25.- Momentos & Cantarella

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Palabras:
Momentos (JosyM16)
Cantarella (_TimeOver_)

Pareja: YoonMin

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–Creo que quieres emborracharme.

Una copa de cristal es alzada a la altura de los ojos de Jimin quien se distrae por unos momentos en el líquido rojizo, ocultando con ello la traviesa sonrisa que esboza Suga en respuesta.

–Te invité a beber conmigo, emborracharte... esa ya es tu responsabilidad.

–¿Lo es? –Arquea una ceja viendo como el mayor se encoge de hombros haciéndolo reír–. Entonces debería alegrarme de ser un buen bebedor.

–¿Tienes miedo de emborracharte?

–Miedo no, es sólo... –alza la copa en sus manos volviendo a perderse en el color rojizo–. Curiosidad.

–Ni que fuera la primera vez que te emborrachas –vuelve a reír viendo una ligera sonrisa en respuesta.

–Eso es cierto –acepta–, pero sería la primera vez que me emborracho a solas contigo.

La risa de Suga se va atenuando poco a poco hasta dejar una simple sonrisa en sus labios.

–¿Tienes miedo, Jiminnie?

Un escalofrío recorre la espalda del vocalista que lo disimula cruzando una pierna, mirando ahora con atención el intenso brillo que ilumina los ojos contrarios, parece burla, también podría ser provocación y quizás, sólo quizás algo más profundo y oscuro como deseo.

–¿De ti? Claro que no –niega–, ¿debería tenerlo?

–No lo sé, pero... la noche es joven –responde estirándose para tomar la botella de vino y volver a servirse, viendo satisfecho como el menor alza su propia copa hacia él pidiendo por más–. No sé si eres valiente o ingenuo –menciona cuando termina de llenar la copa contraria.

–No lo sé... pero la noche es joven –repite con un toque de coquetería.

Suga amplía su sonrisa apoyando su espalda contra la silla observando en silencio como el menor continúa bebiendo, de forma despreocupada y sin ningún tipo de duda.

–¿Confías en mí? –Pregunta después de unos minutos, cuando nota que el ligero rosáceo de las mejillas contrarias cambian a un rojo más intenso y los ojos del menor parpadean casi adormecidos.

–Siempre he confiado en ti –responde entre un suspiro, alzando nuevamente su copa hacia el otro y frunciendo su ceño cuando este en vez de servirle la quita de sus manos–. ¿Qué...?

–Esperaba aturdir tu buen juicio y conciencia –admite dejando las copas a un lado–, pero si lo hago me convertiré en un tipo de persona que podrías odiar.

Jimin parpadea con lentitud notando como la expresión del mayor cambia de un momento a otro, ya no hay diversión o burla en su mirada, sino que una inesperada tristeza ahora brilla en los ojos de quien levantándose de su asiento, se acerca para arrodillarse frente a él.

–Soy un cobarde que busca sucios trucos para huir de las consecuencias –continúa alzando una de sus manos para amoldarla en la mejilla contraria, viendo como la sonrisa coqueta del menor poco a poco desaparece–, pero el deseo de tenerte es tan intenso como el miedo de perderte y... mi buen juicio fue el que finalmente terminó siendo nublado, lamento mucho hacerte esto.

–No me has hecho nada –niega subiendo una de sus manos para cubrir la que está en su rostro–. Beber fue mi decisión, tú no me has obligado a nada.

–Ingenuidad en su más hermosa expresión... –suspira–. Estoy seguro de que confías tanto en mí que podría ofrecerte Cantarella y la aceptarías sin dejar de sonreír.

–Tú eres el ingenuo si crees que no noté cuando cerraste la puerta con seguro –contesta para sorpresa del mayor.

–¿Qué?

–Aquí no eres el único cobarde –admite apartando la mano contraria de su rostro para poder sostenerla entre las propias–, y tampoco eres el único que ha pensado alguna vez que es más fácil arriesgarse si después puedes culpar de todo al alcohol –sonríe.

–Entonces... tú... –frunce su ceño cuando ve un asentimiento por parte del otro sintiéndose entonces confundido y a la vez fascinado.

–Puedo tomar cualquier veneno de tus manos sólo porque eres tú quien me lo entrega –agrega soltando la mano del mayor–, puedo cerrar mis ojos fingiendo inocencia sólo porque tú eres quien se aprovechará, no es ingenuidad ni tampoco es valentía, soy sólo yo entregándome a tus manos porque mis deseos y mis miedos son igual de intensos que los tuyos.

–Tus palabras suenan muy claras para alguien que ha bebido demasiado –advierte levantándose e inclinándose levemente para nivelar su rostro con el contrario.

–¿Acaso no te dije que soy un buen bebedor? –Arquea una ceja recuperando su sonrisa coqueta–. ¿En serio crees que eso era suficiente para dormir mi conciencia?

–Creo que acabo de caer en mi propia trampa –admite sonriendo extasiado, sintiendo entonces el calor de dos manos en su rostro–, o quizás simplemente ambos estamos demasiado borrachos.

–Si es así, cuando nos arrepintamos tendremos a qué culpar.

–Yo no me arrepentiré.

–Ni yo.

"Si logro arrastrarte hasta un espeso matorral, simplemente invadiré tu cuerpo con el aroma de nuestro sudor mezclado"
-Cantarella.

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Cantarella es un veneno, pero cuando leí esa palabra sólo podía pensar en la canción de Vocaloid (que es una de mis favoritas), así que me inspiré en eso para esta historia aunque tuviera que forzar un poco el uso de la palabra, espero que no haya quedado raro y les gustara el resultado ^^ 💕

[BTS] FicTober 2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora