3.020.1

5.7K 505 116
                                    

Aclaración: los sucesos de este capítulo pasan antes del anterior, pero desde el punto de vista de Tess. Lo que esté escrito en cursiva son flashbacks

Capítulos finales

—¿Cómo te atreves a venir, maldito idiota?- cuestiono empujándolo desde atrás- Nos arruinaste la vida y aún así vie...

Mis palabras se atoran en mi garganta, su cuerpo cae sobre mi y ambos chocamos contra el suelo. Asustada veo la sangre brotar de su pecho, dejando un camino hasta la botella en la mano de Valerio.

Lucrecia se deja caer en sus rodillas, sin soltar la mano de Polo, su expresión es de terror.

—No, no, no, Polo.- llevó mi mano a su herida, él recarga su espalda en mi pecho- ¿Qué hicimos?

—Yo...no quería.- Valerio cae de centón tirando el arma al suelo- Lo juro, no quería.

—Lo sé.- murmura apenas con su respiración calmada- Tessie...

—Llama una ambulancia.- ordeno llorando- ¡Valerio, por favor!

Los oscuros ojos de mi hermanastro, llenos de culpa y tristeza me ven, diciéndome que ya era tarde.

—Perdónanos, perdónanos.- repite Lu entre sollozos- No queríamos.

—Llamen a una ambulancia, por favor.- hago más presión pero la sangre no deja de brotar- Polo, no me hagas esto.- sus azulados ojos me observan con intensidad-  ¡Llama una puta ambulancia!

—Está bien, Tessie.- su mano deja de tocar su pecho para acariciar mi mejilla- Todo lo malo, la tristeza y desesperación, desaparecen cuando estás conmigo.

Mi llanto se vuelve más potente, esto era mi culpa, mi vista se vuelve borrosa debido a las lagrimas.

—Oh Tessie, mi dulce Tessie.- canturrea el pequeño Leopoldo- Eres tan llorona y chiquitita.

Me abrazo aún más a su cuerpo al escuchar el trueno, su cuerpo vibra debido a su risa.

—Tengo miedo, Polo.- murmuro escondiendo mi rostro en su cuello- Valerio dice que los truenos suenan porque son los pasos de los gigantes, que vienen por mi.

—Yo te protegeré de esos gigantes.- dice y besa mi cabeza- Y de todo.

Trago con fuerza sujetando su mano, sin apartarla de mi rostro. Lo había matado, había matado a mi primer amor.

—No me dejes, por favor.- junto nuestras frentes, el llanto de mis hermanos es silencioso

Lo único que necesito es que me perdones, por favor.- dice entre jadeos- Yo no quería matarla.

—Lo hago, te perdono, te perdono, te perdono.- repito con dolor

—Te amo, mi muñequita.- sus labios, cubiertos de sangre, se presionan suavemente contra los míos, solo por unos segundos- Siempre fuiste tú.

Se levanta con esfuerzo y a paso lento y tambaleándose sale del baño. Abrazo mis piernas sin dejar de llorar, los brazos de Valerio me cubren repitiendo varios "Lo siento". No pasa mucho cuando el ruido de un cristal sobre pasa la música, seguido de muchos ruidos de pánico. Ni siquiera me muevo. ¿Qué habíamos hecho? Le quitamos la oportunidad de remendar sus errores, él estaba arrepentido.

—Carajo, chicos.- Carla aparece, con su expresión calculadora pero sus ojos tristes- Cariño, nena, tenemos que lavarte.

No hago nada, de mi boca no salen palabras y mi cuerpo no responde. Valerio se levanta, llevándome con él.

ELITE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora