Capítulo 11 "Pídeme lo que quieras" (Eunhyuk)

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-Oye, voy a tener que pedirte una cosa.

-Dime.

-Sé que siempre me ayuda Siwon a ducharme, pero hoy no ha tenido tiempo… Y tengo calor… He pasado el día sudando… ¿Puedes ayudarme?

Se me cayó la pizza a la alfombra. ¿Yo ayudarle a ducharse? Había delegado esa tarea en Siwon y él la había aceptado porque sabía que no era capaz de hacerlo. No era capaz de mirar a Donghae en ese momento y ayudarle. Pero me lo estaba pidiendo él. Si le decía que no, quedaría raro. Se suponía que era su mejor amigo. ¿No?

-¿No puedes esperar a mañana?

-Si estás muy cansado es igual. Me aguanto.-volvió a sentarse- A veces no tengo en cuenta que trabajáis todo el día y yo solo os doy faena.

-No es eso. Va, que te ayudo.-mi boca había hablado y mi cerebro quería matarla.

Ahora no me libraba. A ver cómo salía yo de esa. Fuimos hacia el baño y lo dejé allí sentado. Luego fui a por su ropa interior y su pijama y volví con él.

Ya se había empezado a desnudar. Bueno, se había quitado la parte de arriba del pijama ya que era de botones y podía hacerlo sin que le doliesen las costillas, y se había bajado los pantalones y los boxes hasta las rodillas, estando sentado en el baño.

Tragué saliva e intentando no mirarle, terminé de quitárselos. Luego le tendí la mano para que se sujetara.

-Solo necesito que estés por si me resbalo. Ducharme puedo solo casi todo. La espalda y las piernas no puedo… Bueno, en realidad no puedo ducharme solo. ¿No?-se rió para quitarle hierro al asunto- Sé que debe ser incómodo para ti. Siento tener que pedirte esto…

¿Incómodo? No sabía hasta qué punto… Pero no en el sentido que creía. El pobre creía que era porque me avergonzase mirarle, pero mi incomodidad era por verle y querer entrar en la ducha junto a él. O de excitarme y no poder explicarle el motivo y quedar como un pervertido. Esa era mi incomodidad.

-Tranquilo… No pasa nada. Antes ya nos habíamos visto.-comenté.

-¿Si? Imagino que tendríamos mucha confianza.

-No sabes cuanta…-susurré.

-¿Qué has dicho?-inquirió abriendo el agua.

-Que sí, que todos tenemos mucha confianza.

Cogió champú y empezó a lavarse el pelo. Acto seguido puso champú en la esponja y me la pasó. Yo no dejaba de mirarle el pelo, ya que estaba de espaldas a mí, pero cuando me pasó la esponja… Empecé a frotarla en su espalda y a bajar poco a poco hasta su cintura y mis ojos… ¡Joder! Mis ojos fueron a su culo. A ese perfecto y bonito culo que tenía y que tanto me gustaba. Bufé intentando controlar mis latidos y otra cosa… Y seguí bajando, frotando sus piernas.

-Dame, por delante puedo yo.

Me llega a tocar frotarle sus partes y me pego un tiro. En cuanto me quitó la esponja me ladeé y me miré al espejo. Bien, lo llevaba controlado. Por el momento. Todo iba bien…Y así seguiría. Eso es.

Al terminar le pasé la toalla y se tapó para que le ayudase a salir. Me tocó secarle también las mismas partes que había frotado y luego le ayudé a ponerse la ropa. Creo que ese día hice ahínco de todo mi autocontrol. Nunca imaginé que podría soportar eso sin gritar. Pero esa noche iba a tener que ir al baño solo a desahogarme. Eso lo tenía claro. Porque podía controlarme como media hora a lo sumo. Así que en cuanto le dejase en la cama, yo volvería al baño.

Puse a lavar su ropa mientras él iba hacia el cuarto y noté como mis pantalones empezaban a apretarme. Y…de qué forma. Pero aún tenía que volver a ver que estuviera bien antes de aislarme en el cuarto de baño. Lo mejor era ir, asomar la cabeza solo y si todo iba bien, irme directito.

Eso hice. Asomé la cabeza y la erección desapareció de golpe. Y no solo eso. En su lugar, empecé a llorar como un tonto. Donghae estaba de espaldas a la puerta, mirando algo en el escritorio mientras cantaba… Cantaba….

-Igeon jinsimiya Baby neoro gadeukhan nae soke gaseume ne soneul daebwa dugeungeorineungeol. Eres  todo mi corazón…Mi corazón se siente completo contigo, pon tu mano en mi pecho, siente como mi corazón está latiendo.

Abrí la puerta y él se giró.

-Hyung, llevo días con esa canción en la cabeza. ¿Es nuestra?

En vez de responderle con una respuesta normal, lo hice de la forma en que me salió. Cantando también… A pesar que no cantaba bien, a pesar que lo mío era rapear, solo pude responder de esa forma.

-Siempre pienso en ti, cuando estoy dentro de un día difícil  en el mundo. Me haces sentir vivo en mi ajetreado día. Después de extraviarme por un largo tiempo he estado perdido sin ti, ahora me siento tranquilo e inesperadamente sonrío. Olvida la cortina de oscuridad, sostén los sentimientos. Cuando estas frente a mí, haces desaparecer mi tristeza. Aun no puedo decirlo, agacho mi cabeza y tiemblo al decir que te amo más que a nadie, solo tú, y yo, y yo, y yo... estoy realmente feliz ahora, te agradezco sinceramente que hayas venido a mi, gracias por amarme como lo haces solo tú, y yo, y yo, y yo... exactamente tú.

Se quedó pálido mirándome. Y durante una fracción de segundo creí ver a mi Donghae. Él había recordado la canción. Nuestra canción. La que él me había cantado por teléfono… La que hizo que nuestro mánager nos pillase… Esa canción que para mí significaba tanto…La había recordado. Entré en el cuarto y le abracé. Le abracé y lloré con ganas mientras suplicaba porque mi Donghae estuviese realmente de vuelta.

-Hyung…¿Qué te pasa? ¿Por qué lloras?-inquirió y por su voz supe que estaba empezando a llorar también.

-Has recordado la canción.

-Entonces…¿Es nuestra?

Asentí soltándole. No, Donghae no había vuelto, pero si un pequeño pedazo de él, y con eso, por ahora me conformaba. Aquella pequeña muestra de luz me hizo darme cuenta que podía volver a tenerle. Allí estaba Donghae y quería que fuese mío. Que volviese a serlo. Quería poder besarle, poder abrazarle. Poder decirle aquello y que me entendiese. Cantarle esa canción y que entendiese el mensaje.

Me sequé las lágrimas con el dorso de la mano y luego le sequé las suyas.

-¿Por qué lloras tú?-inquirí.

-Porque te veo llorar…

Sonreí ampliamente. Las fuerzas habían vuelto a mí. No iba a rendirme. Ya no. El Eunhyuk molido había desaparecido. Porque tenía delante esos ojos que cuando los miraba me decían que eran míos. Que eran los mismos que había mirado tantas veces.

-No llores. Estoy bien. Mejor que nunca.

-Pero…

-¿Sabes? Esta noche me has hecho un regalo.-dije.

-¿A si? ¿Cuál?- el pobre estaba desconcertado.

-Eso no importa. Pero a cambio, pídeme lo que quieras.

-¿Lo que sea?

-Sí.

-Quiero escuchar esa canción…

Sonreí aún más y asentí. No sé cuántas veces escuchamos All my heart esa noche… Perdí la cuenta y al dormir, creo que ambos soñamos con ella, porque Donghae no se despertó con ninguna pesadilla. 

¿Amor o amistad? Segunda parte. (Super Junior-Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora