Secretos (Zayn&Tú)

Capítulo 18

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Una vez que llegaron los chicos a la casa, llegaron con más sueño que nada, pero en cuanto les dije “mi madre y yo cocinamos hamburguesas, sandwiches, galletas, pizza, tacos, alitas, papas a la francesa y donas…” ni me dejaron terminar que hasta corrieron a la cocina y solo se oía el ruido de los platos de porcelana dentro de la cocina pero el ruido era audible en toda la casa.

Cuando entré a la cocina todo se estaba acabando muy rápido y vaya que mi diagnóstico fue el correcto: Niall se sintió satisfecho cuando aún quedaba comida para los demás. Excelente.

Yo quería una dona porque yo amo las donas al igual que la pizza y el helado *m* pero vi que solo quedaba una y que Louis la quería.

-Quédatela, yo mañana hago más :) - le dije amable

-No, mejor tú cómetela. Yo puedo aguantar a otro siglo si tengo que esperar otro siglo para poder comer una dona. Prefiero que no te quedes con el antojo :) - dijo Louis con una voz dulce

-No, en serio, cómetela tú. Yo puedo hacer más.

-A mi no se me antoja tanto

-Pero tú vienes del estudio cansado. Mejor cómetela tú

-Te va a salir un granito si no te la comes, ____. Cómetela, insisto. No la necesito. Prefiero que no te quedes con antojo.

-Louis, de verdad cómetela tú. Hasta hay chocolate caliente para que te la comas agusto.

-Dénmela a mi - dijo Zayn quien arrebató la dona de la mano de Louis y se la echó a la boca

-¡Oye! ¡Esa era de ____! - dijo Louis fingiendo enojo y sorpresa

-Lo siento pero es que las donas de ____ están muy deliciosas como para dejarla en aire esperando a que alguien decida comérsela

-Jajaja - reí

-¿Alguien quiere ver una película? - preguntó Liam desde la sala y automáticamente todos fuimos hacia la sala. No me sorprendí al ver el título de la película “Toy Story” porque bueno, Liam ama Toy Story.

Mientras estábamos viendo la película sentí que una mano me tocó la pierna. Todos estaban tan concentrados en la película que nadie lo notó más que el que me tocó y yo. Subí la mirada por el brazo con el que se conectaba la mano y poco a poco por los tatuajes reconocí a esa persona: Zayn. Le sonreí y me devolvió la sonrisa. Puse mi mano sobre la suya y me dijo en el oído

-Tenemos que hablar