N/A: Cada vez que Daniel habla no es nada más que la imaginación de Michael. Daniel NO habla...
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P.O.V. de Michael
Cuando Luke me llevó devuelta a casa despues de comer un helado, me fui a mi habitación y me metí en la cama, listo para dormir
"Michael, ¿estás bien?" me preguntó Daniel.
Me giré hacia donde él estaba mientras terminaba de ponerme mis pantalones de pijama del Hombre Araña
"Estoy bien, Daniel. ¿Por qué no iba a estarlo?" Él frunció el ceño.
"Esos niños fueron malos contigo. Nadie debería decirle algo así a mi mejor amigo" Me reí.
"¡Estoy bien! Ahora date prisa y prepárate para acostarnos. Mami debe estar por venir pronto para leernos nuestro cuento de buenas noches" Me metí en la cama y me tapé con las mantas, sujete a Daniel en mis brazos. "Qué crees que vaya a leernos esta noche?" Me preguntó. Me encogí de hombros y pensé por un minuto "Bueno, no estoy seguro. Ya terminamos casi todos los libros de los estantes" Le dije. Minutos después, mi mamá entró y sacó una de las sillas del juego del té, se acercó con ella a mi cama.
"Hola, mami." Saludé.
"Dile que yo también digo hola" Me pidió Daniel
"Daniel dice hola también." Sonreí.
"hola, pequeño" Ella sonrió. "Así que ... uhm Luke me dijo lo que pasó hoy" Su sonrisa se convirtió en un ceño fruncido
"No me importó mucho en realidad, mamá. Estoy bien. ¿Ves? ¡Estoy sonriendo!" Le di la mejor sonrisa que pude.
"Lo se, bebé, pero no escuches lo que esas malas personas dicen de ti, ¿de acuerdo? No eres raro y no perteneces a ningún lugar que no sean los brazos de tu madre" Me dijo y dejó un beso en mi frente.
"¿No habrá cuento para dormir hoy?" Hice un puchero.
"Es demasiado tarde para un cuento. Sólo descansa un poco, ¿Está bien, bebé?" Se levantó de la silla y la puso de nuevo en la mesa de la fiesta del té. "Te amo hasta la luna y de regreso"
"Hasta la luna y de regreso." Confirmé. Ella apagó las luces, por lo que mi luz nocturna era la única cosa que alumbraba la habitación.
"¿Te divertiste hoy, Michael?" Daniel preguntó mientras me acurrucaba abajo en las sábanas.
Asentí con la cabeza. "Me divertí muchisimo. Me encanta salir con Luke"
"¿De verdad te agrada Luke, ¿verdad?" Tenía un poco de tristeza en su voz y eso me hizo fruncir el ceño. ¡Uno de mis mejores amigos no podía estar triste!
"Me gusta Luke, mucho, ¡pero no más que tu, Daniel! ¡Tu eres mi mejor amigo!" Le aseguré "¿No quieres que salga con Luke?"
"¡No! Sólo... sólo hecho un poco de menos los tiempos en que eramos solo tu y yo. He estado aquí para ti desde que cumpliste 15 años, Michael. Sólo creo que yo debería ser tu prioridad principal y no Luke" me explicó Daniel.
Ahora me estaba enojado con él. En todos mis años de tener a Daniel como amigo nunca me había enojado con él. Nunca.
"¿No me quieres hacer amigos?" Le pregunté con rabia.
"Si quiero, pero no quiero que los elijas a ellos ante que a mi. ¿Quién estaba allí cuando Calum dejó de ser tu amigo? ¿Quién estaba allí cuando sus padres discutían? Yo. No ese chico, Luke"
Luke era tanto mi amigo como él. ¡No debería estar diciendo ninguna de esas cosas!
"Eres un duende y te odio." Fue todo lo que dije, luego me di la vuelta, así que no estaba más frente a Daniel. No quise decir eso, pero estaba tan enojado que no sabía qué decir. Como no pudía quedarme dormido, pude oír los débiles sollozos que venían de la boca de Daniel.
Todo va a estar bien... Vamos a arreglar esto por la mañana. Eso es lo que hacen los mejores amigos, ¿no?
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En la mañana, desperté cuando mi madre me dijo que tenía que levantarme para que ella pudiera limpiar mi habitación un poco antes de que mis primos llegaran hoy. No me agradan mucho mis primos para ser honesto. Por lo general eran malos y desagradable, pero a nadie le importaba, ya que ponen cara de inocencia y le hacen creer a todos que digo mentiras.
"Esta bien, mami" murmure adormilado. Me levanté de la cama y fui abajo donde ví a mi padre haciendo panqueques con trocitos de chocolate.
"¡Buen día, Mikey! Hice tu desayuno favorito" puso un plato en mis mano con los panqueques que tenían forma de corazones. Yo solía decir que era tonto, pero mi padre me respondía que eran así porque me quiere mucho.
"Gracias, papá." Le sonreí y empecé a comer.
"Sabes que tus primos estan llegando, ¿Verdad?" me recordó mi papá mientras se sentaba a comer sus propios panqueques. "Vas a portarte muy bien, ¿no?" Odiaba que incluso mis padres pensaran que era mi culpa cuando algo salía mal.
"Claro". Suspiré.
"Ahora termina tus panqueques y preparate. Van a estar aquí pronto" Dijo él, agarrando el almíbar y hechando todo sobre sus panqueques.
Hice lo que me dijo, comí y después subí a mi habitación a prepararme. Todo estaba limpió, solo tenía que encargarme de estar listo cuando llegaran
Me di un baño y luego miré en mi armario preguntándome que debería usar. Tenía que ponerme algo muy bueno, ya que íbamos a tener visitas, pero terminé usando mi enterizo de canguro. Me miré en el espejo y no podía dejar de reír.
"Me veo ridículo" Entonces tube una idea y corrí a mi cama para ponerme a saltar de un lado a otro en ella "Ahora soy realmente un canguro! Si! Si! " reí para mis adentros. Cuando estaba a mitad de un salto mi mamá abrió la puerta.
"Michael, ya lle-... ¿Estás usando el onesie de canguro? ", me preguntó, levantando una ceja. Asentí con la cabeza.
"Por supuesto que sí!"
"Está bien, ahora ven,canguro, abajo esta tu tía y tienes que ir a suladar" Ella bromeó juguetonamente y luego cerró la puerta. Salté de mi cama y bajé las escaleras para ver a mi tía Lisa con mi primos de May y Jackson. May tenía 16 y Jackson tenía 12 años.
Jackson no era demasiado malo, pero rampoco era tan agradable. May nunca fue amable en absoluto. Ella siempre me ponía nombres y decía que era un gran duende.
"Michael!" Mi tía Lisa extendió los brazos para un abrazo y me acercó a ella.
"Oh Dios mío, te has puesto tan grande! Mi pequeño hombre está creciendo." me pellizcó las mejillas y yo rodé mis ojos.
"Hey, loco." lo saludé con una sonrisa. Trataba de no fruncir el ceño, de ignorarla.
"¿Qué demonios tienes puesto?"
"Un onesie canguro" Murmuré. Quería corregirla y decirle que no utilizara malas palabras, pero yo sabía que no le importaría.
"A mi me parece bastante estúpido" dijo ella "Sabes que tienes 18 y la mayoría de los chicos de 18 años no suelen caminar con onesies de canguro por ahí". Miré a Jackson y me di cuenta de que incluso él parecía estar enojado con May, pero él no iba a decir nada.
"Michael, ¿por qué no llevas a Jackson y May a tu habitación y luego pueden jugar afuera? "Mi mamá sugirió.
"Claro, mami" dije, dejé escapar una risa y suspiré "Vamos a mi habitación." Subí las escaleras y abrí la puerta para dejarlos entrar. "Yo eh ... tengo Frozen en DVD si es que quieren ver eso" Jackson pareció interesado en eso.
"Si, eso suena muy bien." Yo no podía dejar de sonreír de lado con eso. Fui a donde guardaba mis DVD's y CD's y miré buscando la pelicula.
"Entonces, ¿dónde está ese estupido león de peluche del que siempre hablas?" Preguntó May, sentándose y cruzando los brazos.
Estaba demasiado ocupado preocuparse de mis primos que venían, me había olvidado totalmente sobre Daniel. Oh Dios mío, esperaba que no siguiera enojado conmigo aun.
Puse "Frozen" y me senté en mi cama junto a Jackson. "Él está aquí." Fui agarrarlo de su lugar habitual, pero lo único que sentía era aire vacío. "Daniel?" -pregunté esperando que me respóndiera
Me levanté para mirar debajo de mis almohadas y bajo las mantas al no encontrar a Daniel.
"Daniel? Por favor, deja de jugar. No es gracioso!" Me sentí al borde de las lágrimas.
"Es sólo un animal de peluche." me dijo May.
"No es sólo un animal de peluche! Él es mi mejor amigo!" Le grité.
Empecé a sentir pánico. ¿Qué pasa si herí tanto los sentimientos de Daniel que se escapó?
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