- Uh -Logró decir antes de aclarar su garganta y pararse correctamente, o lo mejor que podía sabiendo lo que le esperaba- ¿Se puede saber por qué es todo éste acto? ¿Y de dónde salieron ustedes?

- No, no -Interrumpió Harry antes de que Lily pudiera decir algo, la pelirroja cerró la boca y se encogió de hombros- El que hace las preguntas seré yo, y sabes, ahora tengo muchas, muchas preguntas -Aseguró con un tono que hasta podría parecer amigable.

- Y sabemos lo que pasa cuando Harry tiene preguntas -Dijo Lily riendo, Severus trago fuerte, a veces olvidaba que ella era la gemela de Harry, pero cosas como esas se lo recordaban, como el tono malicioso con el que acababa de hablar.

- Entonces Severus -Continuó Harry moviendo su varita entre sus dedos como si estuviera decidiendo qué hechizo utilizar contra él- Debo decir que no estoy de un buen humor, y mientras más rápido hables, mejor -Ofreció como último modo de piedad.

- Puedo jurarte que yo no sabía nada -Aseguró con rapidez- Me enteré hoy de lo que ellos hicieron, juro que te hubiera advertido, pero no es como sí ellos fueron a hablar de eso frente a tu mejor amigo -Rogaba a todos que eso funcionara, que recordarle a Harry que era su mejor amigo lo hiciera desistir del tema.

- Uh, la carta del mejor amigo no te va a servir -Cantó Lily entre dientes

- De los regalos hablamos luego, no -Desestimó Harry con un movimiento de mano y un suspiro- Eres mi amigo Severus, mi mejor amigo, el único que tuve en el mundo muggle, al igual que tú a mí -Su cara se transformó en una melancólica y dolorosa- Y aun así, ahora mantienes cosas lejos de mí, cosas que te preocupan, como sí ya no fuera alguien en quien puedes confiar -Sus ojos parecían emitir un triste brillo que le recordaba levemente a un cervatillo y no pudo evitar que su corazón se estrujara, Lily también lo estaba mirando con la misma expresión, ambos parecían demasiado tristes y le dolió, le dolía en lo profundo de su ser.

- Confío en ti, en ambos, con mi vida -Respondió con sinceridad- Son mis mejores amigos, y sí pudiera protegerlos lo haría y eso es lo que estoy haciendo -Intentó explicar queriendo que sus amigos entendieran eso, que no sintieran que intentaba dejarlos de lado.

- ¿Protegernos de qué Severus? -Preguntó Lily

- ¿Qué te asustó tanto? -Presionó Harry con el ceño fruncido, labios en una mueca y su voz sonando como un susurro preocupado y sí Severus se hubiera tomado el tiempo, se habría fijado que sus ojos verdes estaban oscurecidos.

- Los sangre pura, ellos -Los gemelos se tensaron, Harry palideció, aunque eso no evitó que rezara a Merlín, Morgana, Circe y la Muerte de que se equivocara- Hubo un grupo, algunos...

- ¿Te atacaron? -Preguntó Lily y parecía querer acercarse para verificar sus heridas sin importarle el haber interrumpido a su amigo.

- No, a mí no -Admitió y Harry se sintió levemente perdido para luego enfurecer de golpe, solo la confirmación sacaría su furia- Atacaron a una nacida de muggles, una de quinto -Aceptó casi en un suspiro.

- Pensé que los ataques se estaban evitando entre ustedes por miedo a Harry -Reconoció Lily mirando a su hermano que empezaba a tener un ligero rosa en sus mejillas.

- Eso pasa -Aseguró Severus- Pero no fue un ataque a la vista de otros -Tragó saliva cuando ambos pares de ojos verdes ahora estaban atentos a él- Fue de noche, en la madrugada y, en uno de los cuartos.

- ¿Qué? -Preguntó Lily desconcertada, aún sin haber juntado las piezas por desgracia Harry sí, y esperaba estar cometiendo un error.

- La habían petrificado, y la encerraron en uno de los cuartos de los chicos, esperaron y la atacaron -Susurró como si temiera que alguien le escuchara.

¿Evans?... No, Peverell y ¿Serpientes?Место, где живут истории. Откройте их для себя