Abrí la puerta, saludaron a JungKook ya lo conocían de algunas veces que acompañó a EunBi al orfanato. La pareja se acercó a la cama y SoMi tomó la mano de Monie.

–¿Cuanto tiempo estará sedada?

–Por algunos días más –vi que Gigi alzó sus brazos para que yo la cargara, así que lo hice– tiene fracturas, golpes en todo su cuerpo y una contusión en la cabeza.

Vi la expresión de enojo e incredulidad en ambos.

–¿Está dormida? –Preguntó Gigi.

–Si, lo está. –Contesté, ella se estiró un poco y dejó una hoja a un lado del cuerpo de mi hermana. Pude ver que eran garabatos de distintos colores y eso me conmovió demasiado. Gigi era una niña muy especial. –Qué lindo, pequeña... ella lo verá cuando despierte.

–¡Si! –Exclamó emocionada.

La pareja quiso salir de la habitación para hablar mejor, por lo que bajamos a una de las cafeterías. Les conté más o menos lo que estaba sucediendo ahora, quedaron impactados al igual que todos al saber que el ex novio de Monie estaba metido en esto. Pero no quise hablar mucho del tema, cada vez que lo recordaba el enojo me embargaba; en cambio les pedí que me contaran como les iba con Gigi.

Me contaron que al principio fue difícil, tanto para ellos como para ella, pero ahora ya se había adaptado. La tenían en una especie de escuela, antes de poder entrar al jardín de infantes, para seguir estimulando su aprendizaje. Me alegraba y me aliviaba al mismo tiempo que Gigi estuviese creciendo bien y rodeada de buenas personas.

Al momento de despedirnos no pensé que lloraría, pero con todo lo que pasaba, mis emociones estaban a flor de piel. Ellos me dijeron que cualquier cosa que necesitara podía llamarlos, ya que yo era como la hermana mayor de Gigi y les agradecí.

La pequeña no quería irse y se puso a llorar cuando me despedí de ella, eso me rompió el corazón.

Volví a la habitación pero en vez de encontrarme a JungKook, el que estaba era JiMin.

–¿En dónde está, JK?

–Justo llegué cuando lo llamaron diciendo que tenía que ir a la universidad. –Me acerqué a él para sentarme a su lado en el sillón. –Me dijo que vinieron los padres de Gigi con ella.

–Si...

–¿Estabas llorando? –Simplemente moví la cabeza en un asentimiento– ¿Por qué?

–Porque la extrañaba y no quería despedirme de ella –expliqué, mientras recostaba la cabeza en mi mano– no se despegó de mi en todo el tiempo que estuvieron aquí y... me alivió el hecho de que esté bien y que SoMi y SeongSu la quieran. –Las lágrimas volvieron, JiMin pasó un dedo por mis mejillas quitando éstas. Lo miré y se veían tan preocupado.

–No puedes ser tan lindo. –Dejé salir de repente, rodando los ojos. Él no se esperó que dijera eso porque se quedó quieto mirándome, pero un segundo después sonrió divertido haciendo sus ojos más pequeños.

–¿Te parezco lindo? –Me abrazó y dejó un beso en mi cuello.

–Si.

Se separó apenas de mi aún con esa sonrisa en su rostro, haciendo que yo también sonriera. Había logrado que dejara de llorar.

–Tú también me pareces linda, demasiado, aunque eso ya lo sabes. –Reí sintiéndome cohibida por un instante, él era el único que lo lograba al decirme ese tipo de cosas. Aunque antes me negaba a demostrarlo, ahora mi cuerpo reaccionaba por sí solo. –¿Te sonrojaste?

•Little Lies. |PJMWhere stories live. Discover now