▪ Al final el horror y la belleza conviven en la misma proporción en el barrio alto que en el barrio bajo.▪ No te dejes tragar por la monotonía. ¡Sal a la calle, sal a la vida! Busca la aventura, busca algo que te llene.
▪ El hombre aprende de sus errores pero el hombre inteligente aprende de los errores de los demás.
▪ Tienes que vivir a tope porque llegará un día en que mirarás atrás y verás que no hay nada digno de ser recordado.
▪ No quiero un hombre que se emocione viendo lo que otros hacen. Quiero alguien que no vaya a la ópera, quiero que escriba las óperas. Quiero a Beethoven, joder.
▪ Eso de escribir que dices que haces, me gustaría ver el resultado. A ver si eres lo que quiero o no
▪ —Haremos algo para que vivas lo mejor posible el mayor tiempo posible. —Gracias, pero no le des más vueltas, ya he vivido todo lo que tenía que vivir. He bebido y me he divertido. El cuerpo dice que hasta aquí hemos llegado, y aquí paz y después gloria.
▪ Piénsalo, ¿quieres estar a la sombra de tu suegro toda la vida?
▪ ¿Podré hacerlo? ¿Sería capaz de matar? Yo no soy así.
▪ —Todo el mundo es capaz de matar, cariño; es cuestión de verse en una situación límite, de encontrar la motivación.
▪ Entre ensoñaciones notó la codicia emponzoñándole el alma
▪ Eso del mafioso justo y de buen corazón que cumple su palabra es una leyenda.
▪ Se puede ser un asesino sin ser rastrero.
▪ Sentía el peso del dinero en la espalda y el remordimiento en la cabeza
▪ —Me he convertido en un asesino en apenas cinco segundos
▪ No hay glamour en lo que he hecho, no hay épica…
▪ Me dice algo así como: «Me mataste como si fuera un perro», y también dice: «No te preocupes, tú no eres un asesino, solo eres un cobarde». Luego se va.
▪ —¿Tú lo harías? —Se secó las lágrimas con las manos.
—¿Matar por dinero?, claro que sí; por nosotros, por supuesto que sí.▪ —¿Qué harías tú por mí? —¿Te parece poco encubrirte en un asesinato? Soy tu cómplice, recuerda.
