Capítulo 5

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                                   1 de octubre 2014

Faltaba poco tiempo para que lo diéramos por desaparecido.

Mi Jefe el Sr. Jhon Manson había decidido que mientras Newman no aparecería yo estaria al frente.

¿Cómo demonios me pide eso?

Debía cambiar mi actitud. En los último días me eh  hecho enemiga de mas de veinte personas en el equipo.

Realmente no voy a sobrevivir así.

Además de tenerme que preparar para hablar con la prensa también debía de decir el nombre del GRAN criminal autor de más de 20 muertes en los último cuatro años.

JASON MACCAN

¿De dónde demonios salió ese nombre?

- ¿Cristal?- volteo- Es hora- Nick me mira serio

El jefe habia decido también, que Nick iba a ocupar mi lugar ahora, ya que era el más calificado para el puesto.

El definitivamente anduvo vomitando alegría todo el día.

¿Y yo? Exacto.

Grandioso para el una mierda para mí.

-¿Cristal?- insistió Nick

-!YA VOY!-  Nick se sobresalto. Solté un bufido - Ya voy- dije más tranquila

Acomode mi blusa y mi falda. Y salí de la  oficina. Nick venía detrás de mí.

A medio camino me topé con el jefe.

-Señorita Brown- Estrechamos las manos- Traje a la mayor cantidad de prensa posible. Todos deben saber lo que esta pasando.

-  Señor- Lo mire seria- Insisto en que usted debe dar la conferencia-

- Jamás. Seria como darme el crédito a mí-

- Esto no lo hice yo señor- le dije fría- Yo no investigue a MacCan ni deduje su nombre sola. De hecho MacCan es quien ha decidido darnos esas pistas.

- Señorita Brown al parecer existe algo que aún no entiende-

-¿Qué señor?-

- Que MacCan no quiere que lo encontremos todos,  MacCan no le ha dado esas pistas a la policía- Me miro serio- MacCan le dio esas pistas a usted.  Porque MacCan quiere que usted sea quien lo encuentre-

-¿Qué?- sonó una voz detrás de nosotros. No recordaba que Nick estaba ahí.

- Sera mejor que usted y el señor Robinson vayan a ese auditorio y digan lo que New York esta esperando-

- ¿Y qué es eso?- Lo miré confundida

- Que tengan fe- Eso fue lo último que me dijo antes de entrar al auditorio.

Respire.

-Es hora- Nick asintió y ambos entramos a la sala.

Realmente había mucha prensa. Demasiada para ser cierto. Periódicos, noticieros y revistas estaban ahí esperando escuchar algo importante.

-¿ Dónde esta Newman?- Una reportera en el fondo pregunto confusa.

Una gran cantidad de murmullos sonaron en el salón.

-Basta- dije en voz autoritaria

Todos se quedaron en silencio.

-Vamos ha hacer esto lo mas rápido posible- le susurre a Nick. El asintió.

- Bien esta conferencia dará inicio- dijo Nick serio.

Subí al podio.

- Primero que nada Buenas tardes a todos y agradezco a la prensa por atender el comunicado.

Muchos de Ustedes se preguntarán ¿Dónde esta Alexander Newman? ¿Y qué hace ella ahí arriba?

Bueno en los últimos cuatro años una serie de asesinatos han invadido New York. La mayoría de ustedes han culpado al capitán del equipo Alexander Newman, lo han tachado de inmaduro y poco preparado- esas palabras sonaron amargas en mi boca- Han hablado de su equipo y han jurado que las muertes y desapariciones son culpa nuestra. Pero ¿y si Newman no hubiera estado a cargo? ¿Acaso creen que el asesino se hubiera detenido?  Déjenme decirles gente conocedora de asesinos,  que un asesino no piensa en quien es el jefe de la policía,  ni quien es el presidente y mucho menos quien es la familia de la persona ha quien va a matar. Un asesino mata y ya.

Un claro ejemplo Robert Hanks. Hanks era según ustedes, el mejor capitán de la policía en el mundo, con Hanks no pasaba nada de  esto ¿Pero quien asegura eso? Y como sabrán el asesino no se detuvo solo por que Hanks era el mejor de todos los policías.

El asesino no piensa. No siente.

¿Pero que tal si dejamos de llamarle el asesino?- Las personas quee escuchaban abrieron los ojos como platos- El día 23 de junio del 2010 recibí una llamada, no fue una plática muy larga ya que la persona solo dijo una palabra MacCan. Esa era nuestra pista MacCan. Hicimos varias hipótesis y llegamos a la conclusión de que MacCan era autor de la desaparicion de Hanks y por eso había llamado. Pero en New York sólo existen 5 personas con el apellido MacCan. La primera esta muerta, tres son niños y dos son ancianos. Ninguno era el MacCan que necesitamos.

Pero. Cuatro años después tenemos un apellido y un nombre. Y todo se lo debemos a que el día 28 de septiembre del año en curso aproximadamente a las seis de la tarde,  Alexander Newman capitán de la policía en New York fue reportado como desaparecido. 72 horas después es reportado oficialmente desaparecido. Y el culpable sin duda alguna es el asesino en serie Jason MacCan quien muy generosamente dejo 15 decenas de rosas y una nota de pésame en cada decena con la firma Jason MacCan.- Murmullos comenzaron  a inundar la sala de nuevo- MacCan es una persona que no tiene cordura ni conciencia, que no ve mas haya de su nariz y que le gusta jugar sucio.

Una mujer en el fondo levantó la mano

-¿Sí?-

-¿Quién sera capitán ahora?- pregunto la mujer seria.

- ¿Acaso no es obvio?- respondí sarcástica. La mujer asintió.

Ahora fue el turno de un hombre de levantar la mano.

Negué con la cabeza. El hombre bajó la mano

- Antes de terminar quiero dejarle un Mensaje a Jason MacCan-Mi jefe se paro de su silla intentando detenerme.  Pero prosegui- Jason MacCan, no se quien o que eres, no se si veras esto o no. Pero me encargare de que llegue a tus odios. Y lo que quiero decirte es simple- Sonreí- No me interesaría ser la primera mujer a la que mates- todos me miraron sorprendidos- Y tampoco me interesaría gastar mi vida buscandote. Y escucha esto MacCan no me detendre ni un segundo hasta que te vea implorando por tu vida y pagando por las vidas de todos aquellos a quiénes dañaste. Yo no te tengo miedo maldito y voy a estar esperando por ti todos los días hasta que alguno de los dos caiga. Pero te advierto que no sere yo.

Después de eso Nick y dos policías más me sacaron del salón.

Pero ya no importaba lo que hicieran. Las cartas estaban en el aire y yo sabía que MacCan se burlara de mí y crera que estoy loca pero el sabía que no tenía miedo.

Y eso para mi ya era una ventaja.

                                     

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