Capítulo 32
"Akumi"
Narradora
El aroma en el ambiente se impregnaba en hierro y sal, a causa por el suelo cubierto de líquidos rojos que rodea a varios ninjas muertos.
Las pequeñas manos blancas como papel de aquella niña, estaban manchadas de sangre de sus víctimas, manos que acabaron sin piedad robando hasta el último suspiro de docenas de cadáveres en su más grande agonía.
Su mirada era oscura y carmesí, sedienta de sangre y venganza hacia ese hombre frente a ella que causó por primera vez odio en su puro corazón.
Quería que sufriera cada tortura que sufrió su madre por su causa, que recorra cada milímetro de su ser el dolor que alberga en lo más profundo de su alma, desde que la desgracia llegó a su amada familia.
Lo quería muerto, pero primero era hacer que el mismo rogara y humillar a para tener su fin menos dolorosa.
Sus expresiones serias se transformaron levemente a una pequeña sonrisa cerrada, que expresaba una inocencia oscura.
Una inocencia manchada por deseos retorcidos de una muerte deseada hacia el hombre de hebras oscuras.
La pequeña sonrió con sarna, no lo mataría, aún no era el momento porque sabía que perjudicaría a su adorado amigo. Los del consejo como otros niñas, tratarían de lastimarlo por su propia cuenta y ella no permitiría eso.
Tomó entre sus manos el rostros del líder de la aldea de la arena, haciendo que sus ojos rojos cuál Rubí se cubrirán de rojo sangre y a la par, formarán pequeñas figuras negras. Figuras reconocidas y enraizadas del Clan Uchiha.
En un abrir y cerrar de ojos, la mente de Raza fue sometido a varias ilusiones torturadoras; debilitando su voluntad y razonamiento como fuego combustiónando a la pólvora.
Su rostro comenzó a perder pigmento hasta ser una piel pálida bañada en su propio sudor.
Su cuerpo temblaba y la respiración se entrecortaba. Había subestimado el poder de la niña, un poder que sin duda alguna era abrumador.
Un fuerte grito salió de las cuerdas vocales del mayor para después caer todo su peso contra el arenoso suelo.
Dentro del Genjutsu
El hombre estaba completamente encadenado des de sus pies hasta el cuello como un simple perro callejero y salvaje.
Cadenas que irradiaban una fuerte aura morada y se encajaban duramente en su piel como espinas de acero ardiente.
Trataba de moverse, pero sus esfuerzos por liberarse eran completamente inútiles, con el sólo pensamiento de mover un centímetro de su cuerpo; la precion que se aferraba con desmesura incrementaba a gran velocidad.
Rasa._ ¡Maldita sea! _ grito por el sonido de sus huesos fracturandoce levemente.
Akumi._ Ja, ja, ja, ja, ja... ¿Con esa boquita besabas a tu esposa, maldito humano? _ miró con sorna y una sonrisa ladeada al Kazekage.
Rasa._ Eres una aberración niñata, cuando me libere, tu, Hanami Kurokami, te daré una muerte lenta y doloro-_ le corto la pelinegra.
Akumi._ Se nota que los humanos no han cambiado, siguen siendo unos idiotas _ expresó a la nada _ mira bien ser de desperdicio de vida y chakra... No me compares con esa mocosa mestiza _ expresó con una mueca de molestia en sus facciones.
Raza._ En-entonces... ¿Quien eres? _ ella sonrió ante la pregunta, que según la pelinegra, era muy tonta.
Akumi._ Crees que te diré quién soy. Un ser insignificante como tu, no merece siquiera mirar a mi dirección _ se acercó al masculino con un andar elegante y sofisticado como alguien de gran estatus similar a la nobleza _ lo único que te diré, porque me das lastima, es que solo cumplo con un pequeño trato con mi víctima y contratista _ tomó la cadena que se arraigaba al cuello del gran líder de la aldea de la arena. Acercó su pequeño rostro con rasgos infantiles y pálidos, junto a una escalofriante sonrisa que prometía una visita al infierno mismo _ Te juro, que esto te dolerá más a ti que a mi, llego la hora de divertirnos _.
悪夢
Él ya no soportaba la tortura ilusoria y psicológica que sufría su mente a manos de aquel ser oscuro y demoníaco, a pesar de que la realidad apenas había pasado unos sólo segundos, en esta ilusión pasaron días. El tiempo relativo que el mayor quería que terminará y llegara a su fin, mientras que la "niña" se burlaba de su sufrimiento como si fuera un digno espectáculo para sus ojos carmesí.
Ella era la pesadilla encarnada.
Akumi._ ¿En serio eres el líder de esta putrida aldea que mando a eliminar a uno de mis descendientes? _ tomo entre sus pequeñas manos el rostro del Moreno que yacía ensangrentado y lleno de quemaduras, su rostro era poco comparado con lo que había sufrido su cuerpo entumesido y abstenido a moverse durante sus turturas por las cadenas negras _ esperaba más por el hombre que eliminó a la madre de la mestiza, pero la realidad es que no aguantas casi nada... Obviamente no pudiste haberla eliminado tu mismo. Pero al menos tengo que darte las gracias por quitarme un peso molesto en mis planes, como también ayudarme a relajarme _ se alejo del castaño _ ¡Tus gritos y tu agonía fueron un gran acto musical de este sádico espectáculo!
Aunque tengo que admitir que me sobrepase un poco. ¡Pero fue porque no me había divertido en siglos! _ dio un brinco de emoción y dando unas pirueta en su lugar _ Así que no me culpes, era el estrés acumulado y de alguna forma tenía que sacarlo todo. El fin justifica los medios, una frase que siempre usas y ahora yo la tomare en este caso de des-estrés _ tomo una filosa piedra y la miraba con detenimiento, analizando el filo de esta _
¡Sobre todo porque estoy compartiendo mi espacio legítimo con esa anciana estupida e ingenua roba hermano! _ aventó la piedra en dirección a su víctima de torturas, cortando una delicada quemadura perteneciente a su rostro.
Rasa._ Ma-maldita... psi- psicopata _habló entrecortada mente con una voz grave y afónica, por el dolor ilusorio de sus cuerdas vocales de tanto gritar.
Akumi._ No te mordiste la lengua insignificante escoria _ sonrió con ironía ante su forma de referirse a ella, cosa que le agrado trayendo recuerdos de su pasado _ ¿Quién mandó a matar a una mujer de vida humilde, que era madre soltera y sin producirte algún problema; con una pequeña niña de 5 años que miró con sus propios ojos como la asesinaban a sangre fría? _ se fue aproximando lentamente mientras hacía su próxima pregunta _ ¿Quién mandó a eliminar a la única figura paterna de esos dos niños, obligando que lo maten con sus propias manos y al final hacer que explote en sus caras cuál bomba de humo? La misma persona que era el hermano de tu esposa a la cual dices amar con todo tu corazón _ se río levemente, una risa que resonó en el lugar mientras caminaba entre los charcos de sangre ante la cansada mirada del Kazekage _ ¿Quién permitió que utilizará al "amor de su vida" cómo un conejillo de laboratorio para poder ingresar un biju, sabiendo que podría matarla a ella y su bebé? _ se detuvo a admirar su obra de "arte" _ si quieres hablar de quien es más escoria, dejarme decirte que tu vas ganando. Porque yo jamás haría eso a mi familia, prefiero matarme con mis propias manos, a que ellos sufran todo eso... _ su sonrisa se volvió sadica.
Rasa._ En... e-este mund-do... n-no hay opciones... de ser be-benevolente... _ Rasa se esforzó en hablar para excusar sus acciones.
Akumi._ Entonces no seas hipócrita y acepta tu karma que yo me encargo a que se cumpla al pie de la letra _ de pronto apareció en el lugar una pequeña mesa de piedra hecha de estalactita y enésima de ella gran variedad de cuchillos y armas ninja, la pelinegra se acercó y tomó un pequeño kunai, que lo admiraba entre sus manos como si fuera un preciado juguete _ bueno... Mucha palabrería _ apuntó y lo lanzó a la dirección del "Mayor" causando que el kunai se introudusaca a en su hombro, donde el filo cortaba rápidamente la carne humana y en parte del hueso, provocando un gemido de dolor del moreno _ que comienza el acto dos de esta obra teatral... _ Río divertida y llena de "inocencia" que esperaba comenzar ya con su divertida actuación de torturadora.
Los gritos de agonía volvieron a comenzar.
悪魔
La sangre que se había acumulado era poco o casi nada como es ahora a comparación de antes. El kazekage ya no se encontraba en la conciencia, su cuerpo estaba aún más herido por la variedad de cortadas y puñaladas producidas por la variedad de armas corto-punzantes.
Mientras tanto la ojiroja estaba sentada en una piedra mirando al hombre con aburrimiento y una pequeña y hermosa flor en sus manos.
Akumi._ Hubiera querido que siguiera despierto _ en sus delicadas manos y manchadas de "sangre" de su víctima, veía aquella flor tan blanca y pura como la persona que se le había dado hace mucho tiempo atrás.
La flor absorbió la sangre de sus manos hasta tornarse lentamente en un color rosado hasta llegar al rojo rubí de sus ojos.
La de cabellos obsidianas se quedó inmersa en las miles de memorias que había tenido en su juventud por la gama de colores que adquirió su adorada camelia, frente a sus ojos.
Tan absorta estaba en su mente que no escucho el sonido estruendoso de las cadenas que se iban prendiendo como fuego y se movían poco a poco hasta ser agresivas y al mismo tiempo se soltaban lentamente del hombre inconsciente.
Akumi._ Al parecer humano... nuestro tiempo juntos llegó a su fin. Una lástima... _ expresó con cierto desagrado por la noticia mientras se levantaba de su lugar acercándose por última vez al pelicastaño _ me divertí mucho, espero que se vuelva a repetir _ las cadenas se arrastraron en el suelo como serpientes hasta llegar a su legítima dueña, rodeando como delicadas caricias a su piel hasta posicionarse a sus respectivos lugares; cuello, muñecas, cintura y tobillos _ hasta la próxima que te vea no dudes que tú fin llegará y el shinigami reclame tu asquerosa alma para llevarla al infierno _.
Mientras ella decía esto, el cuerpo del Kazekage se fue desvaneciendo hasta quedar la nada absoluta y ella nuevamente estar encadenada en su prisión personal.
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El grande cuerpo del líder de Suna que estaba arrodillado frente a la pequeña Kurokami, se miraban directamente a los ojos durante varios segundos, rojo vs castaño. Una lucha de intimidación que sólo dará a uno como ganador y para fortuna o desgracia de cada uno, la mirada del mayor se oscureció, para después cerrar sus párpados y caer al suelo inconsciente como el perdedor.
El silencio gobernó en el lugar con el único sonido del viento frío de la noche.
Los ojos de Hanami volvieron a tornarse al color del arcoiris y su cabello también volvió a su habitual color lila plateado. La niña se sentía muy agotada y débil, que incluso le ardían sus músculos con solo respirar.
La pequeña miro en dirección al biju que la observaba conmocionado por la apariencia que antes tenía la expelinegra.
Ese nombre resonaba en la mente del ichibi una y otra vez causando escalofríos por todo su grande cuerpo.
El nombre de esa niña sádica y poderosa que causaba temor entre todos los bijus.
Shukaku deseaba con todo su ser que no fuera "ella". Pero por ironía y el juego macabro que el destino habia liberado por mero capricho, se confirmó ante el repentino grito del Kazekage y las marcas sangrantes que aparecieron en su cuerpo manchando su ropa.
La pequeña kurokami soltó un sollozo mirando el desastre que había causado y sus manos manchadas de su sangre y de varias personas que les arrebato su vida como si fueran simples alimañas.
La de ojos arcoiris sin el típico brillo en sus ojos, suplantado por uno más opaco y oscuro, fue hacia el biju de arena y con sus pequeñas manitas carmesí se aferro en un abrazo propio desesperado de consuelo.
Hanami._ Y-yo n-no... _ su cuerpo temblaba _ Ga-gaara... ¿Donde... esta... Gaara? _ fue lo único que pudo decir antes de cerrar sus ojos y colapsar por el agotamiento y el nuevo trauma que su inocente mente había sufrido gracias al ser humano avaricioso de poder.
Shukaku tomó entre sus garras el pequeño y frágil cuerpo de la niña con cuidado y la llevó a su interior donde estaría segura junto a su jinchuriki y esa molesta dragona.; pero antes de que pudiera siquiera moverse, las sombras se acercaron a la niña y rodeandola como si la protegerán de todo ser.
Sin duda alguna era el poder de aquella demonio y descendiente puro de los Shinigamis.
Akumi Kurogami
悪魔の女王
Y
内葉皇后
Sacudió su cabeza y se dispuso a alejarse de la aldea, para estar oculto entre las dunas y salvaguardar la vida de aquellos dos niños de acuerdo al trato que había hecho.
Ya tendría tiempo para pensar y preocuparse por aquel ser oscuro que estaba en el interior de la Kurokami, porque lo más seguro esa niña jamás podrá tener un momento de paz de ahora en adelante.
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Holis mis amadas lectoras les entrego este capitulo, la verdad es que no había tenido inspiración, a escepcion de la tortura de rasa. ¿Quién no disfrutaría de su tortura? Porque yo sí, es poquito de lo que se merece por hacer sufrir a mis bebés hermosos.
Este capítulo se dio más enfoque al lado o mejor dicho en la tercera alma que tiene Hanami y por lo que se escribe tiene mucha importancia.
Más por las palabras japonesas que puse, dan como referencia a pequeños secretos en la historia y hacerlas sufrir un poquito.
Akumi es alguien fuerte pero un ser muy inestable que perjudicará un poco a nuestra protagonista, como también la ayudara en situaciones complicadas.
Si les gustó el capítulo, voten y comenten que les ha parecido.
Sobre todo comenten.
Sin más que escribir
Sayonara
~Lunaldyhm Fuera~