En un sueño que no
puedo olvidar,
cuidé una flor que no
puede florecer
—Fake LoveUna semana después, Kim Seokjin no esperaba para nada que al regresar a su casa después de un agotador día de escuela, sus maletas estuvieran en la puerta.
Nisiquiera estaban sus padres para darle una explicación. Solo estaba él mayordomo con las maletas, una copia de la carta enviada a la escuela por sus padres con la cual estipulaban que dejarían de pagar sus estudios y por último, un mensaje que el mayordomo le daría como vocero de sus padres.
—"No queremos un homosexual en la familia"— El empleado apartó la mirada apenado por comunicarle tales palabras al joven Kim.
Nunca había desarrollado una relación más cercana con sus padres, amorosa, amigable o de otra índole. Pero aún así, saber que sus padres lo apartaban como un desconocido sin remordimiento alguno, dolía
Ya había dejado claro que él detestaba sentirse ignorado, rechazado y apartado como si fuera molesto o una piedra en el zapato. Pero también desconocía como se habían enterado sus padres de su aparente homosexualidad.
Pero, siceramente...Él no era homosexual, ni heterosexual, ni bisexual. No podía darle una categoría al amor que sentía por Namjoon, porque al final del día eso era, amor. Dos personas que se querían y que ya no podían estar separadas.
Comenzaba anochecer y no quería molestar a sus amigos con una situación como esa, después de todo los padres de sus amigos eran iguales a los suyos.
Por otro lado, ya no tenía nada. Ni su moto, ni su computadora, mucho menos su carrera universitaria. Pero eso no le importaba, después de todo él quería revelarse en algún momento. Solo contaba con su ropa que tan amablemente había empacado el mayordomo para él.
Las rueditas de la maleta rodaban por la acera mientras la helada noche lo acompañaba. Preocupado, decidió pedirle ayuda al entrenador Seo Hyusook.
Así que ahí estaba, frente a las puertas de la casa de Hyusook. Estaba al lado del gimnasio y eso le facilitaba el trabajo al entrenador. Aferró sus dedos a su única mochila –pesada por los libros del día– y detuvo su maleta más grande de rueditas que contenía su ropa.
Parecía un cachorro pidiendo una cama cómoda para dormir
Hyusook abrió la puerta y lo observó sorprendido mientras sostenía una tasa de café en su mano derecha.
—"¿Me permites quedarme está noche?"
Hyusook resopló —"Dejá de comportarte tan vergonzosamente y entra"
Seokjin bajó la mirada y entró. La conocida casa de su entrenador era muy diferente a su lujosa mansión.
Era aunque más pequeña , cálida
—"Puedes usar tu habitación"— Informó Hyusook
—"¿Mi habitación?"
—"Le digo de esa forma a la habitación de invitados, desde qué te encerrabas en ella para no ver a Namjoon" — Hyusook río —"Venía al gimnasio para reclamarte por meterte con sus novias. Y tú te escondías, seguramente masturbándote mientras pensabas en él luego de una pelea"
—"¡Oye! ¡Yo soy un cerdo decente!"— Alegó, completamente sonrojado —"¡Y de todos modos no hacía nada de eso!"
—"Sí sí. Te creó"— Ironizó. Alzó sin mucho esfuerzo la maleta de rueditas y subió las escaleras en dirección a la habitación de Seokjin. Él castaño lo siguió llevando su mochila con sus libros y pronto, ambos estaban en la habitación de invitados. No tenía decoración alguna en sus paredes y solo contaba con una cama, una mesa de noche y un armario fijado a una de las paredes.

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Besos Bruscos - [Namjin]
Fanfiction🏆Ganadora de la medalla de oro en los premios Trouble Cube Awards 2020🥇Escrita en 2020 Seokjin quiere ser boxeador y Namjoon capitán del mejor equipo de fútbol americano. Seokjin solo busca sexo y Namjoon está enamorado de una animadora. Entonces...