SAUDADE

Capítulo 4 (Final)

Había estado vagando por las calles cercanas a su departamento desde hace ya varias horas, asimilando todo lo que había sucedido por la noche y lo cual no lo había dejado dormir después de ver como Chanyeol se marchaba velozmente, dejándolo solo en el obscuro espacio de la habitación.

Después de la partida de su ahora exnovio en medio del llanto, se había quedado totalmente pasmado debido a lo rápido que había sucedido todo, él gritándole a Chanyeol, los reclamos del alto y su rostro agónico, pero sobre todo aun podía escuchar en su cabeza el susurro lastimero con el que Chanyeol había terminado toda relación con él, después de eso no pudo pegar el ojo durante las horas nocturnas sobrantes y las vio pasar lentamente, sentado sobre la silla de su pequeño escritorio mientras observaba la obscuridad del cielo, porque esa noche la ausencia de la luna y las estrellas era notoria, finalmente cuando vio los primeros rayos del sol traspasar la ventana, tomo su abrigo, sus llaves y salió del departamento en busca de aire fresco.

La situación se le había salido de las manos por completo, todo este tiempo en el que decidió aislarse del pelinegro para plantearse la idea del cómo decirle acerca de su ruptura en realidad fue como poner una bomba de tiempo a su relación, y ahora que había terminado la cuenta regresiva todo se había esparcido en innumerables fragmentos.

Así paso el resto de la mañana, caminando por calles, avenidas e incluso pequeños parques a su paso mientras pensaba en cómo resolver la situación que había provocado, pero nada tenía sentido, incluso si se plantaba frente a Chanyeol y pedía perdón no sería suficiente para borrar el dolor que sus acciones habían causado en el alto. Las ideas eran desechadas tan pronto terminaba de visualizarlas y éstas poco a poco terminaron agotando su creatividad para planear algo que realmente valiera la pena. Totalmente frustrado por su falta de ideas y ánimos decidió regresar a su departamento, donde al atravesar la puerta pudo sentir la soledad del lugar de manera abrumadora.

Podía escuchar el sonido de sus pisadas al caminar, la luz que entraba por las ventanas era poca debido a la hora y la posición del sol, estaba acostumbrado a llegar a casa y encontrar el departamento vació como ahora, sin rastros de Chanyeol, pero esta vez era diferente, había algo que lo hacía sentir inquieto. Recorrió con la vista cada rincón de la sala y de reojo también pudo observar el espacio de la cocina, el lugar estaba tal y como lo dejo antes de marcharse, pero esa sensación de que algo faltaba seguía poniéndole los nervios de punta. Entonces las palabras de Chanyeol llegaron a él como un recuerdo fugaz, "Mañana vendré por mis cosas, volveré a mi departamento porque no pienso quedarme aquí, viviendo bajo el mismo techo que tu", tal vez era algún suceso de efecto retardado, pero en ese momento pudo sentir como esas palabras calaban profundo en él y a comparación del efecto que habían tenido durante la madrugada, el de ahora, había sido más doloroso.

Sin pensarlo dos veces corrió hasta su habitación en busca de esa respuesta a la pregunta que su mente exigía, atravesó la puerta y camino con rapidez hasta el armario para abrirlo de un solo golpe, el aire abandono sus pulmones cuando pudo confirmar lo que temía, dentro solo se encontraban sus prendas y junto a ellas el espacio vació que pertenecía a Chanyeol. Aun creyendo que lo que había visto no era más que una mala broma decidió echar un vistazo al baño, al buro junto a la cama e incluso a la zapatera que estaba a un lado de la puerta principal donde ambos guardaban sus calzados, pero era inútil, las cosas del alto no estaban en ningún lugar del departamento. Chanyeol había cumplido su palabra de marcharse sin mirar atrás, llevándose con él solo lo que fuese necesario, y claramente Baekhyun ya no lo seria en su vida.

Una corriente de angustia recorrió su cuerpo de principio a fin al pensar en la idea de no tener a Chanyeol junto a él y permanecer en aquel lugar siendo acompañado solamente por su soledad. La liberación que esperaba tener cuando la relación con el pelinegro terminara no estaba en ningún lado, y contrario a eso se sentía ansioso y perdido.