No sé si es porque va a ver a Aki o Yutori de verdad se está comportando de una manera seria...—Taku pensó con asombro.

—Bueno, gente, ¿entonces qué vamos a hacer mañana?—Aki inició la conversación.

—Nomino a Kuruto para llevarnos.—Nao propuso, mirando hacia éste.

—Por mí está bien.—Kuruto respondió amablemente.

—¿En serio?—Shohei se sorprendió.

—Sí, me tranquiliza saber que—su tono de voz cambió súbitamente—PERO CÓMO LOS VOY A LLEVAR SI TAMBIÉN VOY YO.

—Ah, verdad.—Nao soltó pequeñas risas.

—¡Ya sé a quién pedirle el favor!—Shohei sonrió—Le preguntaré a Hiro de Nocturnal Bloodlust si nos puede llevar. Es más, lo llamaré ahora mismo.

A todos los presentes les sorprendió el entusiasmo con el que Shohei había dicho esto.

¿Aló, Shohei?—Hiro atendió.

Estás en altavoz, sólo te aviso.—Le informó.

¿Con quién tengo el honor?—La voz de Hiro tenía un tono juguetón.

Resulta que Goemon anunció un viaje a Okinawa que tenemos junto a Pentagon mañana mismo, y pues no tenemos quién nos lleve...

¡No se diga más! ¿A qué hora sale el vuelo?

A las siete en punto.—Aki respondió.

¡Hiro, por favor llévanos!—Tamon le suplicó.

Saben que no me gusta levantarme temprano...—Hiro se oía dudoso.

Si nos llevas te regalo un set de pesas nuevo cuando regresemos.—Kuruto le propuso, sabiendo que éste aceptaría de inmediato.

Trato hecho. Espérenme en la casa de Shohei. ¡Bye! —Colgó.

Shohei no parecía tener reclamo alguno acerca de encontrarse en su casa, afortunadamente.

—Vaya...cambió de opinión rápido.—Minpha comentó, algo sorprendido.

—Bien, entonces está decidido. Mañana cada uno irá a la casa de Shohei y Hiro nos recogerá a;;í mismo. Traten de empacar todas sus cosas hoy mismo para que no tengamos retrasos en la mañana.—Aki propuso, levantándose de la silla y listo para irse del lugar.

—¿Entonces ya nos podemos ir?—Taku preguntó.

—Sí...creo que eso era todo lo que teníamos que discutir.—Chizuru respondió.

Posteriormente, Aki, Shohei, tamon y Nao se fueron junto a Kuruto, y los chicos de Pentagon se fueron por separado. Todos tenían el mismo objetivo: preparar sus cosas para mañana. Era muy probable que tuvieran que llevar sus atuendos visuales y su maquillaje para dar entrevistas y aparecer en programas, así que cada quien debía arreglar sus pertenencias debidamente. 


Al pasar unas cuantas horas ya el sol se ponía y el atardecer ofrecía unos colores cálidos.

¿Qué les esperaría a los chicos en su viaje a Okinawa?

Chat entre Tamon y Nao

Yo: Tengo miedo:(

Nao🥰🎶:Tamon, no te preocupes. Siempre te pones así un día antes de subirnos a aviones, pero al final no te pasa nada, ¿cierto?

Yo: Sí, pero...

Nao🥰🎶: Además, el vuelo será menos de tres horas. ¡Estaremos bien, Tamon-chan! 

Yo: De acuerdo:(✨

Nao🥰🎶: Ahora ve a dormir, ¿sí? Mañana tenemos que levantarnos a las cuatro y media como mínimo.

Yo: Okay, buenas noches<33

Nao🥰🎶¡Buenas noches!✨✨ 

✓✓Visto 9:30 p.m.


—¡BEEP BEEP BEEP!—La ruidosa alarma de Aki sonaba. Eran las cuatro de la mañana en punto. Sin caer en el hoyo profundo de "cinco minutos más", se levantó de inmediato y se puso de pie. Observó a su alrededor: todo estaba oscuro, evidentemente, y no se oía ni un sólo ruido. Apreció ese pequeño trocito de paz por algunos segundos y, posteriormente, se dirgió al baño a asearse.

Mientras que cepillaba sus dientes, Aki imaginó algo gracioso pero poco posible al mismo tiempo: tener un concierto en Estados Unidos. Si bien sabía que no era totalmente imposible, todavía la disquera no había podido conseguir una oportunidad para llevar a su banda a la nación norteamericana. Sonaba como un sueño absurdo, y como resultado de esto, dejó soltar unas risas.

Después de unos cinco minutos, terminó uno de los primeros pasos de su rutina de higiene personal y decidió darse un baño.


Para su sorpresa, Shohei se había levantado cinco minutos antes de que la alarma que había configurado para las cuatro y diez de la mañana sonara. Se sentía de una manera extraña.

No estando seguro de qué exactamente era aquél sentimiento, decidió dejarlo a un lado y ocuparse de estar listo para cuando sus invitados de honor llegaran.

Caminó hasta su baño, prendió la luz y se miró al espejo. No veía nada en particular, nada raro, nada que no fuera normal; pero por alguna razón tenía un mal presentimiento. Sentía que algo no iría como planeado en el viaje que tomaría en tres horas.

Luego de tomar una ducha y vestirse, su estómago rugió de una manera particularmente fuerte. Si no comía algo y esperaba hasta que llegaran al aeropuerto se desmayaría por seguro, debido a esto, bajó las escaleras y se dirigió hasta la cocina.

Mientras que buscaba los ingredientes para su desayuno, sus pensamientos no podían evitar estar alborotados.

No sé qué me pasa...¿será que de verdad no quiero ver a Yutori? —Abrió la nevera y se quedó mirando hacia la luz proveniente de esta—. Pero si a mí no me cae tan mal como todos creen, sólo es que...realmente no sé cómo ponerlo.—Sacó dos huevos. Optó por un desayuno americano tradicional, y que sería rápido de preparar—. Siendo sincero, es un chico bastante agradable, aunque en algunas ocasiones sea hiperkinético y efervescente, pero por alguna razón me molesta que se le pegue a Aki tanto.—Sacó un sartén de uno de los gabinetes de la cocina. En vez de buscar el aceite de oliva como usualmente haría, se quedó pensando—. Ugh, ni si quiera sé si ese es el verdadero motivo por el cual me desagrada.—Colocó su mano en su frente y una expresión de confusión se apoderó de su rostro. Por más que trataba de solucionar el dilemma interno por el cual atravesaba en este momento, le era imposible—. Simplemente me siento extraño. Tal vez quiero disculparme con él por actuar tan distante, pero tampoco sé exactamente qué decirle. Tan sólo espero que no pase nada hoy...

Perdidos en Estados Unidos⎢アルルカン (Alrequin)、ペンタゴん (Pentagon)⎢Where stories live. Discover now