Las puertas se encuentran cerradas delante de mi, tomo valor y las abro.

Una gran recepción esta frente a mi, no hay nadie.

Con desconfianza busco a mi hija o a alguien que trabaje en este lugar.

Cada pared esta llena de premios y recortes periodísticos.

Música se escucha y me dejo guiar por ella.

Me asomo por la puerta negra, veo a mi hija al otro lado del salón.

Hay dos chicas más con ella, mi hija se acerca a quien supongo que es su profesora.

Victoria me apunta, la morocha gira su cabeza y se sorprende al verme.

Nos volvemos a encontrar Candela.

La otra chica apaga la musica, Candela se acerca junto a Victoria, quien tiene una sonrisa de oreja a oreja.

Perdón...perdón la demora - me disculpo al verla y asiente despacio-

La próxima vez que no lleguen a retirarla es necesario hacer un acta - me dice con una mirada penetrante y muy profesional- Lo dejo pasar porque es la primera vez

Asiento en silencio y miro a mi hija.

¿Estuvo bien ella? - le pregunto sin mirarla-

Excelente, le va a ir muy bien- contesta ella-

Sonrío viendo a Victoria, agarro su bolso rojo.

De nuevo, perdón no va a pasar otra vez - la miro y aún parece sorprendida ante mi presencia-

Parece debatir si decir algo o no. Sólo asiente, hasta que aparece un chico, el mismo del lunes.

Victoria, te espero mañana - le dice que mi hija y ella asiente emocionada- Nos vemos

Se aparta de nosotros, mi hija me arrastra para mostrarme el estudio.

Giro la cabeza, la veo con ese chico muy acaramelados. Le saca unas dos cabezas.

¿Tiene novio? Imposible, ella no puede estar atada a un solo hombre.

Antes de salir por esa puerta negra, el chico me mira con una sonrisa y la besa.

Mi pecho se comprime, y mi ceño se frunce.

Candela pasa sus dedos por su pelo, una rabia me inunda.

¡Papá! - exclama mi hija a lo lejos-

Salgo de mi trance y camino hasta mi hija.

Mis músculos se tensan, no me gusto nada lo que vi.

No, no son celos. Es envidia, yo debería estar besando esos labios y tocar esa cintura tan peculiar que tiene.

Victoria me hace recorrer todo el lugar, mientras me habla de lo que hizo hoy.

Cuando salimos del estudio, veo a Candela irse con ese chico.

Mi hija sube al auto, habla con su mamá y le cuenta lo mismo que a mí.

Son las seis de la tarde, tengo hambre al igual que Victoria.

¿Querés que vayamos al mac? - le pregunto mientras doblo en una esquina-

Niega con la cabeza, entonces voy directo al departamento.

Mamá dice que tenes novia, ¿es verdad? - pregunta mi hija curiosa, frunzo el ceño-

No - respondo- ¿Tu madre tiene novio?

Negó mirando a otro lado, no sabe mentir.

¿Cuando vas a vivir con nosotros? - pregunta nuevamente sin mirarme y un dolor en mi pecho se aproxima-

Rumors | Leandro Paredes Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora