracos cibernéticos de la década- (pura ficción gente) Don encendía el tanque y ajustaba algunos botones para guiarse.
-Ahora, déjame ver si entendí, estamos yendo a detener a un grupo de chamacos nerds, en plena luz del día, solo porque quieren robarse un par de claves?
-Raphael, querido hermano- su voz salía de entre sus dientes con una mueca forzada- creo que no entendiste nada de lo que dije.
-explícate I:^
-Si roban esos datos podrían transferir millones de dólares a una cuenta oculta y directamente causar una catástrofe económica- Donnie habló unos pasos más atrás.
-exacto.
-mm, en ese caso tenemos que apresurarnos.
-ya vamos a llegar, solo que tenemos que ingeniarnos una forma de entrar sin ser detectados al edificio.
-sip, somos una multitud- Leon se mecía en su asiento- tal vez por la ventilación.
-seguramente nadie estará usando las escaleras de emergencia- Leo agregó.
-podemos llegar a las escaleras de emergencia a través de la ventilación-confirmó Don revisando los planos del dichoso edificio que obtuvo en un instante.
-dividámonos, yo me quedaré en el tanque- Raph habló- Don, Rafa, Leo, Leon y Mike subirán, Donnie, Mikey se quedarán conmigo, monitoreamos desde aquí.
-ooo, yo quería ir- Mikey susurró apenado.
-Tranquilo hermanito, alguien tiene que ayudarme a atraparlos cuando intenten huir- el pecosito de naranja volteó a verlo y asintió, lo había llamado "hermanito" y le pareció...bien :3
-hay un ducto a un lado, en este callejón- Dee estacionó el tanque en las sombras y apagó las luces exteriores.
-Muy bien chicos, vamos- Leo comandó saliendo del tanque, le siguieron los demás.
-Oye Donnie, no ralles mi consola- se despidió Don cerrando la compuerta, Donnie asintió con seguridad, creo que es la primera vez que es la primera vez que le emociona hacer la vigilancia. Como Raph y Mikey aún deben esperar, que tal si comemos un helado por mientras.
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-.y, cómo son esos "dragones púrpura"?-preguntó Rafa en lo que se movían por los ductos.
-son un grupo de hackers muy hábiles, la primera vez que me tope con ellos lograron robarse mi tecnología y estuvieron a punto de robarme algo aún más peligroso- Don contestó.
-y eso que solo parecen adolescentes corrientes.
-En nuestra dimensión son solo una pandilla de delincuentes, de hecho no creo que sean de los mejores- comentó Rafa.
-si fueran solo delincuentes seria mucho mas fácil- susurró el de morado deteniéndose sobre una del las trampillas de la ventilación, luego bajó con cuidado de no hacer ruido, los demás le siguieron y se movieron sigilosamente por los pisos que faltaban, el líder azul abrió la puerta que daba a los servidores un poco, y cuando vio que no había peligro de ser descubiertos entraron y se separaron, los servidores son parecidos a cajas metálicas largas, tienen luces y sirven como un disco duro conectado a la red principal de un programa, pero también sirven para ocultarlos. Al acercarse pudieron oír voces así que esperaron un momento:
-Todo listo Kendra, solo falta que la información termine de copiarse...-estaban los tres, tal como lo habían dicho antes eran un trío de adolescentes, llevaban chaquetas de satín iguales, con un bordado en sus espaldas de un dragón chino de ojos rojos y además cargaban con un bolso cada uno. Una laptop estaba conectada al servidor principal y a ella un Pen-drive (seguramente en el que se llevarían la información)
-bien- Don salió de entre las sombras manteniéndose a una distancia prudente- aléjate de esa computadora Kendra-la nombrada volteó disgustada.
-vaya, vaya, vaya, miren quien decidió aparecer-habló burlesca.
-¿Estuviste ocupado con nuestros regalitos?-El de lentes interrumpió.
-cállate Jase.
-me callo.
-como sea, llegas tarde-el más alto cerró la laptop y tomó el pendrive escondiéndolo en uno de sus bolsillos. Los demás no perdieron el tiempo y se aproximaron desenfundando sus armas.
- trajiste amigos? no sabia que tuvieras- Kendra parecía segura, "algo oculta" pensó. Justo entonces la chica abrió su bolso en un movimiento rápido y de él salieron varios drones pequeños;
-¡debemos quitarles el pendrive y la computadora!-Aclaró Don.
-Rafa, Don, encárguense de los drones, Leon, Mike atrápenlos, voy detrás de ustedes-el líder azul trazó el plan.
-fácil-Leon sonrió divertido, tomó su odachi y lo blandió en el aire haciendo círculos, Rafa y Leo no sabían qué demonios estaba tratando de hacer hasta que un portal de tonos azules y celestes se formó justo frente a sus ojos, la tortuga de orejas rojas saltó inmediatamente después hacia él con total confianza, el otro extremo se abrió detrás de los dragones púrpura y de ahí salió, más no pudo atraparlos porque estos ladrones estaban preparados y tenían más de un truco bajo la manga, el mas grande tomo una herramienta de sus bolsillos, o eso parecía hasta que se volvió una especie de barra con electricidad en uno de sus extremos, Leon se vió en la obligación de retroceder.
Michael no podía usar sus llamas en lugares cerrados pero si podía lanzar el hilo de su kusarifundo hacia los enemigos e intentar enredarlos, Leo se avispó, tomó la katana y corrió.
Rafa y Don se encargaban de los drones, eran más difíciles de golpear de lo que parecen, y veloces, si, veloces como moscas. ambos se veían complicados, esa pequeñas maquinitas disparan lásers pequeñitos que se sentían como piquetes, al fin, Rafa le dio a uno, luego Don, pero si querían avanzar un poco tenían que cambiar de estrategia, El de morado se agacho, apoyó su espalda contra la pared más cercana y le indicó al Rafa que lo cubriera, el le miró con escepticismo pero aun así se paró frente a él para resguardarlo, los láseres se concentraron en el de rojo y en cuanto estuvo libre convirtió su tech-bö en un tipo de pistola precisa y fina, la apunto a uno de los drones que ya no se movía para todos lados y lo derribó, hizo lo mismo con los demás y lo más rápido que pudo:
-que no tienes un escudo entre tus cosas?- se quejó en un gruñido el más bajo. los piquetes de esas cosas arden.
-si, pero no iban a dispararle al escudo-contestó, la frase solo hizo que rafa arrugara la nariz. Ambos decidieron ayudar a los demás, que a estas alturas ya iban ganando la batalla. Los dragones se encontraban en clara desventaja, perderían de seguro así que optaron por retirarse.
-¡Máscara!- La líder ordenó, su séquito y ella sacaron unas máscaras de gas compactadas de uno de sus bolsillos, la chica dejo caer el bolso con brusquedad, el sonido de algo cristalico romperse llamó la atención de las tortugas, de él comenzó a salir un humo denso de un púrpura oscuro, eso no podía significar nada bueno. Por instinto aguantaron la respiración y se alejaron del humo, los dragones aprovecharon esto para abrir una ventanal (cortar el vidrio, más bien) y salir por ahí.
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Donnie vigilaba el estado vital del equipo y cualquier anomalía en la parte superior de edificio (también examinaba las funciones del tanque con cuidado de no apretar nada que no debiera) unos minutos después de que los chicos entraron al lugar la pantalla alertó de algo sospechoso, era una señal enviada desde el brazalete de Don, indicaba que el piso donde estaban no tenía "aire respirable".
Donnie alertó a Rafa y Mikey, ambos salieron del tanque y rodearon el edificio, a través de un hueco en los ventanales superiores salía un gas púrpura, se notaba que en el interior había aún más y que era tan pesado que no saldría fácilmente por el hueco del ventanal. Por la misma ladera bajaban a gran velocidad tres figuras, les pareció una salida escandalosa y nada sutil pero debían hacer algo de todas maneras. Lamentablemente para ellos, los dragones eligieron el extremo que daba a una calle no muy transitada. dándole a las tortugas libertad para moverse a la vereda.
-esos deben ser ellos-infirió Raph, el sol le encandiló los ojos al mirar hacia arriba.
-¿qué hacemos?- por lo general Leo debía decirle.
-tengo una idea, pero tienes que confiar en mí-el de rojo le extendió una mano esperando la confirmación del pecoso, después de unos segundo él asintió- ok, escucha-rafa lo levantó del suelo sin esfuerzo alguno, a lo que mikey se sorprendió y trato de mantener el equilibrio- te lanzaré hacia arriba ¿tienes con que cortar?
-s-si, mis nunchakus se convierten en kusarigamas.
-pues tendrás que cortar las cuerdas con eso, listo?-Mikey asintió sujetando sus armas con fuerza, Rafa apuntó hacia arriba- descuida, los voy a atrapar-dijo antes de lanzarlo verticalmente con la suficiente fuerza como para llegar por sobre los 15 pisos, cuando pasó a los dragones (que se preguntaron qué fue esa sombra que pasó tras ellos) manejó su kusarigama y estirando la cadena hizo que la cuchilla de uno de los ec6remos cortara las sogas por los que bajaban.
Los gritos no tardaron en venir, era caída libre, desde esa altura de estrellarían contra el piso como huevos en una sartén, Mikey entonces pensó "un momento, al caer sobre Rafa desde aquí ¿no seria igual que caer al piso?" hora de entrar en pánico.
Rapha vio que había funcionado así que continuo con el plan, too sus tonfas con firmeza y golpeó sus puños, entonces unas manos como las suyas, hechas de pura energía mística emergieron de sus brazos, el de rojo miró hacia arriba y las extendió hacia los que iban cayendo, se hicieron más grandes y llegaron más arriba. Mikey no podía creer lo que estaba viendo, ni siquiera sabía que veía, las enormes manos los atraparon a los cuatro sanos y salvos.
Rafa dejó al pecoso en el suelo y le quitó cualquier cosa sospechosa a los ahora aterrorizados adolescentes.
-buen trabajo Mikey, los tenemos- el nombrado sonrió.
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las cinco tortugas que seguían en el edificio ahora tosían en busca de aire fuera de la sala de servidores, bajaron un poco por la escalera donde el humo no los alcance.
-todos...están...bien?-preguntó Leo, en serio, que era esa cosa?
-seee-Rafa suspiró.
-sip-Mikey sonrió de lado aun respirando con dificultad, Leon y Don levantaron un pulgar apoyando sus manos en sus rodillas.
-bien-el líder suspiró.
-pero escaparon-dijo el de rojo con cierta molestia.
-seguramente los otros los atraparon-Leon se incorporó- Donnie?
-Si, después de todo estaban vigilando-Don se tronó la espalda y asintió- no sé qué era ese gas, si alguien se empieza a sentir raro después tiene que decirme-comentó- ya, bajemos de aquí.
salieron como entraron, solo que tuvieron que entrar a la ventilación por otro piso, una vez llegaron abajo se encontraron a los Dragones púrpura encadenados y a Mikey y Raph muy orgullosos de su captura.
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:D
*se escabulle en una grieta de la pared*