Siempre Fuiste Vos (Neji y tú/vos)

♧ XXXIV ♧

Una vez lista salgo del departamento y me voy a un lugar para poder entrenar sola. Yendo me encuentro a Sakura

- _____- me llama- quería disculparme. Anoche estaba mal, no quise decir eso, pero ahora me siento mejor con lo que me dijiste, tenés razón, sin esfuerzo no se logra nada.

- No pasa nada Sakura, en serio- le sonrio.

- Menos mal- se alivia.

- Sakura, te dejo, tengo cosas que hacer ¡Y olvidate de Sasuke!- luego de esa mini charla, llego a mi destino.

Invoco a Kae y aparece frente a mi.

- Ohh _____- exclama él.

- Holaa- le sonrío- tenía una pregunta para vos.

- Dígame, señorita.

- Sin formalidades- insisto- Kae ¿ustedes tienen algún tipo de entrenamiento para mi clan?- pregunto esperando una respuesta.

- Ahh- suspira- no tenemos nada de ese estilo. Su clan ya es bastante fuerte de por sí.

- Está bien- sonrío como respuesta- ¿me llevás a la oficina del Hokage? Tsunade tenía unas cuantas misiones para mi que aún no suspendí.

- Si, vamos- él se agacha para que me suba a su espalda.

Llegamos a la oficina y él de desvanece.

- _____ al fin, te estaba esperando- dice Tsunade al verme- vas a tener que ir a la Aldea de la arena. Te necesitan allá. No es nada complicado, solo necesitan gente de otras aldeas para poder enseñarles a sus estudiantes.

- Está bien ¿cuando tengo que ir? ¿Cuanto va a durar?

- Un mes o dos, más o menos- explica- y partís ahora mismo. Andá a preparar tus cosas.

Ella se despide de mi y me voy. Una vez que tengo todo preparado me voy a la mansión Hyuga para avisarle a Neji. Luego parto.

~~♡~~

La misión fue más divertida de lo que imaginé. En apenas un mes y medio la relación con Gaara, Temari y Kanguro mejoró bastante. Ellos eran muy buenos conmigo, sobre todo Gaara, le gusta tener amigos y me alegra ser uno de ellos.

Hoy, después de bastante tiempo, vuelvo a casa. Al fin a casa, extraño a todos.

- Adivinen quien llegó- me detengo en la entrada.

Veo a Velen con Kiba en el sillón, Valen está agachada...

- Tienen una pieza, no se que hacen en medio de la casa- los ignoro y me voy al cuarto para agarrar algo de ropa e irme a bañar.

En medio de la ducha comienzo a pensar ¿Desde hace cuánto están juntos? La última vez que los vi no eran nada.

Salgo de la ducha y me cambio, luego peino mi pelo adecuadamente. Una vez lista salgo y ya no los veo en el sillón. Estarán en la habitación de Velen.

Feliz, voy hasta la mansión Hyuga. Hinata me abre la puerta principal y me saluda enérgicamente, está feliz por algo.

- ¿Qué pasó Hina?- le pregunto con una sonrisa en la cara una vez que estamos adentro.

- Naruto...- ella suspira enamorada y opta por contarme todo desde el principio- viniste a ver a Neji ¿no? No te quiero interrumpir- ella juega con sus dedos.

- No te preocupes, hace unos meses no que lo veo, unos minutos no hacen la diferencia.

- Entonces, te cuento- dice mientras prepara el té- Naruto y yo estuvimos saliendo varias veces- Hinata está roja- hoy dijo que me tenía que decir algo importante- sonrie feliz.

No lo puedo creer ¿adelanté la historia? ¿Pasará algo? ¿Y si no tienen a Burrito? Bah mejor.

- ¿Ah si?- pregunto- ¿y qué será?- me hago la boba.

- No se- ella me da el té- ¿y si dice que no quiere verme más?- se preocupa.

- No te va a decir eso, Naruto no es así- la tranquilizo- ¿cuándo te tiene que decir eso?

- Nos vamos a ver en 10 minutos, tendría que ir saliendo, pero no te quiero dejar sola.

- Vaya con su futuro novio- ordeno y ella se pone totalmente roja.

- Si- se levanta y antes de irse me saluda.

Salgo al patio y veo a Naji entrenando con su tío.

- ¡Neji!- grito tu nombre y lo subido con una mano.

El mira me mira con los ojos abiertos, luego ve a su tío, este le dice que si con la cabeza y viene hasta mi con una sonrisa.

No llega a la mitad del camino y voy corriendo hasta él para abrazarlo fuertemente.

- Te extrañé mucho- me susurra al oído.

- Yo también- me pongo de puntitas y le dejo un beso en los labios.

Él pone una de sus manos en mi cachete y me acerca para darme un beso largo.

- ¿Sabías que te amo?- pregunto.

- Si- contesta con una sonrisa para después abrazarme más fuerte- vení, vamos a un lugar más privado así me contas como te fue.

Ambos nos vamos a su habitación, en el camino le cuento como fue la relación con los chicos y la administración que me tenían algunos pendejitos.