Lagrimas y rupturas

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Daphne Greengrass sollozaba apoyada en el regazo de Blaise, su largo pelo rubio estaba enmarañado, y si sus amigos pudieran ver su cara, verían unos ojos tremendamente rojos y unos labios hinchados.

Pansy le acariciaba el pelo con expresión triste, Elena estaba sentada junto al moreno, y observó a su amiga con lastima.

-No...No puedo creer que... ¿Porque lo ha hecho? No lo...- la rubia se interrumpió a si misma, las lagrimas no dejaban de caer por sus mejillas, y la ropa de Blaise cada vez estaba mas empapada- lo siento...

-Tranquila- dijo el moreno- No preocupes por eso, céntrate en como partirle las piernas a nuestro amigo.

Daphne río entre dientes, hasta que volvió a sollozar con la cabeza entre los brazos.

La puerta de la sala común se abrió, y por ella se asomaron una cabellera rubia y una castaña, que hablaban entre susurros, y se daban codazos el uno al otro.

Theodore quedó paralizado cuando vio la escena que se daba a unos metros de ellos.

Aunque no tuvo mucho tiempo para observar, pues una pelirroja se cruzó en su camino, y le propino un tortazo en la cara.

Sin darle tiempo a hablar, Elena le dio un empujón, otro, y otro mas, empujándolo fuera de la sala común. La pelirroja salió tras el, y cuando el muro se cerró tras ella, habló:

-Eres gilipollas, Nott.

-¿Que he hecho yo ahora?- espetó Theodore- ¿Que le pasa a Daphne?

Elena se mordió el labio con rabia, nunca jamas se habría imaginado algo así de Theodore.

-¿Que que has hecho?- rió- ¡¿QUE QUE HAS HECHO?! ¡NI SI QUIERA SE COMO TIENES LA POCA DECENCIA DE APARECERTE POR AQUÍ!

-¡¿Se puede saber que se supone que he hecho?!

Elena se removió el pelo con la manos, le dedicó una mirada de asco al castaño, y desvió la mirada al rubio que aun permanecía detrás de Theodore.

-Navi me caía mucho mejor- espetó, mirando a Dylan- Daphne te vio besando a esa zorra pelirroja- dijo, volviendo la mirada a Theodore- ¿Como se te ocurre? Se me revuelve el estomago solo de pensarlo.

Theodore cerro los ojos con fuerza- "Mierda"- pensó.

Aquello había sido solo un par de veces.

Tracey Davis había hecho una poción de amor (por que si, aun buscaba la venganza contra Pansy y Elena, y era tan poco original de usar los mismos métodos que la pelinegra), y decidió probarla en Theodore. Como la pelirroja tenia menos de tres neuronas, obviamente esta salió mal, y el ridiculo que había hecho había sido estrepitoso.

Después de eso, Tracey se interesó en el. No era que el tuviera intenciones de hacer nada con la pelirroja, pero Dylan le convenció de que esa seria la única manera de que lo dejara en paz.

Así la invito a pasar la noche con el. Solo fue una vez. Nadie se enteraría nunca.

Pero después de esa hubo otra, y aquello desemboco en que Tracey se lanzara a sus brazos (y labios) cada vez que se cruzaban en un pasillo a solas.

-Tengo que hablar con ella- espetó, intentando apartar a la pelirroja de su camino- Elena apártate.

-No quiere hablar contigo, nadie quiere hablar contigo- espetó- si entras ahí Blaise te cruciara hasta la muerte.

La Serpiente Weasley | Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora