SAUDADE- DOMKAT (COMPLETA)

22. TU MANO

"Me enamoro mil veces al día.
Y todas son de ti"

KATHERINE
-Tenemos que hablar- tenía un nudo en la garganta. Quería llorar.

-Dom

-Espera, escúchame- me empujó dentro del departamento y cerró la puerta- sé que no quieres verme, ni hablarme. Y es.. Entendible porque te oculté esto y, bueno, también entraría enfadada si lo hubieras hecho.

-Dom, no estoy enfadada- le corté caminando hasta la sala- Al menos no contigo- me crucé de brazos y la vi caminar hasta mi con el ceño fruncido.

-¿Por qué no quieres hablar conmigo, entonces?- sonreí al verla curioseando en mi estado de ánimo con ese tierno puchero.

-Porque no quiero arruinarlo, Dom. Porque sé que no podré controlarme si hablamos alteradas o afectadas por lo que pasó. Y prefiero evitarlo. No quiero dañarte- Sonrió con ternura y se acercó a abrazarme.

-Kat, no va a ser nuestra ultima pelea..

-No, cuando tu amiga gusta de ti y te coquetea en mis narices- giré los ojos y la escuché reir.

-Te ves tan linda celosa

-No estoy celosa- la miré seria

-y también muy, muy provocativa- se mordió el labio y miré al techo, ignorando el gesto que hacia. Me estaba haciendo la difícil, si. Pero también quería hablar. Y aclarar las cosas para evitar malos entendidos mas adelante- Ya no estes enojada conmigo, por favor.

-No estoy enojada contigo, Swettie- suspiré y acaricié su mejilla para caminar con ella al sofá- No es por ti, ¿okey? Lo que pasa es que...- me quedé callada y la miré. Dom sonrió, animándome a hablar- Te amo, ¿Vale? No se como tomar todo lo que nos pasa cuando no estamos solas, y cuando alguien te coquetea de esa forma frente de mi. De algún modo, me siento molesta conmigo misma, por el hecho de que, si me alejara por completo de Ray, podríamos estar públicamente juntas. Pero mi generosidad no me lo permite. Siento rabia conmigo misma, porque ella puede hacer lo que yo no- suspiré al termine de hablar y solte sus manos para llevar las mías a mi rostro.

-Ey, ey- Dom las alejó y me atrajo hacia ella abrazándome. La escuché soltar una risa floja y me alejé mirándola mal. Estaba sonriendo. Levante una ceja- ¡Perdon! es que... es bobo que pienses de esa forma, Kat. Mi novia eres tú y Dios, si supieras cuanto amo cada una te tus cualidades, no te quiero cambiar, jamas lo haría- acaricié su cabello, luego su rostro- en serio pensé que me terminarias, Dios- se tapó el rsotro con las manos y esta vez me rei yo. Me miró mal- No es gracioso, Katherine- me reí mas fuerte al escucharla decir mi nombre completo.

-No te iba a terminar, Dom. ¿Crees que te dejare ir tan fácil después de todo?- me acerqué a ella mirándola fijamente.

-¿Así que no le dejarás el camino libre a la pobre romina?- mi cara se descompuso al escucharla nombrar.

-Ni en sus mejores sueños- ella rió y se acerco a darme un beso tierno- que por cierto, ¿Cómo es que...?

-La dejé en el restaurante, le dije que tenia algo importante que hacer- me interrumpió acariciando mi cabello. Asenti- quiero que te quede clara una cosa- se acomodó en el sofá y me miró. Asentí- Soy tu pareja, tu novia, y estoy aquí para estar en cada etapa que tengas. Yo no quiero que te alajes de mi cuando te enojes, porque quiero conocer todo de ti. Muéstrame esa parte de ti, que aún me falta por explorar- cerré los ojos mientras sentía sus caricias suaves en mi rostro. Sonreí- Muestrame todo de ti, Kat.

-Lo siento, tienes razón. Lo siento- tomé su mano y la besé algunas veces- Solo que no quería arruinar lo nuestro con mis cosas y celos.

-Uhm, celos- hizo un sonidito y reí.