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Draco Malfoy.

Al día siguiente por la noche, volvimos a patrullar, fue algo rápido, y solo tuvimos que quitarle puntos a unos chicos de Gryffindor que estaban corriendo por las escaleras. Amélie y yo nos despedimos para dormir, entre a la habitación y espere unos minutos para volver a salir esperanzado de no encontrármela.

Me escabullí con mucho cuidado hasta la torre de Astronomía, donde ella estaría.

—Mira Pansy he pensando que necesitas decirle a tus amigas sobre Luna, así ellas podrían ser aún más útiles que yo.—comente mientras me acercaba a ella.— Sinceramente, no sé nada de eso, y solo vengo a escucharte a hablar de Luna, y Luna aquello...—me quedé callado al ver que lloraba.—¿Por qué estás llorando?

—¿Por qué soy tan tonta?

—¿Por qué dices que eres tonta?

—Quiero mucho a Luna, y-y... no soy lo suficientemente valiente como para darle su lugar.—explica.—¡No puedo decirle a las demás!—solloza.— H-Hoy a lo lejos vimos a Luna estaba buscando creo que unos zapatos suyos, las chicas se empezaron a burlar de ellas, y yo.. no supe que hacer. Ni supe que decir, se que debí haber dicho algo.

–Bueno, creo que sí fueran verdaderamente tus amigas no se burlarían de la persona que te gusta.—dije yo.— Ya ves Amélie cuando salía con Weasley, muchos de nuestra casa se burlaron de ella por fijarse en el, y ella no le tomo importancia y hasta lo defendió, muchas veces.

Hasta yo me burlaba de aquella relación. Y creo que lo haría cada que me acordara de eso.

—No puedo, sinceramente no puedo.—negó rápidamente, río flojamente.— No se en que momento cambio todo, y estoy hablando con Draco Malfoy sobre enamorar a alguien más.

—Bueno, sí te ayuda... yo tampoco me lo hubiera imaginado, pero.—me encogí mis hombros.— Se lo que se siente estar solo y no tener a nadie con quien platicar y decirle como te sientes, así que creo que por eso estoy aquí.

—He pensado en decirle a mis padres, en navidad.—confesó secándose las mejillas.– Luna me platicó que ya hablo con su padre, me invitan para vacaciones, así qué tal vez hable con mis padres.

—Eso.. eso es bueno.—sonreí apretando mis labios.—¿No lo crees? Ya no tendrás que ocultarlo.

—Tienes razón.—sonrió flojamente.— Aparte, así podrás estar tu con Amélie.

—La invite a una cita.—le comente, ella abrió su boca sorprendida.— Y bueno, tal vez después de vacaciones si se acaba todo esto, le pediré que sea mi novia.

—Eso es bueno Malfoy.—confesó.—se cuanto has estado esperando para hacerlo. Al menos podrás ya estar con ella una vez que todo se sepa.

Y era verdad, el solo pensar que ya podríamos estar juntos... el que tengo una segunda oportunidad me hacía sentir bien. Sabía que esta vez no lo arruinaría, y no dejaría que nadie nos separara de nuevo.

Mucho menos mi padre.

—Sí.–volteé a ver el castillo, y entrecerré mis ojos, vi a dos chicos altos corriendo de puntitas junto con una chica algo chaparra tras ellos, humedecí mis labios, no se podían distinguir muy bien.—Al parecer hay personas fuera de sus camas.

—Mmm.—volteo a donde yo estaba señalando.—Creo que son los Weasley ha de ser Angelina la que va con ellos.

—Angelina no es tan chaparra.—comenté queriendo distinguir quiénes eran.

—Bueno, quien sabe.—no le tomo importancia, volteé una vez más pero ya no estaban.

—Han de estar haciendo alguna broma.—dije bufando.—Tendré que ir a revisar.

Tenías que ser tú. |Draco Malfoy| TERMINADA. [#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora